Mensaje de la editora

Camille Villafañe-Rodríguez, PhD
Editora

¡Estamos de fiesta! Con la publicación de este número, la revista [in]genios celebra su décimo aniversario de publicación ininterrumpida. A lo largo de esta última década tan maravillosa, hemos sido testigos del increíble talento investigativo y creativo del estudiantado subgraduado de la Universidad de Puerto Rico, la Escuela de Artes Plásticas y Diseño, y el Conservatorio de Música de Puerto Rico. 

En este número, resalta la variedad de investigaciones orientadas hacia la documentación histórica y cultural de Puerto Rico, tal y como podemos observar en el artículo titulado “El Festival de Bomba y Plena: 50 Años de trayectoria. Origen y perdurabilidad como elemento en la identidad cultural de Puerto Rico”. En otros, tales como “Análisis multivariado de factores claves en el desempeño académico de escuelas públicas de Puerto Rico” y “La utilidad de la calculadora gráfica en el aula de clases”, se puede notar un claro interés en analizar distintos métodos educativos y conductas estudiantiles que prevalecen en los espacios académicos de la Isla. 

Además, algunos artículos atienden problemáticas sociales particularmente relevantes en la actualidad de la población puertorriqueña, como podemos ver en “Internalización de la violencia en hombres heterosexuales en Puerto Rico” o en “Reviviendo Río Piedras: incentivos empresariales para el crecimiento económico”. En fin, todos estos trabajos reflejan un gran compromiso con el bienestar social y cultural de nuestra Isla mediante una variedad de enfoques académicos que enriquecen nuestra misión como una revista interdisciplinaria. 

Este volumen también contiene una diversidad de obras creativas, incluyendo obras de artes plásticas, cuentos, poemas, y hasta una pieza creativa que fusiona la poesía con el manifiesto, titulada “Tinta invisible”. En palabras de su evaluador, es una escritura que refleja la llegada del siglo XXI a la conciencia literaria de los escritores jóvenes. 

De parte de nuestro equipo de trabajo, agradecemos a toda nuestra comunidad lectora por apoyarnos durante una década completa y, por supuesto, a les autores de este número tan especial. ¡Enhorabuena! 

Posted on May 31, 2024 .

La utilidad de la calculadora gráfica en el aula de clases

The usefulness of graphing calculators in the classroom

Sheyleen M. Rosado Ramos
Programa de Educación Secundaria en Matemáticas
Facultad de Educación, UPR RP

 

Recibido: 13/02/2024; Revisado: 29/03/2024; Aceptado: 14/04/2024

Resumen 

Nuestro objetivo en esta investigación es identificar si el uso de la calculadora gráfica tiene un impacto positivo o negativo en el desarrollo de aprendizaje de los estudiantes. El escenario seleccionado fue una escuela superior, perteneciente a la Región Educativa de San Juan, Puerto Rico. Por medio de una lección de funciones inversas, se realizaron anotaciones sobre el desarrollo de aprendizaje de los estudiantes, con la implementación de la calculadora gráfica TI-84. Se halló que el uso de calculadoras gráficas en el aula de clases tiene un impacto positivo en el desarrollo de conocimientos de los estudiantes. En fin, esta investigación aporta al debate sobre la utilidad de las calculadoras gráficas en el ambiente educativo matemático.  

Palabras claves: calculadora gráfica, funciones inversas, matemáticas, tecnología educativa   

Abstract 

Our objective in this research is to identify whether the use of graphing calculators have a positive or negative impact on students' learning development. The selected scenario was a high school, belonging to the Educational Region of San Juan, Puerto Rico. Through a lesson on inverse functions, notes were made on the students' learning development, with the implementation of the TI-84 graphing calculator. It was found that the use of graphing calculators in the classroom had a positive impact on the development of the students' knowledge. In short, this research contributes to the debate about the usefulness of graphing calculators in the mathematical educational environment. 

Keywords: graphic calculator, inverse functions, mathematics, educational technology   

Introducción 

La tecnología ha llegado para quedarse, y ha hecho camino dentro de nuestros salones de clase. Ante esto, ha surgido un debate sobre si la incorporación de instrumentos tecnológicos es de beneficio o no para el proceso de aprendizaje de los estudiantes. Las calculadoras gráficas, en especial, han causado mucho furor en la comunidad educativa matemática. Desde su creación en mediados de los ochenta, se han vuelto parte de los salones de matemáticas a nivel mundial (Mitchelmore y Cavanagh, 2003). Algunos sostienen que es una herramienta útil y necesaria a la hora de enseñar una lección matemática y que permite realizar conexiones entre representaciones (Horton et al., 2004); otros exponen que dificultan el flujo de la clase (Aytac, 2006).   

Se han realizado estudios que buscan identificar las ventajas y desventajas de la incorporación de calculadoras gráficas al currículo matemático. En el lado de las ventajas, Dunham y Dick (1994) encontraron que los estudiantes que utilizan calculadoras gráficas: presentan niveles altos de comprensión gráfica, son más capaces de relacionar gráficos con sus ecuaciones, pueden leer e interpretar información gráfica, obtienen más información de los gráficos, tienen mayores logros generales en la representación gráfica de elementos, son mejores para hallar una representación algebraica para un gráfico, comprenden mejor las características globales de las funciones, aumentan su "base de ejemplos" para funciones examinando una mayor variedad de representaciones, y comprenden mejor las conexiones entre representaciones gráficas, numéricas y algebraicas. Además, en un estudio realizado por Serdina Parrot y Leong (2018), se concluyó que el uso de calculadoras gráficas está conectado a mejores puntuaciones en ejercicios de resolución de problemas.  

Cabe destacar que, para obtener logros como estos, se recomienda comenzar con enseñar a los estudiantes las funciones que pueden realizar las calculadoras gráficas (Jeanne y Hollister, 1997), y enseñar a los estudiantes primero de la forma tradicional (con lápiz y papel) y, luego, con la calculadora gráfica (Mitchelmore y Cavanagh, 2003). Además, se encontró que el uso de la calculadora gráfica permite a estudiantes de diversidad funcional demostrar en mayor medida sus habilidades para resolver problemas (Bouck, 2009). Por lo tanto, siempre que se sigan estos pasos, existen puntos a favor de su validez como una herramienta útil para el aula.  

Sin embargo, existen aquellos que no están convencidos. Según Aytac (2006), los maestros tienen dudas sobre el uso de la calculadora gráfica en sus salones por una variedad de razones. La primera es por el tiempo y los recursos que necesitan tanto los maestros como los estudiantes para aprender a utilizarla efectivamente, que no siempre se les es posible tener. Otra razón es la posibilidad de que, cuando el maestro esté demostrando los pasos para utilizar la calculadora, a algunos estudiantes se les dificulte ir al mismo ritmo que los demás estudiantes, y que esto les atrase su proceso de aprendizaje. Además, también les preocupa que surjan situaciones en las que, por lo complicado que puede ser manejar una calculadora gráfica, a los estudiantes les aparezca un error que el maestro se le dificulte o no sepa como arreglar rápidamente.  

En la investigación realizada por Doerr y Zangor (2000), encontraron que una de las limitaciones negativas del uso de la calculadora gráfica en el aula de clases fue su uso como dispositivo privado. Aunque observaron que los estudiantes utilizaban sus calculadoras mientras el maestro o sus compañeros participaban en una discusión de la clase, también notaron que el uso individual de la calculadora interrumpía las comunicaciones grupales. Una vez que los estudiantes empezaban a trabajar individualmente, les era complicado volver a trabajar en grupo, pues sus formas de pensar sobre el problema habían progresado en diferentes direcciones.  

Existe una teoría que indica que el papel que tome el maestro en el uso de la tecnología es crucial (Goos et al., 2000). Existen cuatro roles que el maestro puede tomar en cuanto a su relación con la tecnología, los cuales son:  

  1. La tecnología como maestro: el maestro está subordinado a la tecnología y está limitado a usar las herramientas que le permitan las circunstancias o su conocimiento individual limitado.  

  2. La tecnología como sirviente: el maestro puede tener conocimiento sobre la tecnología, pero solo la usa para respaldar sus métodos de enseñanza preferidos; no es creativo con ella.  

  3. La tecnología como compañera: el maestro ha desarrollado una afinidad por la clase y por los recursos tecnológicos disponibles. Por lo tanto, va a utilizar la tecnología de forma creativa e innovadora.  

  4. La tecnología como extensión de uno mismo: al maestro se le hace tan natural el uso de la tecnología matemática como el de sus habilidades matemáticas pedagógicas.  

Tomando todo esto en consideración, en este artículo interesamos demostrar la utilidad de la calculadora gráfica en el aula de clases. Utilizando la calculadora gráfica TI-84, en esta investigación, buscaremos contestar las siguientes preguntas: ¿cómo fue el manejo de las calculadoras por los estudiantes?, ¿cuáles fueron las dificultades que enfrentaron los estudiantes? y ¿cuál fue la reacción de los estudiantes durante el proceso de usar la calculadora? 

En fin, nuestro objetivo para esta investigación es identificar el impacto positivo o negativo que puede tener, en el desarrollo de aprendizaje de los estudiantes, el uso de la calculadora gráfica. 

Metodología 

En esta investigación, participaron 19 estudiantes de undécimo grado, pertenecientes a la Región Educativa de San Juan. Se utilizaron 10 calculadoras gráficas del modelo Texas Instruments-84, con las cuales trabajaron grupos de 2 a 3 estudiantes. Se compartió una presentación que incluyó las definiciones de los conceptos que íbamos a repasar. Nuestra variable independiente, en este caso, fue el uso de la calculadora gráfica para la lección, y nuestra variable dependiente fue el desarrollo de aprendizaje de los estudiantes. El método de recolección de datos que se utilizó fue el de anotaciones de campo. Estos son registros descriptivos que incluyen las impresiones del anotador.   

El tema que se escogió para incorporar la calculadora gráfica fue el de Funciones inversas. Comenzamos la clase repasando el concepto de una función inversa y el proceso para hallar la inversa de una función. En la pantalla, presentamos una diapositiva que contenía la definición del concepto (ver Figura 1). 

 

Figura 1: Función inversa, 2024 

Fuente: Elaborado por la autora 

 Además de lo presentado, se les explicó a los estudiantes que no todas las funciones tienen inversa. Esto sucede porque, si la función no es inyectiva, cuando quiera ver, a través de f-1(x), cuál es el valor del codominio en el dominio, no voy a poder determinar cuál es porque tendré más de un valor. Hicimos hincapié en que la inversa solo puede tener un solo valor. Explicado esto, se hicieron dos ejercicios de ejemplo para que los estudiantes vieran cómo debían trabajar este tema. Se les explicó que los pasos a seguir para resolver los ejercicios son:  

    1.Despejar para la variable x. 

    2. Intercambiar las variables. 

    3. Expresarla como inversa. 

    4. Hacer revisión. 

      a. Seleccionar un valor para x, y sustituirlo en la función original f(x).

      b. Lo que obtengamos, vamos a usarlo como valor de x para la función inversa f-1(x).

      c. Al realizar la sustitución, el resultado final debe ser el mismo valor que le dimos a x al comienzo, en la función original.

El primer ejercicio, el cual resolvimos juntos, fue de hallar la inversa de la función f(x)=2x. Siguiendo los pasos, obtuvimos que su función inversa era f-1(x). Para el segundo ejercicio, buscamos la función inversa de f(x) = 4x+7. Obtuvimos que era f-1(x)=x-7/4.

Les dimos a los estudiantes un tercer ejercicio para que lo hicieran por su cuenta, en sus libretas, y luego lo discutimos. El ejercicio se trataba de hallar la función inversa de f(x)=5x+1/3. Luego de unos minutos, y de aclarar dudas, se les pidió que mostraran su trabajo y explicaran cómo lo resolvieron. Al final, la resolución al ejercicio fue que f-1(x)=x-1/3/5.

Ya que los estudiantes mostraban entender cómo hallar la inversa de una función a mano, repartimos las calculadoras gráficas TI-84 para que vieran las gráficas de las funciones y sus inversas que encontramos. En grupos de 2 a 3, se les explicó las instrucciones de lo que debían hacer en la calculadora. Antes de pasar al siguiente paso, nos aseguramos de que todos los estudiantes estuvieran claros y yendo al mismo ritmo que los demás. Las instrucciones fueron:    

    1. Presionaremos el botón y =, y en Y1 escribiremos la función. 

    2. Presionaremos el botón zoom. Aquí, presionaremos ZSquare. Esto nos mostrará la gráfica de la función.   

    3. Ahora graficaremos la línea y=x. Presionaremos, entonces, el botón y =.   

    4. En Y2=, pondremos x. 

    5. Presionaremos zoom, y luego ZSquare. Esto nos mostrará la gráfica.    

    6. Ahora, para la inversa, presionaremos 2nd y draw.   

    7. Aparecerá un menú. 

      a. En DRAW, presionaremos el botón del número al que le corresponda DrawInv.    

      b. En pantalla, esperará a que le digamos donde está guardada la función. Para ver en dónde está, presionaremos alpha y luego trace. Donde aparezca que está Y1, eso presionamos. De enter.  

      c. Nos llevará automáticamente a la gráfica para que veamos cómo se forma.  

Al finalizar, se les pidió a los estudiantes que analizaran la gráfica que estaban viendo, y explicaran el comportamiento de la recta de la función y de su respectiva función inversa. Aprovechando este momento, se les explicó a los estudiantes que, en una gráfica, la función inversa es el reflejo de la función original sobre la línea de 𝑥=𝑦 (línea de identidad). Luego de aclarar las dudas que surgieron, se finalizó la clase.   

Al concluir, se tomaron las anotaciones de campo (mostradas a continuación), de acuerdo con las observaciones realizadas durante el transcurso de la clase. Dejándonos llevar por las preguntas iniciales de esta investigación, se realizó un análisis de nuestros objetivos, y si estos habían sido cumplidos o no.  

Figura 2: Anotaciones de campo, 2024 

Fuente: Elaborado por la autora 

 Hallazgos y discusión 

Según los hallazgos, los estudiantes presentaron una actitud positiva hacia la implementación de calculadoras gráficas en la clase. Al ya saber cómo hallar la inversa de una función, utilizar la calculadora les sirvió para conectar los conceptos que se estaban estudiando. Además, los estudiantes pudieron identificar, mediante el análisis, las definiciones de conceptos sin darse de antemano. Este fue el caso con la línea de identidad, la cual sirve como el medio sobre el cual la recta de la función se refleja, creando la recta de la función inversa. Los estudiantes pudieron identificar que la recta de la función y de su inversa eran reflejos una de la otra, cuando se dieron cuenta de la forma en la que la línea de identidad estaba dividiendo el plano. Por lo tanto, podemos concluir que la calculadora gráfica sirvió para que los estudiantes entendieran la relación entre una función y su inversa, y como esta se refleja gráficamente.  

Los estudiantes presentaron un buen manejo de las calculadoras. Al ya haberlas utilizado anteriormente, conocían cómo manejar las operaciones básicas. Esto les permitió aprender a usar las funciones más complicadas de la calculadora de una forma más fluida y eficaz. Sin embargo, hubo algunas dificultades en cuanto a cuáles botones presionar para utilizar las variables, pero esto fue resuelto rápidamente. Al final, los estudiantes mostraron tener una actitud positiva hacia el proceso de utilizar una calculadora gráfica. Aunque hubo momentos de dudas, esto no los desmotivó, y continuaron con la lección.  

Nuestro objetivo en esta investigación era identificar si el uso de la calculadora gráfica tendría un impacto positivo o negativo en el desarrollo de aprendizaje de los estudiantes. Según lo encontrado, podemos concluir que tuvo un impacto positivo. Los alumnos, además de haberse mostrado emocionados por utilizarla, lograron desarrollar dos habilidades matemáticas muy importantes durante esta lección. La primera fue la capacidad de crear conexiones que les permitan hallar e internalizar otros conceptos por medio de la observación y el análisis. En matemáticas, existen formas diferentes de hallar una misma solución. Por esa razón, poder crear conexiones basándonos en nuestro propio análisis nos permitirá hallar formas de solucionar problemas las cuales aún no hayamos visto. La segunda trata sobre el desarrollo de una mentalidad de crecimiento. Este tipo de mentalidad se basa en la creencia de que las capacidades de un individuo pueden mejorar con la práctica, que no se quedan de una sola forma para siempre. Los estudiantes presentaron señales de haber ejercitado una mentalidad de crecimiento cuando, a pesar de la dificultad que pudieron tener utilizando las funciones de la calculadora gráfica más complicadas, no se desmotivaron ni decidieron rendirse. Al contrario, se mostraron resilientes y hallaron las respuestas que buscaban. 

Conclusión 

Logramos concluir, de acuerdo a lo observado durante nuestra investigación, que el uso de calculadoras gráficas en el aula de clases tiene un impacto positivo en el desarrollo de conocimientos de los estudiantes. Sin embargo, en esta investigación hubo ciertas limitaciones. Una fue la cantidad de clases que se realizaron para llevar a cabo la investigación. Por cuestiones de tiempo, solo se pudo realizar por medio de una sola lección. Otra fue por la cantidad limitada de calculadoras gráficas en el salón. Aunque se pudo solucionar creando grupos de trabajo, los resultados obtenidos pudieron haber sido distintos si a cada estudiante se le diera su propia calculadora. Para futuros estudios, es recomendable llevar a cabo esta investigación con más calculadoras por estudiante, y a través de más de una lección. Además, también se podría incluir una sección que incluya cómo los estudiantes de acomodo razonable se vieron impactados; es decir, si las calculadoras gráficas mejoraron, empeoraron, o si mantuvieron el mismo nivel de desarrollo de conocimientos. Esto porque, de acuerdo a la literatura, el uso de la calculadora gráfica como herramienta de acomodo razonable también se cuestiona. En fin, esta investigación sirve como una aportación al debate sobre la utilidad de las calculadoras gráficas en el ambiente educativo matemático.  

Referencias 

 Aytac, G. (2006). Individual and situational factors that influence teachers' perspectives and perceptions about the usefulness of graphing calculator for student success [Tesis doctoral, Syracuse University]. ProQuest Dissertations and Theses Global. 

Bouck, E. (2009). Calculating the value of graphing calculators for seventh-grade students with and without disabilities: A pilot study. Remedial and Special Education, 30(4), 207–215. https://doi.org/10.1177/0741932508321010 

Cavanagh, S. (2005). NCTM Elaborates on position on the use of calculators in classrooms. Education Week, 24(39), 10.   

Doerr, H. M., & Zangor, R. (2000). Creating meaning for and with the graphing calculator. Educational Studies in Mathematics, 43, 143–163. https://doi.org/10.1023/A:1003905929557 

Dunham, P., & Dick, T. (1994). Research on graphing calculators. The Mathematics Teacher, 87(6), 440–445.   

Goos, M., Galbraith, P., Renshaw, P., & Geiger, V. (2000). Reshaping teacher and student roles in technology-enriched classrooms. Mathematics Education Research Journal, 12(3), 303–320. https://doi.org/ 10.1007/BF03217091 

Horton, R. M., Storm, J., & Leonard, W. H. (2004). The graphing calculator as an aid to teaching algebra. Contemporary Issues in Technology and Teacher Education, 4, 152–162.   

Jeanne, S., & Hollister, D. (1997). How mastering technology can transform math class. Educational Leadership, 55(3), 49–51.   

Mitchelmore, M., & Cavanagh, M. (2003). Graphing calculators in the learnings of mathematics: Teacher understandings and classroom practices. Mathematics Teacher Education and Development, 5, 3–18.   

Serdina Parrot, M. A., & Leong, K. E. (2018). Impact of using graphing calculator in problem solving. International Electronic Journal of Mathematics Education, 13(3), 139–148. https://doi.org/10.12973/iejme/2704  


Posted on May 30, 2024 .

El oficio de las mujeres caborrojeñas de las calles Muñoz Rivera y Mariano Quiñones en el 1910

The jobs of caborrojeña women on Muñoz Rivera and Mariano Quiñones streets in 1910

Sofía L. Pérez-Suárez
Departamento de Sociología y Antropología 
Facultad de Ciencias Sociales, UPR RP

  

Recibido: 01/03/2024; Revisado: 28/04/2024; Aceptado: 21/04/2024

Resumen 

Esta investigación aborda los tipos de oficios que ejercían las mujeres caborrojeñas de las calles Muñoz Rivera y Mariano Quiñones en 1910. Mediante el censo, se identificaron un total de 41 mujeres entre las edades de 10 a 40 años. Los resultados del censo demostraron que el oficio principal de estas mujeres, residentes de las calles antes mencionadas, eran los “quehaceres del hogar”. En efecto, concluye la idea errónea que existe sobre los oficios que ejercían las mujeres de la época; en especial, se generaliza que las mujeres de inicios del siglo XX en su mayoría eran costureras. 

Palabras claves: oficio, Cabo Rojo, censo 1910 

Abstract 

This research involves the types of occupations that Caborrojeña women from the Muñoz Rivera and Mariano Quiñones streets practiced in 1910. A total of 41 women were identified through the census. The census results showed that the main occupations of the Caborrojeña who resided in the aforementioned streets were “household chores.” Indeed, it concludes the mistaken idea that exists about the occupation that women of that period practiced; in particular, it is generalized that women from the early 20th century were mostly seamstresses. 

Keywords: jobs, Cabo Rojo, census 1910 

Introducción 

La aportación de la mujer en la fuerza laboral es un tema crucial, especialmente cuando nos referimos a la mujer partícipe de la fuerza laboral de principios del siglo XX en Puerto Rico. La mujer puertorriqueña asalariada enfrentó varios cambios dada la hegemonía colonial. Puerto Rico pasó de ser producto del mercantilismo anticuado al sistema afilador neoliberal y moderno de los Estados Unidos. Entre 1900 y 1930, los estadounidenses invirtieron mucho de su capital en Puerto Rico; por tal razón, la economía puertorriqueña fue industrializada. Con esta nueva administración, las mujeres pobres que dependían de la manufactura de ropa a domicilio como principal fuente de ingreso, se convertirían en futuras trabajadoras que propagarían la segunda actividad económica más importante del país. Dicho esto, no significa que había un oficio en particular que ocupaban estas mujeres de la época. Muchas de las industrias estaban en municipios más “desarrollados” como Mayagüez y otros municipios del oeste. Los otros municipios pequeños y propiamente menos “desarrollados”, como pueblos sureños, no son lo suficientemente estudiados para saber qué otros tipos de oficios ocupaban las mujeres puertorriqueñas a principios del siglo XX.  

Tomando esto en consideración, el trasfondo histórico de cómo se perpetuó la visión femenina en la fuerza laboral es sumamente transformativo, pues permite evaluar la posición de la mujer hoy día en contextos socioculturales. Dentro de esta investigación, se hace un enfoque analítico de las calles colindantes de la plaza de Cabo Rojo, las calles Muñoz Rivera y Mariano Quiñones, en el área urbana del Pueblo Norte. Por ende, la investigación se enfocará en contestar la siguiente interrogante: ¿Qué tipo de oficio realizaban las mujeres caborrojeñas de las calles Muñoz Rivera y Mariano Quiñones en 1910? La hipótesis ha de demostrar, basada en aproximación municipal, que el oficio principal de las mujeres caborrojeñas de las calles mencionadas era en la industria de la aguja. 

Objetivos 

Los objetivos de esta investigación histórica, descriptiva, documental y estudio de caso son:  

  1. Identificar los oficios de las mujeres en el municipio de Cabo Rojo en 1910.  

  2. Identificar en el censo de 1910 los tipos de oficios que ejercían las mujeres caborrojeñas de las calles Muñoz Rivera y Mariano Quiñones en 1910.  

  3. Tabular los hallazgos relacionados a los oficios de las calles Muñoz Rivera y Mariano Quiñones en 1910.  

  4. Establecer el contexto histórico de la fuerza laboral en Puerto Rico desde 1898 hasta 1910.  

Justificación 

Esta investigación ayuda a fomentar un contexto histórico de la mujer, no solo en la fuerza laboral, sino en ámbitos más grandes, como su encaminamiento a ser digna de trato igualitario referente a la posición del hombre en la sociedad puertorriqueña. Dado que esta investigación es un estudio de caso, es sumamente relevante esclarecer que no existen investigaciones que aborden la mujer en la fuerza laboral en el municipio de Cabo Rojo. 

Revisión de literatura 

La revisión de literatura se enfoca en identificar fuentes relacionadas al impacto de la mujer caborrojeña en la fuerza laboral a principios del siglo XX, tomando en consideración la hegemonía estadounidense sobre el país de Puerto Rico. Se estará dilucidando los argumentos mediante dos temáticas diferentes: “la fuerza laboral en Estados Unidos y Puerto Rico” y “la mujer en la fuerza laboral de Puerto Rico”. 

La fuerza laboral en Estados Unidos y Puerto Rico 

En el artículo de Galvin (1976) se analiza el movimiento laboral con respecto al rol que tuvo a principios de la década el American Federation of Labor al igual que los cambios que tuvieron las uniones militares y el nacionalismo con respecto a la organización laboral. Mucho de lo que expone el autor resume los principios que tuvo el trabajo laboral en Puerto Rico, tras la invasión española y estadounidense. Asimismo, crea una línea de tiempo del 1898 hasta la década de los setenta con la intención de informar al lector las acciones impotentes que se estaban tratando de legislar para mantener y forzar la organización laboral. En cambio, el artículo de Quintero (1978) se enfoca más en las primeras tres décadas del siglo XX con relación a la dominación colonial estadounidense en Puerto Rico, debido a que considera el impacto político que tuvo dicha hegemonía colonizadora sobre la clase obrera como ente de subordinación.  

Frente al interés de los inversionistas norteamericanos en la producción, específicamente en el control de tierras para el desarrollo de la industria azucarera, los hacendados constituían la clase antagónica de los intereses imperialistas, y la política colonial durante los primeros años de ocupación fue dirigida claramente a quebrar su hegemonía. (pp. 1121-1122)   

Por otra parte, Campos et al. (1976) tienen como fin analizar cómo la industrialización y la migración han contribuido y afectado la clase obrera puertorriqueña. Se enfocan en investigar las consecuencias que trajo la adjudicación de los puertorriqueños trabajadores como mano de obra, tanto en términos de trato como beneficio financiero. Asimismo, investigan la integración de las mujeres en el desarrollo de las manufacturas e industrias que se estaban estableciendo con la llegada de la “Operación Manos a la Obra”, gracias al desarrollo industrial que impulso el auge nacionalista. Siguiendo esa línea de pensamiento, mediante un análisis de estudio de mediados de siglo XX, Gregory (1958) aborda en la primera sección de su escrito los orígenes y la incorporación del obrero en el mercado de trabajo industrial. Mientras que en la segunda sección evalúa el comportamiento de la fuerza obrera en el mercado junto a sus variables de adaptabilidad, como lo son la estabilidad y la movilidad obrera. Por último, la tercera sección trata sobre cómo ciertos factores han contribuido a la facilitación de la adaptación a los obreros de la industria.   

La mujer en la fuerza laboral de Puerto Rico 

Silvestrini (1979) sintetiza la aportación que tuvo la mujer puertorriqueña para la reproducción social y laboral en la década de los treinta, mediante un análisis de las estadísticas de la participación de las mujeres en la fuerza trabajadora y el tipo de empleo que tenían. Igualmente, expone cómo la mujer navegó ciertas turbulencias tras los cambios que se fortalecieron en las primeras décadas del siglo. Tales turbulencias, como luchar por el trato igualitario, llevaron a la mujer obrera a participar de la toma de decisiones, para así mejorar y optimizar sus condiciones de vida. Mientras tanto, Safa (1983) expone las consecuencias de la mujer trabajadora en los ámbitos sociales y laborales por un periodo de cuarenta años, que inicia en la década de los cuarenta hasta los ochenta. Existen ciertos factores que la autora expone como influyentes en los empleos femeninos, de manera que contextualiza la mujer trabajadora y su empleo tras crecimientos económicos, patriarcales y estratégicos. Presenta también los efectos del alza en las tasas de migración y la integración de incentivos por parte del Estado hacia industrias extranjeras. Dicho esto, la autora hace un análisis sociológico sobre los distintos derechos que poseían las mujeres trabajadoras jóvenes solteras y mujeres mayores casadas en fábricas de Nueva Jersey para compararlo con la crisis en Puerto Rico. 

Doris Quiñones (1999), en el capítulo “Construcción social del deber ser mujer” de su tesis Construcción social de la imagen de persona negra en medios de comunicación visual en Puerto Rico, aborda cómo la mujer y la mujer negra puertorriqueña caracterizan los primeros veinte años del siglo XX por su aumento significativo en la inserción del trabajo asalariado. Según Quiñones, la producción de haciendas fue poco a poco sustituida por grandes plantaciones de monocultivo y centrales azucareras. Dicho avance tecnológico dejó a muchos hombres sin trabajos. Resentidos por la pérdida de espacios y su pertenencia en el orden social, los hombres “percibían la apertura de competencia en escenarios de trabajo en ventaja para las mujeres” (p. 31). Por otro lado, la autora señala que se apunta a una visión idealista por parte de sistemas de los grupos familiares (hombre, mujer e hijos), pues suponía que el hombre era el jefe de familia y la mujer que tenía un trabajo asalariado era solo una ayuda. Esta situación se agudizó cuando los propios patronos capitalistas que integraron a las mujeres a trabajar en sus lugares de empleo le bajaron significativamente el salario. Como consecuencia, muchas mujeres se veían forzadas a tener múltiples fuentes de ingresos. Muchas de ellas ejercieron empleos en la división sexual o en la industria de la aguja a domicilio.  

Por su parte, el artículo de Baerga-Santini (1999) tiene como objetivo dilucidar la institución de la mujer trabajadora en la industria de la aguja en Puerto Rico desde el periodo del 1914 al 1940 en dos partes. La primera parte se basa en evaluar los distintos tipos de trabajos que ejercían las mujeres dentro de la industria de la aguja y el proceso que se llevaba a cabo para realizar tareas específicas. Es decir, a medida que el comercio evolucionó, muchas de las tareas del inicio de siglo, como el trabajo con telas de encaje, habían sido sustituidas. La segunda parte del artículo se basa en contestar cómo fue que las mujeres adquirieron sus destrezas y cómo es que sus trabajos fueron vistos como “menos que” o “descalificados”: 

La creencia generalizada de que la costura ‘había sido una ocupación de las mujeres de Puerto Rico por siglos’, justificó la percepción de que la isla constituía una fuente inagotable de mano de obra barata y descalificada. (Barrow, 1935, como se citó en Baerga-Santini, 1999, p. 159)  

En un artículo posterior, Baerga-Santini (2003) expone las pruebas y tribulaciones que enfrentaron las mujeres del trabajo industrial a domicilio entre las décadas de los veinte y los cuarenta con respecto a la sindicalización. La autora esclarece las diferencias que estas mujeres trabajadoras tenían en relación con las mujeres trabajadoras de las fábricas. Según Baerga-Santini, las mujeres que trabajaban en sus casas no poseían ciertos privilegios que las “otras” mujeres sí poseían. Por ende, muchas de las mujeres a domicilio abogarán por sus derechos y le dejarán saber al resto del país puertorriqueño que hay una gran diferencia entre una “mujer trabajadora” y una “mujer trabajadora asalariada”. Tomando eso cuenta, la tesis de Nuria Zayas-Monge (1998) se basa en estudiar a la mujer trabajadora asalariada en la industria de la aguja en el municipio de Mayagüez mediante los censos de 1910, 1920 y 1935, en ámbitos históricos y económicos. La autora divide su tesis en tres capítulos. En el primero estudia los factores que generaron el desarrollo de la industria en dicho municipio. Mientras que el segundo, presenta a la mujer trabajadora de la industria de la aguja que excede las expectativas del ámbito doméstico para ganar independencia económica. En el tercer capítulo hace una comparación y análisis prosopográfico de los censos, tomando en consideración el estado marital, la edad, raza y otros factores. 

Contexto histórico  

Para entender el contexto histórico de la mujer puertorriqueña en la fuerza laboral y situar su asentamiento en el pueblo de Cabo Rojo, debemos primero contextualizar la influencia que tuvo la invasión estadounidense en el modo de producción de Puerto Rico. Según Quintero (1978), antes de la invasión de los Estados Unidos en 1898, el modo de producción capitalista no era dominante, ya que a finales del siglo XIX aún predominaba la producción pequeña independiente mediante la economía de haciendas. En 1900 se estableció la Ley Foraker, la cual jugó un papel significativo en Puerto Rico, pues “la ley hacía Puerto Rico completamente dependiente de los Estados Unidos…” (Zayas-Monge, 1998, p. 10). En otras palabras, los estadounidenses estaban interesados en la exportación capital, comercio e inversiones en la producción de la colonia. Según Zayas-Monge (1998), Estados Unidos invirtió en el desarrollo de la industria azucarera en sus comienzos, lo cual implicó que muchos campesinos perderían el acceso a sus tierras y tendrían que recurrir a buscar trabajos asalariados para subsistir. “Todo lo anterior propició que las mujeres se fuesen incorporando cada vez más al mundo del trabajo asalariado, por la necesidad de contribuir también al ingreso del hogar” (p. 1).  

Según Silvestrini (1979), se necesitaron varios intentos para lograr la participación de las mujeres en el trabajo asalariado. En 1897, la Federación Regional de los Trabajadores de Puerto Rico establecía la igualdad de libertad y bienestar para los trabajadores de ambos sexos, lo que incidió a Federación Libre de Trabajadora en el 1899 a establecer, directamente, que las mujeres debían organizarse en todas las ramas de la industria, al igual que mujeres de otros oficios como cocineras, camareras, lavanderas y oficinistas. No obstante, la participación de las mujeres en la federación fue bastante limitada, lo cual causó que no se le diera trato igualitario, hasta que poco a poco las mujeres vendrían incorporándose a la fuerza laboral en las primeras décadas del siglo XX. Según Zayas-Monge (1998), las fuentes de trabajo más importantes para las mujeres eran el servicio doméstico, el despalillado de tabaco, el recogido de café y la costura.  

Cabo Rojo juega un papel muy importante en el desarrollo laboral. Se fundó el 17 de diciembre de 1771, pero quedó constituido como municipio de tercera categoría, bajo la Ley Foraker, de acuerdo con su valor de propiedad mueble. Cabo Rojo colinda con Mayagüez, Hormigueros, San Germán y Lajas. El municipio está subdividido en nueve barrios: Barrio Pueblo, el cual se subdivide en Pueblo Norte, Pueblo Nuevo y Pueblo Sur; Bajura; Boquerón; Guanajibo; Llanos Costa; Miradero; Monte Grande y Pedernales. Para 1910, Cabo Rojo constaba de una población de 19,562, y contaba con industrias de sombreros, cigarros y azúcar. Era rico en comercio y agricultura, pues llegó a producir anualmente hasta 350,000 toneladas de caña, al igual que café, algodón, frutas y leche. “Mantiene diversos talleres pequeños de ropa, ebanistería, talabartería, dulcería, carteras de mano para mujer, baúles, bastones, ladrillos, cal, aceite de coco etc. [sic]” (Ibern-Fleytas, 1960, p. 267). Barrio Pueblo constaba de dos farmacias, una oficina de teléfono, un hospital, una iglesia protestante, una escuela y la alcaldía.   

Metodología  

Se hizo un muestreo por cuotas, en el que se evaluaron un total de veintiún mujeres caborrojeñas de las calles Muñoz Rivera y veinte mujeres caborrojeñas de la calle Mariano Quiñones, inscritas en el censo del 1910, que estuviesen dentro de las edades de los 10 a 40 años. Se excluyeron las mujeres que estaban “en la escuela”. Por último, se evaluó si las mujeres caborrojeñas sabían leer y escribir y se transcribió el establecimiento en el cual trabajaban.  

Las calles pertenecen al Barrio Pueblo, específicamente en Pueblo Norte. Las mismas fueron seleccionadas basadas en la aproximación a la plaza pública Ramón Emeterio Betances, pues me pareció pertinente hallar si existe una diferencia en los tipos de oficios de las mujeres dada su cercanía a entes públicos que se describieron en el contexto histórico. La calle Muñoz Rivera está paralela al centro de la plaza, mientras que la calle Mariano Quiñones se encuentra tres calles detrás. Por otro lado, el reto más grande para el desarrollo de esta investigación es la inaccesibilidad a ciertos libros o textos, debido a que contenían restricciones. Sin embargo, hubo una consulta extensa de tesis, libros, páginas web y el censo, que sirvieron para contextualizar el problema de investigación.            

Hallazgos  

Los datos presentados en las siguientes tablas presentan los resultados de la investigación, cuyo propósito era conocer qué tipo de oficios tenían las mujeres caborrojeñas de las calles Muñoz Rivera y Mariano Quiñones en 1910. Las variables utilizadas en esta investigación fueron las edades y la alfabetización, es decir si las mujeres sabían leer y escribir.  

Los trabajos que tenían las mujeres de las calles Muñoz Rivera y Mariano Quiñones eran los quehaceres del hogar. En el caso de las mujeres residentes de la calle Muñoz Rivera hubo más variedad con relación a los diferentes trabajos que ejercían, a diferencia de la calle Mariano Quiñones, que solo se dedicaban a la manufactura de sombreros y a la cocina (ver Figura 1). Adicionalmente, las mujeres que más se dedicaban a los quehaceres del hogar eran mujeres entre los 31 y 40 años, a diferencia de las mujeres de la Mariano Quiñones que estaban entre los 10 a 20 años (ver Figura 2 y Figura 3). 

Figura 1: Oficios de mujeres caborrojeñas en las calles Muñoz Rivera y Mariano Quiñones en el 1910 

Fuente: Elaborado por la autora a partir del Censo E.E.U.U. (1910) 

Figura 2: Por ciento de mujeres caborrojeñas que residen en la calle Muñoz Rivera y sus oficios 

Fuente: Elaborado por la autora a partir del Censo E.E.U.U. (1910) 

Figura 3: Por ciento de mujeres caborrojeñas que residen en la calle Mariano Quiñones y sus oficios 

Fuente: Elaborado por la autora a partir del Censo E.E.U.U. (1910) 

Asimismo, se midió la alfabetización de las mujeres caborrojeñas residentes de la calle Muñoz Rivera y Mariano Quiñones, basada en rangos de edad. En el caso de las mujeres de la calle Muñoz Rivera, las mujeres con más alfabetización eran las mujeres entre 21 a 30 años, mientras que las mujeres que tenían menos alfabetización eran las mujeres de 10 a 20 años (ver Figura 4). Mientras, las mujeres de la calle Mariano Quiñones que tuvieron más alfabetización fueron las mujeres que estaban entre los 31 a 40 años, mientras que las mujeres con menos alfabetización fueron las mujeres entre los 10 a 20 años y los 21 a 30 años (ver Figura 4).  

Figura 4: Alfabetización por grupo de edad de las mujeres caborrojeñas residentes en las calles Mariano Quiñones y Muñoz Rivera 

Fuente: Elaborado por la autora a partir del Censo E.E.U.U. (1910) 

Discusión  

Los resultados de esta investigación establecen que el principal trabajo que ejercían las mujeres caborrojeñas de las calles Muñoz Rivera y Mariano Quiñones eran los quehaceres del hogar. La idea generalizada que tienen los investigadores de que la mujer, en su mayoría, se dedicaba a la industria de la aguja es un concepto erróneo. Por ende, estos resultados no guardan relación con las investigaciones de Quiñones (1999), Baerga Santini (1999) y Baerga Santini (2003), quienes describen la mujer solo en ámbitos de la industria de la aguja. Los trabajos de Silvestrini (1979) y Zayas-Monge (1998) coinciden con esta investigación, a pesar de que una se enfoca en el movimiento obrero de la mujer en la década de los treinta y la otra presenta un perfil prosopográfico de las mujeres residentes de Mayagüez que trabajaban en la industria de la aguja. Silvestrini (1979) estableció que, entre la década de los treinta a cuarenta, hubo una reducción en el número de mujeres en el servicio doméstico, al igual que ocurre un desplazamiento cuyo centro era de trabajo a domicilio a fábricas. En el contexto histórico, según Zayas Monge (1998), los trabajos más importantes para las mujeres eran el servicio doméstico, el despalillado de tabaco, el recogido de café y la costura.  

La Figura 1 presenta que el segundo trabajo más común en estas calles era tejer sombreros, lo cual coincide con los hallazgos de Sepúlveda-Rivera (2004), quien establece que para el 1910 Cabo Rojo contaba con la manufactura de sombreros. Ahora bien, a diferencia de la calle Mariano Quiñones (que solo cuenta con mujeres que se dedicaban a los quehaceres de casa, a la manufactura de sombreros y a la cocinería), la calle Muñoz Rivera tuvo más diversidad de oficios, pues también había mujeres sirvientas y modistas. En el caso de las mujeres modistas, los resultados coinciden con la aportación de Ibern-Fleytas (1960), quien estableció que Cabo Rojo también contaba con pequeños talleres de ropa y de carteras para mujeres. Las Figuras 2 y 3 demuestran que las mujeres de la calle Muñoz Rivera que más se dedicaban a los quehaceres de la casa eran aquellas entre las edades de 31 y 40 años, mientras que las mujeres de la calle Mariano Quiñones que se dedicaban a esto tenían entre 10 a 20 años.   

Por otra parte, la Figura 4 presenta que las mujeres trabajadoras de la calle Muñoz Rivera tenían un grado más alto de alfabetización que las mujeres trabajadoras de las calles Mariano Quiñones. En la calle Muñoz Rivera, ocho mujeres entre los 21 a 30 años sabían leer y escribir, mientras que cinco sabían leer y escribir en la Mariano Quiñones.  

Los hallazgos encontrados tienen una limitación significativa, pues la muestra es pequeña. Se está evaluando los tipos de oficios que tenían las mujeres caborrojeñas de un sector que no es lo suficientemente estudiado, por lo que no existe mucha información del tema. Además, la muestra es pequeña debido a que no existe mucha documentación de las calles que estaban lejanas a la plaza pública. Había varias páginas del censo sobre la calle Muñoz Rivera y de calles cercanas a la Muñoz Rivera, pero no de la Mariano Quiñones, por lo que me limité a utilizar el total de mujeres trabajadoras que aparecían en dicha calle. Sería interesante continuar esta investigación con una muestra más grande, al comparar un barrio más cercano a la costa, como Miradero, con uno en el campo, como Monte Grande.    

Conclusión  

Tomando en consideración los objetivos generales y el problema de investigación, el oficio principal de las mujeres caborrojeñas de las calles Muñoz Rivera y Mariano Quiñones en el 1910 son los quehaceres del hogar con un 68%. Otras mujeres se dedicaban a la manufactura de los sombreros y la cocina. En el caso específico de las mujeres residentes de la calle Muñoz Rivera, se les añade ser modistas y sirvientas. Por consiguiente, se rechaza la hipótesis planteada al inicio de la investigación, ya que no existe relación entre la aproximación municipal de Mayagüez con el oficio principal de las mujeres ser la industria de la aguja.   

El hecho de que el oficio principal de las mujeres caborrojeñas de estas calles fue el servicio doméstico solo reafirma el contexto histórico y la revisión de literatura, cuando muchos historiadores y antropólogos apaciguan o contrarrestan la contribución de la mujer en contextos socioculturales. Solo Silvestrini (1979) y Zayas-Monge (1998) contemplan que las mujeres tuvieron otras contribuciones al aspecto socioeconómico de Puerto Rico. A pesar de que la autora Baerga-Santini (1999) y Baerga Santini (2003) no menciona las contribuciones de las mujeres a principios del siglo XX, denota que las mujeres que trabajaban a domicilio seguían ejerciendo trabajo asalariado, pues de igual manera trabajaban para recaudar dinero, aunque no fuese en una fábrica. Ahora bien, aunque en su mayoría las mujeres caborrojeñas de ambas calles no trabajaban para recaudar dinero, bajo definición pertenecen a la fuerza laboral. Cuando nos referimos al concepto de la fuerza laboral nos referimos a “la suma de las capacidades mentales y físicas inherentes a cada individuo para desempeñar labores específicas” (Alvarado, 2024), y esto es precisamente lo que hicieron. Estos hallazgos promueven eliminar el pensamiento estereotipado de que las mujeres que se dedican a cuidar sus hijos y la casa no trabajan.

Referencias 

Alvarado, M. (2024). A qué se le llama fuerza de trabajo en la perspectiva de Karl Marx. Situam. https://situam.org.mx/trabajo/a-que-se-le-llama-fuerza-de-trabajo.html 

Baerga-Santini, M. (1999). Trabajo diestro sin trabajadores diestras: La (des)calificación en la industria de la aguja en Puerto Rico, 1914-1940. Revista de estudios de género: La ventana, 1(9), 158–189. https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=5202227  

Baerga-Santini, M. (2003). La defensa del trabajo industrial a domicilio: Mujeres en contra de la sindicalización en Puerto Rico, 1920-1940. En L. Gutiérrez de Velasco (Ed.), Género y cultura en América Latina: Volumen II: Arte, historia y estudios de género (pp. 315–342). El Colegio de México. https://doi.org/10.2307/j.ctv47w9dv.18  

Campos, R., Bonilla, F., & Crabtree, P. L. (1976). Industrialization and migration: Some effects on the Puerto Rican working class. Latin American Perspectives, 3(3), 66–108. http://www.jstor.org/stable/2633202  

Galvin, M. (1976). The early development of the organized labor movement in Puerto Rico. Latin American Perspectives, 3(3), 17–35.  http://www.jstor.org/stable/2633199  

Gregory, P. (1958). El desarrollo de la fuerza obrera industrial en Puerto Rico. Revista de Ciencias Sociales, (4), 447–468.  https://revistas.upr.edu/index.php/rcs/article/view/9918  

Ibern-Fleytas, R. (1960). Capítulo XIX: pueblo y sus barrios. En W. Montalvo (Ed.), Historia de Cabo Rojo (pp. 279–287). Editora Montalvo. https://www.cervantesvirtual.com/nd/ark:/59851/bmcsr0p3  

Quintero, Á. G. (1978). La dominación imperialista del Estado en Puerto Rico y la política obrera (1900-1934). Revista Mexicana de Sociología, 40(3), 1119–1139. https://doi.org/10.2307/3539678    

Quiñones, D. G. (1999). Construcción social de la imagen de persona negra en medios de comunicación visual en Puerto Rico [Tesis doctoral inédita]. Universidad de Puerto Rico. 

Safa, H. I. (1983). El empleo femenino y la reproducción social en la clase obrera puertorriqueña. Estudios Sociológicos de El Colegio de México, 1(3), 459–486.  

Sepúlveda-Rivera, A. (2004). Cabo Rojo. En G. Madrazo (Ed.), Puerto Rico Urbano, Atlas histórico de la ciudad puertorriqueña (Vol. 4, pp. 116–122). Carimar.   

Silvestrini, B. (1979). La mujer puertorriqueña y el movimiento obrero en la década de 1930. Cuadernos de la Facultad de Humanidades, (3), 85–104. http://smjegupr.net/newsite/wp-content/uploads/2020/02/6-La-mujer-puertorrique-a-y-el-movimiento-obrero-en-la-d-cada-de-1930.pdf  

United States Census Bureau. (1982). 13th census, 1910 [microform]: population: Puerto Rico. https://archive.org/details/thirteenthcensus1761usce/page/n1/mode/2up  

Zayas-Monge, N. Y. (1998). Perfil sociodemográfico de la mujer trabajadora en la industria de la aguja en Mayagüez (19101935) [Tesis de maestría, Universidad de Puerto Rico]. Perfil sociodemográfico de la mujer trabajadora en la industria de la aguja ... - Nuria Y. Zayas Monge - Google Libros 


Posted on May 30, 2024 .

The Arawak of Higüey: Bibliographic and documentary analysis of indigenous Caribbean societies

Los arahuacos del Higüey:  Análisis bibliográfico y documental de sociedades indígenas caribeñas

Abner Trujillo Marrero
Departamento de Sociología y Antropología 
Facultad de Ciencias Sociales, UPR RP

 

Recibido: 16/02/2024; Revisado: 16/05/2024; Aceptado: 17/05/2024 

Abstract 

This project seeks to contribute to the debate regarding the denomination of the insular Arawaks of Hispaniola as a chiefdom society. The group under consideration is the one associated with the Higüey region. Using primary ethnohistoric sources, we seek to contrast their descriptions with anthropological concepts and archaeological evidence. By these means, we seek to analyze and determine if these societies comply with the characteristics of a chiefdom society. Several limitations to be considered in future studies of this region are also noted. In conclusion, a possible answer to the absence of elite burials in Dominican pre-Columbian archaeology is given.   

Keywords: chiefdoms, Hispaniola, Pre-Columbian archaeology   

Resumen 

Esta investigación busca aportar al debate existente sobre la denominación de los arahuacos insulares de La Española como una sociedad de jefatura. Para los efectos de esta investigación, nos limitamos a utilizar fuentes etnohistóricas primarias sobre la región este del Higüey para realizar una lectura crítica que contraponga sus descripciones con conceptos antropológicos y evidencia arqueológica. El objetivo es determinar si estos grupos cumplen con las características asociadas a una sociedad de jefatura. Se notan varias limitaciones y variables a considerar en estudios futuros sobre esta región. Para concluir, se provee una posible respuesta ante la ausencia de entierros de élite en la arqueología precolombina dominicana.     

Palabras claves: cacicazgos, La Española, arqueología precolombina   

Introduction 

The project aims to be a cultural case study in the anthropological scope regarding XV to XVI century chiefdom societies in the Caribbean. The analysis will be built upon primary ethnohistorical sources, which consist of XVI century Castilian documents and chronicles, such as La Historia Natural y General de las Indias (1851) by Gonzalo Fernández de Oviedo y Valdés, and Relación Acerca de las Antigüedades de los Indios (2004) by Fray Ramon Pané, among others. This research does not seek to give a definitive answer to the existing debate on the existence and definition of chiefdoms. However, based on the existing information, it intends to contribute to the subject. I chose this topic because it has been under analyzed and would contribute to the region's anthropological literature. The analysis will be based on primary ethnohistorical sources and secondary sources. The recovered archaeological record is stored primarily in the Smithsonian Institute, the Ethnohistorical Museum of Florida State University, the University of Leiden, the Asociación García Arévalo, and the Museum of the Dominican Man. The comparison between ethnohistoric and archaeological data allows for a better understanding of what defines a chiefdom society. A significant factor is the regions that the Castilian chroniclers and explorers knew. In the Caribbean, Fernández de Oviedo’s, Panés’, and Fray Bartolomé de Las Casas’ chronicles, among others, are still regarded as key ethnohistorical sources on the precontact societies of Hispaniola. The combination of ethnohistory and archaeology has allowed interpretations of the location of the main political regions of precontact Hispaniola (Oliver, 2009; Vega, 1987; Wilson, 1990). The map displayed in Appendix A depicts the political boundaries and the associated caciques by 1492, allowing the geographical delimitation of the area to be studied.   

Theoretical Framework and Historical Context   

The definition of chiefdom in anthropology is that it is essentially a sociopolitical organization that shows greater complexity than a tribal organization but is not as developed as a state society. Chiefdom societies are found in all parts of the world, yet they retain very marked distinctions. For this reason, multiple concepts, such as circumscription and kinship, have been developed to comprehend their formation (Beliaev et al., 2001; Carneiro, 2012; Ensor, 2011; Moscoso, 2018; Saklnik, 2004; Service, 1960). Junker (2015) agrees with Earle that the generally accepted definition of "chiefdom" does not describe the concept. Even so, anthropology has gone to great lengths to identify key characteristics that they tend to share (Earle, 1987, 1989; Vargas, 1989). Among them are the scale of integration, centrality in decision-making, stratification, redistribution, prestige, and kinship ties. Chiefdoms also have two distinct tiers. The first tier refers to chiefdoms with blood ties to the rest of the polity, making them clan-oriented chiefdoms in which kinship ties determine position. The second tier is a paramount chiefdom, which essentially encompasses what tends to be considered a kingdom (Claessen, 2011). Regarding stratification, Earle (1987) comments that political differentiation and economic control are linked, expressing that for the elites vying for control of the polity, they must first separate themselves from the rest of the population in political terms as well as having a strict hold over the economies of their polities. The chief’s clan and lineage also became differentiated from the rest of the polity by their consanguinity with the chiefly figure, which in the Caribbean context is considered to have been determined by the maternal line (Franch & Galan, 1981; Keegan & Maclachlan, 1989).   

Economic management in chiefdoms becomes centralized around the ruling figure, revolving around two major strategies (Earle, 1987; Junker, 2015). The first one is control over staple production as a means of exerting ownership over the land, control of the labor force, and the requirement of tribute payments. The second form of control is over the distribution of prestige goods, used as currencies to create alliances and maintain the cohesion of the polity's elite. The third form of control revolves around a chiefdom's military power; in this case, a chief must have firm control over the polity's warrior force, which is kept loyal by the prestige goods he supplies them for their loyalty. A chiefdom seldom bases its economy solely on staple or wealth finance, preferring to consider some aspects of both systems in managing the polity's economy (Junker, 2015). All these factors combine in the notable practice of redistribution, a key element in many chiefdom societies. The definition of this element is that the chief figure demands that goods be taken to his or her residence, where storehouses may be dedicated for this specific use. Once the goods are taken here, the chief figure's duty is to distribute them accordingly to the polity members. With this, the chief can maintain alliances with warrior groups and other powerful lineages.  

Chiefdoms are institutionalized and hereditary offices of leadership. Only specific lineages with sociopolitical power can qualify for this office, and as such, it demands distinct ritual behaviors, clothing, and modes of conduct (Peebles & Kus, 1977; Claessen, 2014). In many cases, there are no ironclad rules of who inherits the title of chief, which makes it possible in times of political tension for a leader to inherit the office, which, under normal circumstances, would not be a candidate for succession (Oliver, 2009). Regarding their political dominance, in this model, there are two major systems (Blanton et al., 1996). The first is the network system, where “political actors try to create personal networks of dominance through the strategic distribution of portable wealth and symbolic capital” (Junker, 2015, p. 378). This model of political dominance appears to go hand in hand with a chiefdom with a wealth finance economic model. The second model is the “corporate strategy of dominance,” which “disperses power through bureaucratic institutions promoting consensus, solidarity, and collective action” (Junker, 2015, 378). Three ideological bases go hand in hand with the models of political dominance (Earle, 1987). The first one is closely related to the construction of sacred monuments and the required ceremonies to erect them. The second one is tied to wealth finance economics, the symbol of prestige that shows individual position within the polity. The last one he mentions is the symbols of warrior might, which augment the prestige and perception of the chieftain, not only as a semi-divine being but also as a combatant. This type of political organization has been universally assigned in Caribbean archaeology, given the use of chronicles. Many works have focused on identifying the geographic limits of these political organizations from the descriptions of the chroniclers and early cartographers. This has led to various interpretations and maps, such as those made by Vega (1987) (Appendix B) and Wilson's comparison (1990) of his map with others made earlier (Appendix C). These ethnohistoric sources retain multiple factors to be considered, which limits them from being infallible sources (Curet, 2006). In this case, it is necessary to critically analyze the chronicles with an inquisitive mind to extract the truth from them. In terms of previous field research in Higüey, those of Hofman et al. (2004), Samson et al. (2010), and Veloz Maggiolo et al. (1976) stand out. These have focused on sites such as El Cabo and El Atajadizo where villages have been identified. However, these have concentrated on domestic spaces and the distribution of space rather than the burials themselves. So, although these investigations are valuable for Dominican archaeology, they are not very useful for this project because of their focus.   

The island of Hispaniola during the late 15th and the entirety of the 16th century suffered the arrival of the Iberians and their clashes with the indigenous Arawak. The region of Higüey was the last region subjugated by the Spanish conquerors, and as such, there are few ethnohistorical documents regarding the region. Regarding the chroniclers, Gonzalo Fernández de Oviedo y Valdés was appointed Chronicler of the Indies, which required him to record all that he saw of the New World. His writings are heavily focused on the exploitation of the Indies and the descriptions of its indigenous populations.  

He considered the natives essentially animals; he wrote what he saw of them while his memory was fresh. Ramón Pané was a friar from the Order of St. Hieronymus sent to the Indies with the order to stay with the indigenous population, write down their beliefs, and learn their language. He cohabited with a limited part of the indigenous population and conceived what they told him as truth regarding to all other communities on the island. The language he learned from the indigenous people was not spoken on the island. His writings, made by hand while traveling, are sometimes convoluted and hold no clear transitions—the only one of the many chroniclers who developed their work via participative observation.

Methodology 

This combination of these data sources will be the foundation of this investigation. This project seeks to answer the following questions: What distinctive cultural features are associated with chiefdom cultures in archaeology and ethnohistory, and can these be applied to the Arawak of Higüey? The second is: Given the known data, can the Arawak of Higüey be considered a chiefdom society? A hypothesis can be constructed that features such as prestige items, settlement patterns, and burial practices that indicate social stratification and trade can be evidenced by archaeology. In contrast, the cultural contexts in which these acts occurred are evidenced via ethnohistory. This hypothesis has been tied with the Arawak of Hispaniola for decades, given the documental remains of the chronicles. A relevant factor in this discussion is that such burials remain absent in the recovered archaeological record. Above all, the project's relevance seeks to educate and further the anthropological scope by taking an interdisciplinary approach to chiefdom culture studies. For years, archaeologists and historians, due to the indiscriminate use of the chronicles, have applied generalizations to cultural practices (Curet, 2006). Even so, archaeology has strived to correct these misinterpretations through the years. What has made it difficult is that material evidence regarding the chief caste has not been discovered yet. This lack of evidence, coupled with the misinterpretations of the chronicles, gives way to deep-rooted misconceptions regarding the sociopolitical organizations of the indigenous populations. An increased and detailed understanding of the past could facilitate interest in protecting cultural and historical heritage sites already known alongside emerging ones. One of the major problems many archaeologists face is the lack of funding for conservation and field projects, which limits both to a great degree. A larger population interested in protecting the material past and stories of the Arawak can be preserved.   

Findings 

During this investigation, I have found that features associated with chiefdom societies align with the Arawak of Hispaniola. It can be said that the economic model of the precontact prehistoric Caribbean was one of wealth finance in the making of prestige goods and one of staple finance in its distribution (Oliver, 2009; Junker, 2015; Earle, 1987, 1989). Regarding redistribution, Oviedo comments how this occurred when a cacique (paramount chieftain) died. When one of these figures passed away, other caciques (regional chieftains) came to his funeral, where some of the deceased cacique's goods were split among them (Oviedo, 1851, Vol. 1, p. 134). He does not mention which goods were redistributed, but regarding this, Oliver comments that prestige items were probably included and were probably done with elites that had kinship ties. 

Regarding the scale of integration, centrality in decision-making, and stratification, Oviedo comments that before making a significant decision, the chiefly figure discussed it with his local elites, who could voice their arguments, yet only the main chief could reach a decision. It has been theorized that some polities may have included more than one ethnic group, given that Pané comments on multiple unintelligible languages being on Hispaniola. If such a matter were present, it would strengthen the need for a central political figure to keep order. In terms of social stratification, both the chronicles and anthropology identify three tiers: cacique (sacred ruler), nitaino (clan and lineage of the sacred ruler), and naboria (commoners) (Moscoso, 1981). Both the chief figure and the commoner class are noted by Pané (2004, p. 48) who mentions them regarding a chief named Guanácobel as his servants and his favorites, all of them being kin. Regarding the concept of prestige, Oliver, using Oviedo’s comments, postulates that a chief’s power and prestige stemmed from the ability to dominate, communicate, and gain favorable outcomes from a cemi (Oviedo, 1851, Vol. 1, 125). Cemi’s refer to the animistic idols these communities possessed, made of stone, coral, wood or even textiles. They possessed genealogy and lineage being. Recently, Oliver (2009, p. 59) has redefined this concept as a “immaterial, numinous, and vital force” more in depth in his work. This ties in with Pané's mention of these entireties, for every mayor cacique housed one of the principal cemis in his territory, who could abandon them at a moment's notice if desired.    

Regarding kinship, Oviedo noted multiple ways in which the inheritance of a chief occurred. He mentions that the office was passed from father to eldest son, but Oliver (2009) considers this premise a syncretism of European kinship relations. Ensor (2011) agrees with this and emphasizes that abrupt changes in economic and political systems can lead to changes in how kinship ties are determined. Ensor also argues that, due to the ideologies of the Castilians, they actively sought to alter the family organization of the insular Arawaks, as this facilitated the Spanish encomienda system and catechesis. Oviedo also noted that the more accepted method of succession for anthropologists is where the succession of the office is passed to the firstborn of the chieftain’s sister. As mentioned previously, the most accepted theory is that these groups traced their lineage by maternal descent (Keegan & Maclachan, 1981). However, given that the Arawaks had no written law of succession, this may have jointly varied from region to region over time.   

At the time of this investigation, there were no excavations of burials that could be identified as a chief figure in Hispaniola. This may well stem from looting, as well as the lack of funds or interest in the region's archaeology. Several field projects have been carried out in the region to identify living spaces, symbolic elements, and even several burials; however, they have not found a burial associated with the chiefly elite (Curet & Oliver, 1998; Hofman et al., 2004; Kulstad-González, 2020; Swanson et al., 2010; Veloz Maggiolo et al., 1976). This has become the main factor for some archaeologists in challenging the universal acceptance of classifying the Chicoid and Meillacoid societies as chiefdoms.   

Discussion 

Having presented the findings of this research, it can be extrapolated that the ethnohistoric sources of Oviedo (1851) and Pané (2004) on the insular Arawaks of Hispaniola conform to the definitions of chiefdom societies made by Earle (1987, 1989) in terms of their ideological bases and how they maintain their power (Blanton, 1996; Junker, 2015) in terms of the political domination implemented by these societies. Even with this, Earle's premise about the symbols of warrior power goes against what is documented by ethnohistoric sources and the archaeological record. The elements that Vargas (1989) denotes as prestige, stratification, and Tribal Social Formation align with the information recovered in archaeology and ethnohistory. The theoretical elements of Claessen (2011, 2014) related to the formation of chiefdoms and the figure of the chief, together with the approaches of Peebles and Kus (1977), are some key elements to identify a chiefdom society. With his social and environmental circumscription theory, Carneiro (2012) identifies elements that allow us to understand these societies. However, given the rich natural resources in the Caribbean, circumscription did not play a central role in developing chiefdoms. 

On the other hand, the theoretical synthesis of Beliavev et al. (2001) regarding cultural variety is relevant. It is possible that in Hispaniola, each political unit had its own identity because of its cultural variety; as such, it would be necessary to study each region associated with one of these political units, with specific parameters for each one. In the findings section, the characteristic elements of a chieftainship were noted, the most relevant being stratification, redistribution, kinship, centrality in decision-making, prestige, and a complex economic system. The works of Rouse (1951), paired with the chronicles of Las Casas, Oviedo, and Pané, have led authors such as Oliver (2009), Wilson (1990), Franch and Galán (1981), Keegan and Maclachlan (1989), Vega (1987), and Moscoso (1981, 2018) to consider the Arawaks of Hispaniola as cacique societies. Although their works touch on different topics, they all have the theoretical foundation that these groups are chiefdom societies. Along with this, some works focused on mortuary practices (Curet & Oliver, 1998) also support the existence of such societies. However, it should be noted that these have only been made in domestic contexts, and no burial associated with the cacique elite has been identified.  

A limitation that affects the findings resides in the chronicles' failures and their wide use in Caribbean archaeology. In many cases, archaeological records and ethnohistoric sources diverge, as Curet (1996, 2003, 2006) has argued. The great variety of what constitutes a chiefdom society also proves to be a vexing problem, as argued by Skalnik (2005). Hand in hand with these arguments, Ensor (2011) argues how problematic it can be to use cultures that underwent drastic and abrupt social changes in constructing kinship models. Another limitation in this study stems from the lack of substantial ethnohistorical sources and archaeological correlates focused on the Higüey region. This limitation, however, can be overcome in future research by including documentary sources from the AGN, whose digitization is very poor. Even with this, the existing documentary information allows for approaches and contributions to the anthropology of the region, as Oliver (2009) has done.  

The archaeological literature finds gaps in terms of funerary practices related to elites, as the burials excavated have been in residential spaces or simply focused on early Spanish settlements (Curet & Oliver, 1998; Hofman et al., 2004; Gonzalez, 2020), so archaeology cannot affirm that these groups were undoubtedly a chiefdom society. The caveat is that the record does show a multitude of attributes characteristic of such societies. These groups may well be chiefdoms, and the absence of these elite burials is a factor due to the lack of studies in the Higüey region. This may be because archaeologists have looked for evidence in the wrong place. Of all the studies conducted in search of burials, it should be noted that the archaeological record shows only a sliver of information. Given their territorial extent, these villages must have numbered in the thousands, and yet only a few burials have been excavated. This points to the possibility of funerary practices other than those noted in the chronicles, which may not be possible to recover through archaeology. One of them could be the exhumation of the burials, the relocation of the bones in baskets, burials in caves, and the cremation of the corpses, given that Pané and Oviedo point out these practices. Another possibility could be burials at sea since these people were expert navigators, and this practice is not out of the question. In such a case, extensive archaeological projects will have to be carried out in the region to provide a concrete answer to this question.   

Conclusion 

This work seeks to advance the anthropological literature of the region, but more in-depth work is needed. It has been shown that concepts are associated with chiefdom societies that can be identified with the Arawaks of Higüey. The political complexity evidenced in their redistribution systems, prestige, kinship, stratification, and economic models aligns with what the field of anthropology considers a chiefdom. In this regard, ethnohistory remains a valuable tool, but given its shortcomings, it cannot justify the claim that such a group was indeed a chiefdom society. In this case, archaeology gains the upper hand in allowing the comprehension of these human groups. Although both fields have researched the same human groups, their findings tend to clash when analyzed comparatively. Given the absence of an archaeological burial record that could be attributed to an individual of high social rank, archaeologists cannot definitively claim that this particular group was a chiefdom society. The caveat is that the record shows many attributes characteristic of said societies. These groups may well be chiefdoms, and the absence of these elite burials is only a factor due to the lack of studies in the Higüey region. This may stem from the fact that archaeologists have been searching for evidence in the wrong place. This points to the possibility of different burial practices from those noted in the chronicles, which may not be possible to recover. A possible solution to this challenge may be provided through long-term alliances made by research institutions and universities along with the Dominican government to fund and maintain extensive archaeological projects in the Higüey region. 

In conclusion, given that the Arawak of Higüey checked all the definitions regarding chiefdoms, it can be stated that this was their sociopolitical organization. Nevertheless, the lack of elite burials has led some archaeologists to challenge this notion, which remains a factor against the many others supporting this claim. Given the evidence, I concur with Oliver, Keegan, Vega, Moscoso, and Wilson in that these people were indeed chiefdoms. Even so, the lack of archaeological evidence cannot be overlooked, yet it must also not act as a dealbreaker. There is still much to learn from the Arawak of Hispaniola, and to base a definite statement regarding them on a single factor is a close-minded view of a complex human group. As a closing statement, there is still much to learn, and to truly comprehend these groups, archaeologists must think outside the proverbial box.   

References  

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Wilson, S. M. (1990). Hispaniola: Caribbean chiefdoms in the age of Columbus. University of Alabama Press. http://pi.lib.uchicago.edu/1001/cat/bib/11220974 


Appendixes

Appendix A: Cacicazgos of Hispaniola in 1492 

From: Oliver, 2009

Appendix B: Divisions of the chiefdoms  

From: Vega, 1987 

 Appendix C: Political divisions of Hispaniola 

From: Wilson, 1990 


 

Posted on May 30, 2024 .

“Fellow-man’s gratitude”: An eco-feminist reading of Thomas Hardy’s A Pair of Blue Eyes

“Fellow-man's gratitude”: una interpretación ecofeminista de A Pair of Blue Eyes de Thomas Hardy 

Ariana De Jesús Pagán
Departamento de Inglés
Facultad de Humanidades, UPR RP

 

Recibido: 01/03/2024; Revisado: 04/03/2024; Aceptado: 01/05/2024 

Abstract 

My study seeks to relate the depiction of the landscape and the treatment of gender relations in the novel A Pair of Blue Eyes by the Victorian realist author Thomas Hardy. This is done by considering Val Plumwood’s critical ecofeminist concept of the Master Model as applied to the novel's love interest, Henry Knight. I argue that Knight's self-positioning as a rational male underline his simultaneous domination of women and nature, and that the novel’s famous cliffhanger scene momentarily undoes dualistic categorizations to suggest an ethical model wherein the relationship between humans and nature can serve as a model for gender relations.    

Keywords: Thomas Hardy, critical ecofeminism, dualistic ideology, environmental ethics 

Resumen 

Busco relacionar la representación del paisaje y la representación de las relaciones entre géneros en la novela A Pair of Blue Eyes de Thomas Hardy a través de la consideración del concepto ecofeminista del “Master Model”, planteado por Val Plumwood. Planteo que el autoposicionamiento del personaje Henry Knight como un sujeto masculino fundamenta su dominación de las mujeres y el mundo natural. La escena en la que Knight cuelga de un acantilado suspende las categorizaciones dualistas para sugerir una ética en la que las relaciones entre los humanos y la naturaleza sirven de modelo para las relaciones entre los géneros.    

Palabras claves: Thomas Hardy, ecofeminismo crítico, ideología dualista, ética ambiental 

The Victorian realist author Thomas Hardy has often been considered an ecological writer. Not long after the publication of the anthology that legitimized Ecocriticism as a theoretical school within English Literary Studies, The Ecocriticism Reader (Glotfelty & Fromm's, 1996), Kerridge (2001) explicitly argued for Hardy’s “ecocritical canonization,” stating that his novels contained “some of the most exciting passages of English nature writing” (p. 126). In his view, Hardy’s novels depict a variety of characters’ shifting and multiform relationships to the spaces they inhabit in a way that ultimately suggests the inseparability of the human and the natural. He cites examples from Hardy’s major novels. According to Thomas (2009), the origin of this tendency is Hardy's division of his novels into three categories for the 1912 Wessex Edition of his works – “Novels of Character and Environment” (his so-called major novels), “Romances and Fantasies,” and “Novels of Ingenuity,” – perhaps to create a more homogenous idea of his oeuvre as realist writing. As a result, Thomas states that Hardy's so-called minor novels have been relatively understudied. This sentiment applies to Hardy's third published novel, A Pair of Blue Eyes (1873), one of his “Romances and Fantasies.”  

A Pair of Blue Eyes tells the story of Elfride Swancourt, a curate’s daughter, who is caught in a love triangle between two men. The first, Stephen Smith, is a young architect of humble rural origins. After her father forbids her relationship with Stephen based on their unequal class positions, she initiates a plan to elope with him; however, she changes her mind before the two can reach London to be married. When Stephen leaves on assignment to India, Elfride sets her sights on Stephen’s teacher, Henry Knight, an older man who works as a writer in London. Knight admires Elfride’s youth and apparent romantic inexperience; hence, she must hide her failed elopement from him at all costs, starting a chain of events that ultimately leads to Elfride’s marriage to another man and death via miscarriage.   

Many critics of A Pair of Blue Eyes choose to read it through a biographical lens, regarding it, in the words of Michael Millgate, as “...a kind of rag-bag of information, ideas, descriptive vignettes, personal experiences, fragments of the author’s brief literary past” (1971, p. 67). Dolin (2005), in his introduction to the novel, notes the similarities of its story with Hardy's courtship of his first wife, Emma Lavinia Gifford. The cliffside village of Endelstow, where the story is set, recalls the landscape of St. Juliot in Cornwall, where Hardy met Emma as an architect on assignment to rebuild an old church; additionally, their union faced disapproval from Emma's family, as Stephen and Elfride's did. Dolin, however, reads Elfride's choice as a metaphor for a crucial junction in Hardy's life: his decision to leave architecture for a career as a professional writer. Along with this biographical aspect, critics have noted Hardy’s treatment of the theme of gendered sexual standards, which serves as a precursor to later works such as Tess of the D’Urbervilles: Boumelha (1982), for example, which compares Henry Knight’s destructive idealism to that of Tess’s Angel Clare. All in all, the technical rawness of A Pair of Blue Eyes belies the richness of the novel’s themes.   

My intervention is to consider the novel's theme of gender relations in tandem with Hardy's depiction of the landscape through a critical ecofeminist lens. Ecofeminism seeks to study what Donovan calls the “ontology of domination” a worldview “wherein dominators are thought to be of a higher order … than the dominated” (1998, p. 74). According to Val Plumwood’s seminal work Feminism and the Mastery of Nature (1993), this logic is ideologically underpinned by what she calls a “network of dualisms” in Western rationalist thought (p. 2), that is, a series of dichotomous hierarchies. This worldview creates a duality between nature and culture that is then applied to men and women. Women and other marginalized others, such as people of color, are conceptually aligned with nature – which in a pattern of “radical exclusion” (p. 48) is defined as all that reason is not – and therefore become the object of subjection by the “white, largely male elite,” a relation that she calls “the master model” (p. 23). In A Pair of Blue Eyes, Hardy illustrates this ideology through the character of the urbanite intellectual Henry Knight, who positions himself above both women and the natural world. This outlook leads to the dissolution of his relationship with Elfride and his fundamental dissatisfaction. Knight's failures, as well as the depiction of the landscape in the novel, can then advance a counter-narrative to the novel's superficially misogynistic discourse: Hardy is making an ethical proposition in which reciprocal interactions between humans and nature can serve as a model for relationships between men and women. Thus, Knight's failure to have an equitable relationship with nonhuman life-forms foreshadows his inability to connect to other people. 

The first component of Knight’s identity as the master is his persistent narrative alignment with rationality. In Plumwood’s theory, rationality, a concept with “a confusing array of meanings...” is the primary attribute that distinguishes humans from nature and men from women (p. 19). A Pair of Blue Eyes references Knight's intellect or mental capacity. Stephen introduces him as “the best and cleverest man in England" (p. 49); the narration mentions his "robust intellect” (p. 318), his capacity for “rigid stoical meditation” (p. 196), as well as his “keen scrutiny” and “logical power” (p. 284). Metaphors of rigidity or hardness also enter this web of associations: Elfride calls him “severe” several times (p. 272, p. 279), as well as “sharp” (p. 182). This detail is especially pronounced when contrasted with the narrator's view of Elfride, highlighting her adaptability. She is a “palpitating mobile creature” (p. 171) with an “index of transientness of feeling” (p. 110) and is regarded by Knight as a “ductile woman” (p. 318). This duality of rigidity and fluidity, translated into the dualism of rationality and irrationality, is the paradigm that defines Knight and Elfride's relationship throughout the novel. His position as the rational male will underscore both his anthropocentrism and misogyny.  

Knight's attributes manifest in his tendency to think of himself as separate from the world around him. For instance, he is characterized by his naturalist interests and described as “a fair geologist” (p. 200) who asks Elfride about the plants around her home “in quite a learner's manner” (p. 146). However, there are several scenes where he feels disconnected from and disquieted by the natural world. Upset over his feelings for Elfride, he takes a walk around the cliffside village and “failed to recognize that holding converse with Nature's charms was not solitude” (p. 162). On a trip to the Lakes of Killarney, he “listened to the marvellous echoes of that romantic spot; but altogether missed the glory and the dream he formerly found in such favoured regions” (p. 176). Hardy's use of the word “converse” implies a certain reciprocity between Knight and nature; nevertheless, the conversation is cut short because Knight does not recognize nature's consciousness and is limited by his perspective. In Knight's introductory scene, Hardy notes that he keeps an aquarium in his office filled with “many-coloured zoophytes” (p. 122), among other marine life forms. The aquarium is described as “a dull parallelepipedon... for living creatures at most hours of the day...” except when the fish are warmed by the sun during the evening (p. 122). The mental image of the animals languishing in the enclosed bowl serves as a metaphor for how Knight sees other beings, human or nonhuman: knowable, classifiable, and confined. This impression gains more credence when one considers his attitudes towards other humans.      

In the same way that he disregards nature’s consciousness, he also dismisses the individuality of his fellow human beings, especially that of women. He states, “All I know about women, or men either, is a mass of generalities. I plod along, and occasionally lift my eyes and skim the sweltering surface of mankind lying between me and the horizon, as a crow might; no more...” (p. 124). One of the characteristics of dualistic thinking, according to Plumwood, is that of homogenization, that is, the tendency to deny the individuality of members within otherized groups. “To the master,” she writes, “all the rest are just that: 'the rest', the Others, the background to his achievements and the resources for his needs” (p. 54). Knight's words echo this sentiment. He proudly regards women as a set of stereotypes, not individuals with agency or equal partners. His self-fashioning as a crow is particularly telling. It is a positional framing in which he is flying above the rest of humanity—“the periphery,” in Plumwood’s words (p. 54)—looking at the indistinguishable mass below with disinterest. This way, it recalls the hierarchical element of dualistic thinking and ties Knight's rationality to a desire for male superiority. This ideology will be implicitly challenged by Hardy's construction of the landscape within the novel.   

Hardy’s depiction of the landscape in A Pair of Blue Eyes does not draw a firm boundary between humans and the natural world. In this case, there is hardly a difference between natural and architectural structures: buildings become a part of the ecological portrait that Hardy draws in the novel. These 'naturalized' buildings are exemplified most potently by the crumbling church tower at Endelstow, the structure that the young architect Stephen Smith, Elfride's first lover, has been sent to assess. It is described as “a square mouldering tower ...a monolithic termination, of one substance with the ridge, rather than a structure raised thereon” (p. 23). The adjective 'monolithic' points to the tower's ambiguous status, as the word can describe both a naturally occurring geographical formation and a stone placed somewhere by humans. Perhaps due to age, the tower has become one with its environment. Not only that, but it also serves as a shelter for living beings, such as fungi—as the adjective “mouldering” (p. 23) suggests—and “owls” (p. 152). Rather than being a static, disconnected object, the tower has acquired an ecological function–the owls must abandon “this home of their forefathers'” when the time comes for the tower to be demolished (p. 152). As the tower, a relic of human activity, sinks into its surrounding environs, it blurs the boundary between human and natural spheres. It is at once part of the building where the villagers attend mass and part of the hill. Thus, it destabilizes the 'human' and 'natural' categories integral to a dualistic worldview.    

The cemetery at Endelstow is another example of how Hardy bridges the division between the human and the natural. The village churchyard consists of bare, grass-covered mounds, with a stone stile as an entrance, “over which, having clambered you remained still on the wild hill–the within not being so divided from the without as to obliterate the sense of open freedom” (p. 27). The graves are unmarked, divorced from any signifiers of Victorian mourning customs such as flowers, “which only raise images of people in new black crape and white handkerchiefs, coming to tend them” (p. 27). The churchyard is only “long wild untutored grass” (p. 27). It is a supposedly man-made place that has remained undomesticated, functionally indistinguishable from its environment. Moreover, the cemetery is a space where human bodies can decay undisturbed. Human bodies can then quite literally rejoin the ecosystem by nourishing the soil, thus completing the circle of life. The cemetery becomes a visual representation of the interdependence between man and nature in the novel. It adds to the general impression of the landscape that Hardy produces, eventually subverting Knight’s anthropocentric worldview by showing that the apparent separation between humans and nature is only illusory–and temporary.    

These descriptions of the natural world of Endelstow contrast Hardy’s descriptions of urban spaces. A Pair of Blue Eyes contains one of the few depictions of London in Hardy’s body of work. His descriptions contain a sense of weariness about city life. For example, the first glimpse of Henry Knight in his office is preceded by this passage:  

On this fine October evening on which we follow Stephen Smith to this place, a placid porter is sitting on a stool under a sycamore-tree in the midst, with a little cane in his hand. We notice the thick coat of soot upon the branches, hanging underneath them in flakes, as in a chimney. The blackness of these boughs does not at present improve the tree–nearly forsaken by its leaves as it is–but in the spring their green fresh beauty is made doubly beautiful by the contrast. (p. 120)  

The sycamore tree illustrates the natural world's role in urban spaces. The tree is marred by the pollution of the city, here represented by the soot, and Hardy consequently compares it to a chimney. Surrounded by the crowded streets and edifices, the tree assimilates into the city: its form, to an extent, is corrupted by its urban environment. Similarly, Hardy likens the columns of smoke that fill the sky over London to “tall trees” (p. 260). In the absence of plants, the product of the city's pollution –the smoke– becomes a facsimile of a forest. The plants in the city, like the tree outside of Henry Knight's office, are few and far between. Note the use of "contrast" to describe the tree's relationship to its surroundings in the spring. Whereas the buildings at Endelstow are characterized by their integration into their environment, this description of the tree highlights an incongruence. Hence, the only way that nature can exist in the city is in this sequestered manner, springing up between the cracks. Hardy's view of London influences the characterization of Henry Knight. If nonhuman forms of life are a rarity in the London streets, then it makes sense that Knight views nature as something fundamentally unusual, contained, and –most importantly– separate from him.    

The strongest manifestation of the confluence between Knight’s misogyny and anthropocentrism is A Pair of Blue Eyes' cliffhanger scene. The lead-up to this scene sees Elfride and Knight stroll along a ridge called the Cliff without a Name. Knight leans off the edge to retrieve his hat, which has been blown away by the wind, and slips off the stable ground. The chapter ends with Elfride going away to get help and Knight hanging off the cliff in a very vulnerable position. This life-threatening situation leads Knight to an encounter with the remains of the prehistoric life that once inhabited the cliff:  

…opposite Knight’s eyes was an imbedded fossil, standing forth in low relief from the rock. It was a creature with eyes. The eyes, dead and turned to stone, were even now regarding him. It was one of the early crustaceans called Trilobites. Separated by millions of years in their lives, Knight and this underling seemed to have met in their place of death. … The creature represented but a low type of animal existence, for never in their vernal years had the plains indicated by those numberless slaty layers been traversed by an intelligence worthy of the name. (p. 200)

Knight’s interaction with the trilobite is predicated on two ideas: first, that the trilobite represents a lower form of life, and second, that Knight is nonetheless going to face the same fate. This sentiment echoes Gillian Beer’s (1983) influential Darwinian reading of the scene, wherein the passage expresses both the “incongruity” and the “kinship” of both man and fossil (p. 236). Hardy utilizes a variety of phrases that emphasize the trilobite's low position in the great chain of being, such as “this underling” and “a low type of animal existence” (p. 200). Because they form part of Knight's perspective, these phrases demonstrate that Knight believes himself to be of a higher order than the trilobite. However, in practice, Knight's presumed superior intelligence cannot get him out of his predicament. For all their differences, he and the trilobite are in the same situation: as Hardy states, “He was to be with the small in his death” (p. 200). The trilobite's eyes emphasize the extent to which Knight has been brought down. To say that the eyes “were even now regarding him” (p. 200) subverts the power of the gaze. It is as if the trilobite looks at Knight first, and he is now the animal specimen up for examination. When Knight stares back at it, they have a sort of mutual acknowledgment. 

Knight then sees himself “at one extremity of the years, face to face with the beginning and all the intermediate centuries simultaneously” (p. 200). Hardy goes on to list a variety of prehistoric life forms, such as early hominids “clothed in the hides of beasts” (p. 200), almost resembling the stereotypes of cavemen, as well as ancient mammals such as mastodons and other animals such as alligators and dinosaurs, such as the—recently discovered at the time—iguanodon. Hardy's narration draws a continuity between the animals through to Knight. He gains a sense of the generations of organisms that have lived and died on the cliffs, and he realizes that he is only one of the many beings that its ecosystem has nurtured. For that brief moment, Knight feels truly connected to the environment around him. However, this realization is impeded by Knight's domineering outlook. While he is still hanging off the cliff, he thinks “that his death would be a deliberate loss to earth of good material; that such an experiment in killing might have been practiced upon some less-developed life” (p. 203). Knight ultimately has an overly high view of himself and his position in the universe. He is so close to understanding his marginal place in the universe, only for Hardy to recast him as a self-aggrandizing male once more.   

Throughout the cliffhanger episode, Hardy demonstrates how Knight's anthropocentrism and misogyny coincide in his gendering of nature. Eithne Henson, in her study of landscape and gender in nineteenth-century novels, explains that nature as an entity has been personified as female in various cultural traditions, from the “beneficent fruitful mother” of classical myths to the “virgin land” exploited by American pioneers (2011, p. 9). Henry Knight is no exception to this tradition. When he finds himself hanging off the cliff, he thinks that “he could only look sternly at Nature's treacherous attempt to put an end to him and strive to thwart her” (p. 199). It is the first time that nature or the landscape is explicitly gendered by Knight, who personifies it as a treacherous woman that he must then defeat. The narration goes on to reflect:

Nature seems to have moods in other than a poetical sense … She is read as a person with a curious temper; as one who does not scatter kindnesses and cruelties alternately, impartially, and in order, but heartless severities or overwhelming generosities in lawless caprice … In her unfriendly moments there seems to be a feline fun in her tricks, begotten by a foretaste of her pleasure in swallowing the victim. (p. 201)   

It seems that Knight projects all his anxieties about women onto his characterization of nature, and, by extension, the Cliff without a Name. Hardy reportedly based this cliff on a real-life Cornwall rock formation named Beeny Cliff, but he leaves it unnamed in the novel (Clough 1988). The cliff's lack of a name points to both its ancient, paleolithic origins and its position outside of the reach of Knight's knowledge. It is no coincidence that the cliff Knight finds the most inscrutable is also one he characterizes as feminine. Knight has a recurrent concern about women's sexual fidelity and their ability to “practise wiles” (p. 251). Consequently, the natural world, in Knight’s view, adopts some of the qualities that Knight claims to see in women: cruelty, fickleness, and treachery. This view of nature also ties into his anxieties about his relationship with Elfride. While Knight is hanging off the cliff, he doubts Elfride's ability to deliver him from his predicament, asking himself, “what could a girl do?” (p. 201). His most immediate fear is whether Elfride will return to save him. However, it also applies to his fears that she will betray him, given that it is his first time pursuing a romantic relationship after stoically refraining from such pursuits. Hence, his ideas about gender are both projected onto nature and Elfride. Casagrande makes a similar point in his book Unity in Hardy’s Novels (1982) when he states that the cliff in the novel is characterized as feminine and that it appears to share attributes with Elfride. However, our readings of the scene diverge in that he interprets Elfride’s rescue of Knight as being indicative of how “human intelligence can triumph over nature” (p. 96), rather than having an ecological message.   

For this reason, it is significant that when Elfride finally returns to save Knight—with a rope made from her undergarments, no less—he un-genders her:   

His eyes passed all description in their combination of the whole diapason of eloquence, from lover’s deep love to fellow-man’s gratitude for a token of remembrance from one of his kind … It was a novelty in the extreme to see Henry Knight, to whom Elfride was but a child, who had swayed her as a tree sways a bird’s nest, who had mastered her and made her weep most bitterly at her own insignificance, thus thankful for a sight of her face. (p. 204) 

Hardy's narration refers to Knight as Elfride's “fellow-man,” describing Elfride as the gender-neutral “one of his kind.” They are on equal terms as humans, not as a man and a woman. Additionally, while Knight delights in being the master to Elfride's student, their positions are reversed: in pulling him from the ledge, she is quite literally above him. This subversion is underscored by Knight's close third narration, which highlights his apparent domination of Elfride – he “had swayed her” and “mastered her” – only to negate it. The episode destabilizes Knight's identity as a rational male. Plumwood indicates that the identity of the master is concerted through a “relationship of denied dependency” (p. 41), whereby the dominator falsely asserts his independence from the dominated. However, this scene shows that Knight needs others to survive. Hence, Knight's gratitude represents what Freya Matthews calls a model of “relationality,” whereby beings are understood “in terms of their constitutive relations with one another” (Estévez-Saá & Lorenzo-Modia, 2018, p. 131, as cited in Matthews, 2007). Not only does he come to understand himself as a being in relation to Elfride, but as a being in continuity with the prehistoric life forms of the cliff. This understanding textually makes a romantic relationship between Elfride and Knight possible. His near-death experience, in which he accepted his part in a greater ecological reality than himself for a moment, facilitates his awareness of his and Elfride's mutual humanity.    

However, this experience is not enough to undo Knight’s dualistic ideology. Before he has reached stable ground, he is already instructing her about the proper way to pull him over the ledge, “already resuming his position of ruling power” (p. 205). Throughout the novel, he continues to sanctimoniously lecture her on his ideas about women, delighting in Elfride’s “uniform submissiveness” in their relationship (p. 277). Their romance unravels when Knight receives a letter from a widow named Mrs. Jethway, a woman with a vendetta against Elfride who saw her and Stephen Smith on the train when they ran away together. From this missive, Knight learns about Elfride's elopement to another man, and he subsequently rejects her because his fantasy of her purity and inexperience has been shattered. However, the moral verdict of the novel sides against Knight:

It is a melancholy thought, that men who at first will not allow the verdict of perfection they pronounce upon their sweethearts or wives to be disturbed by God's own testimony to the contrary, will, once suspecting their purity, morally hang them upon evidence they would be ashamed to admit in judging a dog. (p. 311)

Knight can only conceive of Elfride, and women in general, as either perfect angels who can do no wrong or conniving temptresses, not as human beings who make mistakes. The idea that Elfride has an existence apart from his desires is utterly alien to him. Since his worldview is so dependent on rigid dichotomous categories, he cannot cope with any nuanced situations.    

Even when Knight decides to regard Elfride favorably once again at the end of the novel, he does not let go of this ideology. Upon learning that it was his old student, Stephen Smith, whom Elfride had eloped with, he reflects on his feelings for her:

Knight blessed Elfride for her sweetness, and forgot her fault. He pictured with a vivid fancy those summer scenes with her… How she would wait for him in green places, without showing any of the ordinary womanly affectations of indifference! How proud she was to be seen walking with him, bearing legibly in her eyes that she thought he was the greatest genius in the world! (p. 337) 

Knight's newly renewed affections for Elfride, entangled with a romantic view of the landscape of the cliffs—“summer scenes” and “green places” – do not evince any character development on his part. His 'forgiveness' of Elfride is predicated on restoring her to a former idealized state based on her unquestioning adoration of him. Knight does not dismantle his duality of good and bad women; instead, he decides that Elfride is once again a good woman. Nevertheless, his ultimate failure at repairing their relationship due to Elfride's untimely death demonstrates the failure of Knight's ideology. His belief in gender stereotypes and attachment to an ontology of domination are what cause his rejection of Elfride and ultimately spell her doom. Consequently, he does not get to possess her. She is now entirely beyond his reach. 

I have demonstrated how a critical ecofeminist lens can help elucidate the intersecting modes of domination illustrated in A Pair of Blue Eyes. The novel shows that environmental destruction is not the only way to dominate nature. Instead, creating dualistic categories that forcefully sequester the natural from the human is another form of domination. Henry Knight's impulse to view himself as above and separate from the natural world is the same one that drives him to adhere to rigid gender divisions obsessively. Therefore, his attempts to gender nature and Elfride should be understood as attempts to control them, and Hardy shows that this desire is what leads him to isolation, disappointment, and unhappiness. Hence, A Pair of Blue Eyes anticipates Hardy’s ecological concerns in his more well-known works by dramatizing the ideological basis of the double exploitation of the environment and the female body depicted in a novel like Tess of the D’Urbervilles (1891). This is why an ecological or ecofeminist reading of the rest of his minor novels could prove to be a productive course of study, furthering the idea that they are as ecologically rich as his major ones.

References 

Beer, G. (2000). Darwin’s plots: Evolutionary narrative in Darwin, George Eliot and Nineteenth-Century fiction (3rd ed.). Cambridge University Press. (Original work published 1983)  

Boumelha, P. (1982). Thomas Hardy and women: Sexual ideology and narrative form. The Harvester Press Limited & Barnes and Noble Books.  

Casagrande, P. (1982). Unity in Hardy’s novels. The Regents Press of Kansas. https://archive.org/details/unityinhardysnov0000casa/mode/2up 

Clough, P. W. L. (1988). Hardy’s trilobite. The Thomas Hardy Journal, 4(2), 29–31. https://www.jstor.org/stable/45273880

Dolin, T. (2005), Introduction. In A. Manford (Ed.), A Pair of Blue Eyes (pp. xi–xliii). Oxford University Press.  

Donovan, J. (1998). Ecofeminist literary criticism: Reading the orange. In G. Gaard and P. D. Murphy (Eds.), Ecofeminist literary criticism: Theory, interpretation, pedagogy (pp. 74–96). University of Illinois Press. https://archive.org/details/ecofeministliter0000unse/mode/2up 

Estévez-Saá, M. & Lorenzo-Modia, M. (2018). The ethics and aesthetics of eco-caring: Contemporary debates on ecofeminism(s). Women’s Studies, 47(2), 123–146. https://doi.org/10.1080/00497878.2018.1425509 

Glotfelty, C., & Fromm, H. (Eds.). (1996). The Ecocriticism Reader. The University of Georgia Press.  

Hardy, T. (2001). Tess of the D’Urbervilles. Dover Publications, Inc. (Original work published 1891) 

Hardy, T. (2005). A Pair of Blue Eyes. Oxford University Press. (Original work published 1873) 

Henson, E. (2011). Landscape and gender in the novels of Charlotte Brontë, George Eliot, and Thomas Hardy: The body of nature. Ashgate.  

Kerridge, R. (2001). Ecological Hardy. In K. Armbruster & K. R. Wallace (Eds.), Beyond nature writing: Expanding the boundaries of ecocriticism (pp. 126–142). University Press of Virginia.  https://archive.org/details/beyondnaturewrit0000unse/mode/2up 

Millgate, M. (1971). Thomas Hardy: His career as a novelist. Random House. https://archive.org/details/thomashardyhisca00mill/mode/2up   

Plumwood, V. (2003). Feminism and the Mastery of Nature. Routledge. (Original work published 1993) 

Thomas, J. (2009). Hardy’s “Romances and Fantasies”: A Pair of Blue Eyes, The Trumpet-Major, Two on a Tower, and The Well-Beloved: Experiments in Metafiction. In K. Wilson (Ed.), A companion to Thomas Hardy (pp. 281–298). John Wiley & Sons, Inc


Posted on May 30, 2024 .

Internalización de la violencia en hombres heterosexuales en Puerto Rico

Internalization of violence in heterosexual men in Puerto Rico   

Sabrina Pérez-De Santiago
Departamento de Psicología
Facultad de Ciencias Sociales, UPR RP 

 

Recibido: 01/03/2024; Revisado: 12/04/2024; Aceptado: 04/05/2024 

Resumen  

El objetivo de este estudio fue investigar si los hombres heterosexuales internalizan la violencia de pareja hacia hombres. La internalización fue determinada mediante las reacciones de los participantes (n=79) a una simulación de red social en la que se incluyeron seis memes que muestran ejemplos de violencia. Se realizó una prueba de chi-cuadrado en la que se encontró una diferencia estadísticamente significativa en la frecuencia de internalización entre las dimensiones de la violencia. Se halló que el 41% de los participantes internalizan la violencia de pareja a nivel físico, el 53% a nivel sexual y un 58% a nivel psicológico.   

Palabras claves: violencia de pareja, internalización, hombres heterosexuales, memes 

Abstract 

The objective of this study was to investigate whether heterosexual men internalize partner violence towards men. Internalization was determined through participants' reactions (n=79) to a social network simulation including six memes depicting examples of violence. A chi-square test was conducted, revealing a statistically significant difference in the frequency of internalization among the dimensions of violence. It was found that 41% of participants internalize physical partner violence, 53% sexual violence, and 58% psychological violence. 

Keywords: intimate partner violence, internalization, heterosexual men, memes

Introducción  

La violencia de pareja en Puerto Rico suele abordarse como un evento unilateral en donde la víctima es mujer y el agresor es hombre (Pérez, 2021; Ríos, 2020; Silva & Vázquez, 2019). Aunque los diversos ataques violentos contra las mujeres en Puerto Rico justifican que el foco de atención se encuentre en la mujer como víctima, el estudio sobre los hombres y su vulnerabilidad actual dentro de las relaciones de parejas heterosexuales se ha vuelto sustancial.    

En Puerto Rico, la mayoría de los casos de violencia de pareja se manifiesta de la manera tradicional (entiéndase, hombre agresor y mujer víctima). Existe una emergente minoría en donde es la mujer quien ejerce la violencia dentro de la relación. Del año 2019 al 2021, hubo un aumento del 11% en los reportes de incidentes de violencia doméstica hacia hombres. En el año 2022, aunque el número de casos reportados de violencia doméstica hacia hombres no aumentó, la distribución de incidentes de violencia doméstica entre hombres y mujeres se mantuvo constante, constituyendo los hombres un 16% del total de las víctimas en los incidentes reportados desde el año 2019 al 2022 (Negociado de la Policía de Puerto Rico, 2024).   

Varios factores pueden explicar la violencia reportada, entre las cuales se puede destacar la “normalización” de la violencia de pareja en los jóvenes (González & Fernández, 2014), una infancia expuesta a la violencia doméstica, y un nivel educacional más bajo (Ferreira & Buttell, 2016). Asimismo, los roles de género pudieran explicar cómo el hombre percibe y recibe la violencia de parte de su pareja. En el contexto de los roles de género, las agresiones clasificadas como violentas suelen catalogarse como tal cuando éstas son perpetradas por individuos masculinos.  Esto puede desenlazar en que los hombres heterosexuales internalicen la violencia recibida por parte de sus parejas sentimentales en Puerto Rico, sin cuestionarla, problematizarla, ni denunciarla, lo que los lleva en múltiples instancias a sufrir sus consecuencias en silencio. Igualmente, de acuerdo con la teoría y construcción de género, los hombres caracterizan a las mujeres violentas como "descontroladas" por no saber manejar bien sus emociones (Little, 2020; Rojas-Andrade et al., 2013) y rechazan la idea de buscar ayuda de su familia por temor a la burla social, la vergüenza o por mantener su orgullo según las construcciones sociales impuestas sobre la figura masculina (Kolbe & Büttner, 2020; Rojas et al., 2019; Scott-Storey et al., 2022).    

Los factores señalados, junto con la negación, la minimización y el ocultamiento de la violencia, podrían influir en que los hombres no reconozcan e internalicen la violencia (Castelo & Mercedes, 2018). Para esta investigación, se define la violencia internalizada como aquella que no genera rechazo o repudio hacia alguna de las dimensiones de la violencia de pareja (física, sexual o psicológica), y la no internalización como el rechazo o disgusto hacia alguna dimensión de las violencias.  

Habiendo tomado el impacto de la violencia en hombres heterosexuales como punto de partida, es menester conocer la forma de internalización de la violencia en esta población. Por tal razón, el objetivo principal de este estudio fue explorar la internalización de la violencia en hombres heterosexuales.  A través de este estudio, esperábamos evidenciar diferencias en las distintas formas de internalización en que se manifiesta la violencia. De esta manera, se hará posible transformar las prácticas violentas en la pareja heterosexual por relaciones sentimentales sanas que contribuyan al bienestar social. La relevancia de este estudio radica en generar conocimiento sobre un tema poco estudiado, y el cual se ha invisibilizado como resultado de la persistencia de los roles y estereotipos de género hasta en las generaciones más jóvenes.  

Métodos 

Diseño y participantes 

El diseño de este estudio fue cuantitativo de corte transversal con alcance descriptivo. La muestra estuvo constituida por hombres heterosexuales puertorriqueños. El tipo de muestreo para la muestra seleccionada fue no probabilístico. Los criterios de inclusión para participar en este estudio fueron: ser puertorriqueño, tener de 21 a 31 años e identificarse como hombre heterosexual.   

Procedimiento 

Una vez aprobado el estudio por el Comité Institucional para la Protección de los Seres Humanos en la Investigación de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, se comenzó con el reclutamiento de participantes. Estos fueron invitados al estudio a través de las plataformas Facebook, Instagram y Twitter. Se utilizaron tres cuentas públicas en cada una de las plataformas, en las que se promovió el estudio mediante el uso de anuncios. Los tres perfiles contaban con el enlace al formulario en su biografía, donde se mostraba la hoja informativa. A través de este documento, las personas podían conocer el propósito de la investigación, sus derechos como participantes y consentir a participar voluntariamente. Las personas que accedieron a participar completaron un cuestionario sociodemográfico en donde se corroboró que cumplieran con los criterios de inclusión. Luego de completar el cuestionario, a los participantes se les mostraron seis memes que presentaban algún ejemplo de la violencia. Los memes fueron seleccionados por la investigadora con el fin de explorar la internalización de la violencia en los participantes.  

Los memes expresaban algún tipo de violencia de pareja hacia hombres y fueron recopilados a través de la red social Facebook. Todos los memes fueron seleccionados de cuentas públicas. Las palabras claves para la búsqueda de memes fueron "tóxicas" y "tóxicos". Cada meme seleccionado representó un ejemplo de violencia de pareja. De los seis (6) memes, dos (2) fueron de violencia psicológica (ver ejemplo en Apéndice A), dos (2) fueron de violencia física (ver ejemplo en Apéndice B) y dos (2) fueron de violencia sexual (ver ejemplo en Apéndice C). Los memes que presentaron actos de violencia física incluían estrangulamientos y golpes fuertes. Aquellos que presentaban instancias de violencia sexual mostraban una insistencia en tener relaciones sexuales por parte de una mujer, aunque el hombre se negara a hacerlo. Finalmente, en los memes que presentaron ejemplos de violencia psicológica, se mostraba coraje por celos irracionales y no permitir que su pareja tenga amistades. Una vez completada la sección de la hoja informativa y la del cuestionario sociodemográfico, los participantes pudieron reaccionar a los memes con un me gusta, me divierte, me enoja o me entristece. Las alternativas de me gusta y me divierte representaron la internalización, mientras que las alternativas de me enoja o me entristece representaron la no-internalización. 

Instrumento 

Para obtener la información de los participantes se crearon dos instrumentos. El primero consistió en un cuestionario sociodemográfico creado por la investigadora. El segundo fue la utilización de memes. Se utilizaron memes, dado que son un reflejo de la comunicación, expresión cotidiana y poseen simbolismos culturales valiosos (Iloh, 2021). Además, el uso de memes es una manera no invasiva de explorar la internalización de la violencia de pareja.   

Luego de identificar seis (6) memes que expresan violencia de pareja, se desarrolló un formulario que incluyó tres secciones: (1) la hoja informativa, (2) el cuestionario sociodemográfico y (3) una simulación de red social en la que se incluyeron los seis (6) memes previamente mencionados. Los participantes no pudieron acceder a la siguiente sección del formulario si no habían respondido la sección anterior.   

El cuestionario estuvo disponible por 35 días (31 de marzo al 4 de mayo del 2023). Luego de la recopilación de datos, se realizó un análisis descriptivo y de chi-cuadrado para conocer si existían diferencias en el tipo de internalización de acuerdo con las dimensiones de violencia exploradas. Para propósitos de esta investigación, se define violencia internalizada como aquella que no provoca rechazo o repudio hacia algún tipo de las dimensiones de violencia. Por otro lado, la no internalización corresponde al rechazo y disgusto que provoca a alguna dimensión de las violencias señaladas a través de lo memes presentados. La presentación de los seis (6) memes permitieron conocer la internalización de la violencia en tres (3) dimensiones: física, psicológica y sexual. 

Análisis estadístico 

Se realizó un análisis descriptivo para las variables sociodemográficas. Las variables sociodemográficas recopiladas fueron: nacionalidad, orientación sexual, edad y nivel de estudios más alto completado. Se realizó una prueba de chi-cuadrado para estudiar las diferencias entre las tres dimensiones de violencia de pareja: física, psicológica y sexual. El análisis estadístico se realizó utilizando el programa estadístico Statistical Product and Service Solutions (SPSS versión 28.0).    

Resultados 

Un total de 79 personas participaron en esta investigación. Se reportó que la mayoría de los participantes había completado Escuela Superior (37), seguido por un Bachillerato (26), Grado Técnico (8) y Maestría (7). Solamente un participante había completado un Doctorado (M = 1.43, DE = 1.10). El rango de edad fluctuó entre 21 y 31 años (M = 24, DE = 3.0). En relación con la internalización de violencia entre los participantes, el análisis estadístico evidenció una diferencia estadísticamente significativa en las dimensiones de violencia exploradas, 𝜒2 (2) = 9.74, 𝑝 = .008. El 41% de los participantes internalizaban a nivel físico, el 53% a nivel sexual y un 58% a nivel psicológico. Estos resultados sugieren que existe una diferencia significativa en la manera en que hombres heterosexuales de nuestra muestra internalizan la violencia.    

Discusión 

Este estudio buscó conocer la internalización de la violencia en hombres heterosexuales. Los resultados de este estudio evidenciaron que los hombres heterosexuales demostraron internalizar la violencia. Sin embargo, la forma de internalizar la violencia fue distinta de acuerdo con las dimensiones de la violencia evaluadas. En relación con la violencia física, se evidenció que fue la menos internalizada. Una posible explicación por la cual se presenta menor internalización hacia este tipo de violencia podría estar asociado con los estereotipos de género atados a la masculinidad. Los estereotipos de género producen y perpetúan nociones asociadas a la masculinidad, como la agresividad y dominancia, lo que impide que los hombres se perciban como posibles víctimas de agresiones físicas por parte de mujeres asociadas al estereotipo de ser débiles y sumisas. Como resultado, se contrastan ambas nociones producidas, perpetuadas y normalizadas a través de los estereotipos de género. Los estereotipos de géneros que identifican la masculinidad con un sentido de supremacía llevan a provocar rechazo hacia la violencia física (Toro, 2009). El cuestionar o rechazar esta dimensión de violencia en un hombre bajo estos estereotipos llevaría a un cuestionamiento sobre su masculinidad (Betancourt et al., 2012; Glosario para la Igualdad, s.f.).    

En relación con la violencia sexual, una posible repuesta recae nuevamente en los roles asignados al género masculino. Segato (2003) plantea que uno de los mandatos de la masculinidad es la potencia sexual. Dicha exigencia hacia los hombres heterosexuales les cohíbe rechazar propuestas sexuales por temor a verse invalidada su masculinidad (Taylor et al., 2021). Por último, nuestros resultados evidencian que la violencia psicológica fue la de mayor internalización. Nuestros resultados son consistentes con estudios, en los que se establece la violencia psicológica como la más frecuente, seguida por la física y luego la sexual, cuando esta es perpetrada por mujeres hacia hombres (Buitrago, 2016; Folguera, 2014). Dicho hallazgo pudiera indicar que la internalización de la violencia psicológica en los hombres los vulnerabiliza ante el tipo de violencia de pareja al que más propensos están (Machado & Farinha, 2023). Los memes presentados para esta dimensión de la violencia de pareja mostraban el no permitirle tener amistades a la pareja y gritos con celos irracionales. Una posible explicación a la internalización de dichas representaciones pudiera ser que la cultura heteronormativa normaliza las señales de la violencia perpetrada por mujeres hacia los hombres, lo que lleva a que los hombres no perciban estas señales con la misma premura que las mujeres (Delgado et al., 2015). Igualmente, los jóvenes tienden a normalizar la violencia de pareja (González & Fernández, 2014), lo cual pudiera explicar nuestros hallazgos de acuerdo con nuestra población.   

Finalmente, el género y la cultura condicionan la percepción de lo que es considerado como violencia en la pareja, por lo que los hombres pueden llegar a culpabilizarse por las discusiones que tienen con sus parejas o a entender la violencia como método de sus parejas para comunicar sus expectativas sobre la relación (Rojas-Andrade et al., 2013). De igual forma, las distintas frecuencias de internalización en los hombres heterosexuales, según el tipo de violencia de pareja recibida, están subordinadas a la cultura y a los estereotipos de género.  

Conclusión  

Este estudio evidencia la internalización de la violencia y cómo varía significativamente entre las dimensiones física, sexual y psicológica entre una muestra de los hombres heterosexuales en Puerto Rico. Los hallazgos de este estudio sostienen que existe una problemática de internalización de la violencia de pareja hacia el hombre en el contexto de la pareja heterosexual. Entender cómo las diferencias en los roles de género impactan el nivel de internalización para cada dimensión de la violencia de pareja es necesario. No hay un acuerdo general sobre cómo definir la violencia en las relaciones de pareja, puesto que los roles de género interfieren en cómo se ve la violencia hacia las mujeres versus hacia los hombres. Esta situación pudiera o no provocar que los hombres heterosexuales en Puerto Rico asuman pasivamente la violencia de pareja infligida por mujeres, sin abordarla como un problema. Los resultados de esta investigación son congruentes con que existe una diferencia estadísticamente significativa en el nivel de internalización para cada dimensión de la violencia de pareja en el caso de los hombres jóvenes heterosexuales en Puerto Rico.    

Este estudio contribuye a la literatura científica sobre la violencia de pareja en Puerto Rico, en los casos en que la misma es ejercida por mujeres. Adicionalmente, le da importancia a la violencia hacia la pareja cometida por mujeres, a pesar de esta ser una minoría en Puerto Rico. Al resaltar la existencia de dicha problemática, fomenta el diálogo sobre la importancia de orientar a la población puertorriqueña hacia prácticas saludables en sus relaciones de pareja. La violencia doméstica resulta perjudicial para la salud pública de Puerto Rico, y la misma no se puede rechazar si es normalizada o internalizada. Entender que la tolerancia de los hombres a la violencia de pareja perpetrada por mujeres no es igual a su inexistencia resulta fundamental para profundizar sobre esta problemática. De igual modo, el presente estudio propone un método innovador que hace uso de los memes para conocer la internalización de problemáticas sociales.  

Limitaciones 

Entre las limitaciones de este estudio se encuentran: el tamaño de la muestra, el sesgo de respuesta, el tiempo para la recopilación de datos y las variables no controladas. Los resultados de esta investigación no son generalizables puesto a que el número de participantes es insuficiente para representar a la población de hombres jóvenes heterosexuales en Puerto Rico. Adicionalmente, las investigadoras no podemos determinar si hay variables no controladas que pudieron influir en las respuestas de los participantes tales como el sesgo de respuesta. Asimismo, el tiempo para recopilar los datos fue breve.   

Recomendaciones para futuras investigaciones 

Se recomienda para estudios futuros desarrollar estrategias para contrarrestar las limitaciones antes mencionadas. Por otra parte, se recomienda aplicar el instrumento a otras poblaciones puesto a que los niveles de internalización pudieran ser distintos dependiendo del sexo, género u orientación sexual.  

Referencias 

Betancourt, M., Rodríguez, V., & Crespo, L. (2012). Roles de género, conductas y significado de la experiencia en la relación de pareja de mujeres que han convivido con hombres con la condición de alcoholismo en Puerto Rico. Revista Puertorriqueña de Psicología, 23http://pepsic.bvsalud.org/pdf/reps/v23/a07.pdf 

Buitrago, Y. (2016). El maltrato hacia el hombre: Una problemática invisible en Iberoamerica [Tesis doctoral, Universidad Cooperativa de Colombia]. Repositorio Institucional UCC. https://repository.ucc.edu.co/bitstream/20.500.12494/741/1/EL%20MALTRATO%20HACIA%20EL%20HOMBRE%20UNA%20PROBLEMÁTICA%20INVISIBLE%20EN%20IBEROAMERICA.pdf 

Campos, G. (2022). Ejemplo de violencia psicológica (no se le permite tener amistades) [Fotografía]. Facebook. https://www.facebook.com/groups/569838260916478/permalink/790693638830938/   

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Apéndice 

Apéndice A: Ejemplo de violencia psicológica (no se le permite tener amistades) 

Fuente: Facebook, Guadalupe Campos, 2022 

Apéndice B: Ejemplo de violencia física (golpes fuertes) 

Fuente: Facebook, Diego Leal, 2020  

Apéndice C: Ejemplo de violencia sexual (relación sexual obligada) 

Fuente: Facebook, Juango Garat, 2012 


Posted on May 30, 2024 .

Del polvo a la poesía: la poética del sida, la melancolía griega y el legado de Susan Sontag en Invitación al polvo de Manuel Ramos Otero

From dust to poetry: The poetics of AIDS, Greek melancholia and the legacy of Susan Sontag in Invitación al polvo by Manuel Ramos Otero   

Valeria S. Acevedo-Argüelles
Departamento de Literatura Comparada
Facultad de Humanidades, UPR RP

 

Recibido: 01/03/2024; Revisado: 18/04/2024; Aceptado: 01/05/2024 

Resumen 

Los poemas en Invitación al polvo (1991) de Manuel Ramos Otero abordan la realidad emotiva que experimenta del autor desde que recibe su diagnóstico hasta su lecho de muerte. Aunque Ramos Otero no establece un orden secuencial en sus poemas para explorar la progresión de su enfermedad, los poemas “Insomnio”, “Nobleza de sangre” y “La rosa” sugieren una línea del tiempo desde su diagnóstico hasta su fallecimiento en donde el autor poco a poco acepta su muerte próxima. Este artículo contextualiza los tres poemas dentro de la pandemia del sida, para luego abordar su análisis literario.  

Palabras claves: poética, sida, lírica terminal, identidad, enfermedad como metáfora 

Abstract 

The poems in Manuel Ramos Otero's Invitación al polvo (1991) tackle the emotive reality experienced by the author from the moment he receives his diagnosis up until his deathbed. Although Ramos Otero does not establish a sequential order in his poems to explore the progression of his illness, the poems “Insomnio,” “Nobleza de sangre,” and “La rosa suggest a timeline from his diagnosis to his passing where the author gradually accepts his approaching death. This article contextualizes these three poems within the AIDS pandemic to then approach their literary analysis.   

Keywords: poetics, AIDS, lírica terminal, identidad, illness as metaphor 

Introducción 

Invitación al polvo (1991) es la obra poética emblemática del escritor puertorriqueño Manuel Ramos Otero, publicada póstumamente tras su fallecimiento en 1990. El título mismo, el cual sugiere los temas de finitud y sexualidad que se exploran en el poemario, juega con la dualidad del término “polvo”. Este término alude tanto al versículo bíblico “Pues polvo eres y al polvo volverás” (La Biblia de las Américas, Gen. 3:19) como al coloquialismo puertorriqueño asociado al acto sexual. Los poemas, imbuidos de una emotividad intensa reminiscente de la melancolía helenística, abordan tabúes sociales y desafíos personales del autor. Compuesto entre 1985 y 1990 en Nueva York y Puerto Rico, Invitación al polvo trasciende sus ubicaciones geográficas, ya que se arraiga en la materialidad del cuerpo del autor tanto en el contexto de sus experiencias sexuales y amorosas como en sus experiencias con el sida. El poemario está dividido en tres secciones: “De polvo enamorado”, “La víspera del polvo” y “La nada de nuestros nunca cuerpos”. La primera sección, y a su vez la más extensa, explora las experiencias homoeróticas de Ramos Otero en torno a la figura central de José como el objeto amado. Este segmento también aborda los temas de colonización e independencia que el autor posteriormente relaciona con las dinámicas de poder dadas al enfrentar el sida. La intersección de la identidad sexual y la conciencia política se manifiesta de manera profunda en esta parte del poemario. 

En la segunda sección, “La víspera del polvo”, que parece hacer referencia a la novela La víspera del hombre de René Marqués, Ramos Otero se sumerge directamente en sus propios padecimientos con la enfermedad del sida. Esta sección explora la vulnerabilidad del autor frente a su propia mortalidad, y, además, se convierte en un testimonio conmovedor que refleja la realidad de la mayoría de los pacientes de sida en la década de los ochenta. Los poemas de Manuel Ramos Otero en “La víspera del polvo” abordan la realidad emotiva que experimenta el autor, desde que recibe su diagnóstico hasta su lecho de muerte. Aunque Ramos Otero no establece un orden secuencial en sus poemas para explorar la progresión de su enfermedad, los poemas “Insomnio”, “Nobleza de sangre” y “La rosa” sugieren una línea del tiempo —desde su diagnóstico hasta su fallecimiento— en donde el autor va poco a poco alcanzando una aceptación de su muerte próxima. 

La enfermedad  

En la década de 1980, Puerto Rico y Nueva York experimentaron un aumento significativo en los casos de VIH/sida. La transmisión del virus en estas áreas estuvo vinculada principalmente a prácticas de riesgo, como el uso compartido de agujas entre usuarios de drogas intravenosas y prácticas sexuales sin protección. El estigma social asociado con la enfermedad y la falta de conciencia pública sobre las medidas preventivas también contribuyeron a la propagación del virus. En Puerto Rico, la crisis del VIH/sida se vio agravada por factores socioeconómicos y culturales específicos al archipiélago. La población enfrentó desafíos significativos en términos de acceso a la atención médica, educación sexual y recursos preventivos. La situación se vio exacerbada por la falta de recursos gubernamentales dedicados a programas de prevención y tratamiento. Entre enero de 1981 y febrero de 1997, Puerto Rico tuvo unos 23,089 casos reportados de sida. Además, en 1997, San Juan era la séptima metrópoli de los Estados Unidos con mayor incidencia de casos por cada 100,000 habitantes (Gómez et al. 378). En Nueva York, como epicentro global de la epidemia en ese momento, la crisis del VIH/sida afectó de manera desproporcionada a comunidades marginadas —en particular a la población LGBTQ+— y a grupos étnicos marginados. 

A su vez, se vio afectada significativamente la calidad de vida de los pacientes de VIH/sida en Puerto Rico y Nueva York. Además de los desafíos físicos asociados con la enfermedad, como la pérdida de peso extrema y la debilitación del sistema inmunológico, la estigmatización rampante produjo desafíos mentales y emocionales. La ausencia de tratamientos efectivos al inicio de la epidemia agravó la sensación de desesperanza entre los pacientes afectados. Susan Sontag, en su libro AIDS and Its Metaphors (1989), describe cómo el paciente común solía enfrentarse a los estigmas al ser diagnosticado con SIDA: 

Indeed, to get AIDS is precisely to be revealed, in the majority of cases so far, as a member of a certain “risk group,” a community of pariahs. The illness flushes out an identity that might have remained hidden [...] It also confirms an identity and, among the risk group in the United States most severely affected in the beginning, homosexual men, has been a creator of community as well as an experience that isolates the ill and exposes them to harassment and persecution. (25) 

Este pasaje explica cómo el contraer VIH/sida conlleva una revelación fundamental sobre la identidad del paciente. El proceso de “revelación” o “clasificación” social —como descrito por Sontag— no solo afecta al paciente a nivel biológico o corporal, sino que también lo sitúa en una categoría social específica. Consecuentemente, influye en la manera en que es percibido y hasta en el tratamiento médico que recibe. Ramos Otero fue más que consciente de este proceso al redactar Invitación al polvo. Por lo tanto, aunque su obra —en especial sus escritos críticos— siempre ha abogado por la búsqueda de una autonomía artística radical que no debe ser sometida a pretensiones universalistas del canon occidental (Luna 191), su poesía alude a una vivencia compartida por las personas cuir que padecieron del VIH/sida.  

El diagnóstico  

En Invitación al polvo, Ramos Otero hace alusión a cuando fue diagnosticado con sida únicamente en su poema “Insomnio” (46). El poema comienza describiendo la llegada de un sobre que contiene los resultados de su condición médica y que la voz poética se muestra renuente a abrir. Desde el inicio, se establece de manera contundente una equivalencia entre un diagnóstico positivo de esta enfermedad y la muerte: “Esta mañana llegaron los resultados de mi muerte y todavía no abro el sobre (el ataúd, debiera decir)” (46). Aunque el poema no menciona explícitamente al sida, es posible identificar la enfermedad dada la contextualización proporcionada por los poemas circundantes. Esta equivalencia entre la enfermedad del sida y la muerte es una que Sontag aborda a detalle en AIDS and Its Metaphors como una crítica a la práctica médica de su momento. Sontag percibe esta equivalencia como falsa, como una asociación que no beneficia al paciente de ninguna manera y, en cambio, socava sus expectativas de vida al agobiarlo con desesperanza.  

Este argumento de Sontag no se limita al sida. Su obra anterior y más reconocida, Illness as Metaphor (1978), examina los efectos negativos de esta equiparación con relación al cáncer y la tuberculosis. La premisa fundamental de Sontag es que equiparar estas enfermedades a la muerte conduce a un tratamiento estigmatizante, lo cual es una tendencia que no debería tener cabida alguna en el ámbito médico. Según Sontag, estas enfermedades son fenómenos biológicos concretos, no entidades místicas.  Al abordar aspectos místicos o metafóricos en el tratamiento, el personal médico le atribuye indirectamente al paciente un sentido de culpa por su enfermedad. En el caso del sida, la pensadora explica: “The unsafe behavior that produces AIDS is judged to be more than just weakness. It is indulgence, delinquency —addictions to chemicals that are illegal and to sex regarded as deviant” (Sontag 25). Este sentido de responsabilidad individual por la enfermedad se vuelve letal cuando se entrelaza a un sentido rampante de homofobia sistémica. 

Sin embargo, aunque los argumentos de Sontag son increíblemente importantes al abogar por un tratamiento justo para el paciente, especialmente en el contexto de las identidades cuir, la poesía de Ramos Otero se encarga más que nada de representar la realidad emotiva de un paciente de sida. Su poesía no aborda cuestiones pragmáticas del tratamiento de la enfermedad. La realidad emotiva presentada por Ramos Otero puede incluir todo, desde reflexiones existenciales sobre su creación literaria, hasta paralelos entre el desgaste físico provocado por su enfermedad y la desesperanza. En el poema “Insomnio”, la voz poética ni siquiera menciona en algún momento el abrir el sobre y confirmar su diagnóstico. Aun así, la convicción de su enfermedad —y por ende de su muerte— es tan incuestionable que el poema se trata de una visión sobre la vida después del fallecimiento de la voz poética:  

El único temor que abrigo es que la muerte   

sea un insomnio eterno en un país fatal   

sin cigarrillos, en un lecho sin fin   

habitado por nadie, sin que nadie me clave,   

como al otro, en un cielo que quiere ser cuneta. (46) 

La visión se trata de las peores circunstancias en donde puede hallarse el poeta luego de perecer tras los abatimientos de su enfermedad. Utiliza múltiples metáforas para describir esta visión. El título mismo del poema sugiere que uno de sus temores más profundos es la incapacidad de alcanzar verdaderamente un descanso. No obstante, la elección de la palabra “insomnio” insinúa un desgaste corporal más allá de un simple estado de vigilia constante. Por ende, es como si expresara que su mayor pesadumbre es que el desgaste corporal que enfrenta al momento a consecuencia del VIH/sida lo persiga después de la muerte. La ausencia de cigarrillos en este más allá hipotético es una metáfora para la ausencia de placer, especialmente dado el hecho de que luego menciona “sin nadie que me clave” (46). Aunque el verbo clavar hace alusión a otro coloquialismo puertorriqueño asociado con el coito, también alude a una imagen religiosa del sacrificio o martirio de Cristo. Ramos Otero no es ajeno a las alusiones bíblicas constantes, lo que sugiere que su más allá de pesadilla es uno que no requiera sacrificio. Finalmente, la voz poética expresa una ansiedad profunda por la soledad. En esencia, la peor pesadilla de la voz poética después de la muerte es un lugar sin descanso, sin placer, sin sacrificio, donde se encuentre irrevocablemente solo. En la última línea del poema, describe a este lugar como “un cielo que quiere ser cuneta” (46) —es decir, un más allá que rigidiza y reglamenta el flujo de su alma. Esta es la verdadera pesadilla: la ausencia de libertad. 

Aunque “Insomnio” se encarga de describir las peores ansiedades de Ramos Otero, también sienta una base para los temas que abarcan su poesía en términos generales. Por ejemplo, la voz poética utiliza a la escritura como un método de evasión de la realidad para no tener que abrir el sobre que confirma su diagnóstico. Pese a que este método de evasión está documentado en múltiples poemas, la existencia misma de Invitación al polvo, escrito a lo largo de su enfermedad hasta su lecho de muerte, sirve como evidencia. Por esa misma línea, la voz poética reflexiona sobre la naturaleza de la muerte de los escritores. Establece que los escritores mueren sin importar que hayan tenido éxito en vida —“en un féretro de roble forrado / de moaré” (46)— o todavía apegados a las ficciones y a los mundos de sus obras —“en un museo de humo / habitado por dragones de papel / con rostro de bugarrón caribeño” (46). Además, el poema “Insomnio” introduce el leitmotiv de la rosa que se seguirá elaborando en la sección “La víspera del polvo”, especialmente en uno de sus poemas más notorios, “La rosa”. Desde “Insomnio”, ya Ramos Otero equivale a la rosa con la muerte cuando escribe: “porque no todas las rosas son iguales / aunque se llamen rosas, porque no / todas las muertes son la misma” (46).  

Regateos existenciales 

El único instante en Invitación al polvo donde la voz poética menciona explícitamente al sida es en el poema “Nobleza de sangre” (p. 62-63). A la par con los motivos religiosos que suele utilizar Ramos Otero, el poema es un tipo de sermón u oración donde le echa en cara a Dios las injusticias de los padecientes del sida al irónicamente darle las gracias por las mismas. Las alusiones religiosas de Ramos Otero van a la par con las temáticas sobre el más allá, la trascendencia y la muerte que funcionan como hilo conector en todos los poemas de “La víspera del polvo”. “Nobleza de sangre” constituye, más que nada, un regateo existencial de la voz poética la cual experimenta corpóreamente los síntomas despiadados del sida.  

En la primera mitad del poema, la voz poética comienza cada uno de sus reclamos con “Señor” (62). La palabra está estilizada en cursiva tal vez para proveer énfasis, o tal vez para comunicar que se trata de un término ajeno a la “lengua” —al vocabulario habitual— de la voz. La estilización en cursiva sugiere extrañeza y distancia. Esta anáfora anticipa las críticas que lanzará contra el nombre de Dios. Su premisa fundamental es que no existe razón lógica que justifique el dolor causado a los padecientes del SIDA, cuya mayoría son “tecatos y maricones de New York, San Francisco, Puerto Rico y Haití” (62). Inmediatamente, Ramos Otero destaca en este poema las mismas conexiones identitarias al sida que destacó Sontag en AIDS and Its Metaphors. Sin embargo, el autor extrapola esta conexión no desde un estudio académico y meticuloso de las dinámicas sociológicas del sida, sino desde su experiencia vivida como hombre homosexual en estas ciudades y padeciente de la enfermedad. Por otro lado, compara su experiencia con aquellos grupos religiosos que parecen haber sido absueltos del sida, como si esta enfermedad fuera una plaga del Antiguo Testamento dictaminada por Dios hacia los “tecatos y maricones” (p. 62). Para probar su punto de la irracionalidad de este castigo, la voz poética establece que estos grupos religiosos han sido absueltos de la plaga ya que reconocen inherentemente los caprichos de Dios y apelan a los mismos. Según la voz poética, apelan a un Dios soberbio, arrogante, sediento de poder y hasta posiblemente arrepentido de sus crímenes de guerra. Por ejemplo, si los religiosos piden el diezmo y se hacen ricos apelando al miedo de la población, se debe a que “saben que [de Dios] es todo el oro de los Incas y el dólar doble” (62). En esta línea colmada de ironía, la voz poética no solo insinúa la avaricia del Señor de los cielos, sino que directamente hace referencia a las dinámicas de poder de la colonización, en donde se utilizó al cristianismo como una artimaña para la asimilación y la violencia.   

Al fin y al cabo, la identidad es una de las temáticas más potentes de todo el poema. En “Nobleza de sangre”, Ramos Otero no solo cuestiona sus propias identidades, sino que también cuestiona las identidades de Dios. Por ende, las alusiones al colonialismo no son extrañas. Su experiencia como sujeto colonizado es un tema que explora desde antes en otros poemas de la colección, como en los poemas “23” y “26” de la primera sección titulada “De polvo enamorado”. Al traer a la mesa al colonialismo como uno de los factores definitivos de su experiencia vivida, lo que hace es enfatizar el rol de Dios como un opresor contrario a un ser misericordioso. En su poema “La caja china”, en el que Ramos Otero describe la evolución de su vida amorosa a lo largo de su vida, habla de Dios como su primer amante: “Me amaba con espíritu como si los dos fuéramos niebla / y la piel fuera menos, mucho menos, que la nada” (52). Por ende, las alusiones religiosas constantes del autor se deben a que la religión ha sido un elemento constante para sí desde su infancia. Además, apoya la naturaleza cíclica que usualmente poseen sus temáticas: Dios es tanto la figura amorosa que ha estado desde su niñez como la figura hegemónica a la cual cuestiona en sus últimos días. 

Más allá de su crianza religiosa, el dolor que sufre diariamente por el sida es lo que realmente le lleva a tales consideraciones de Dios como un ser opresor. Como establece la cita anterior de “La caja china”, Dios no considera al cuerpo al momento de amar, sino al espíritu. Por lo tanto, los padecimientos corpóreos de la voz poética —como “esos sudores o escalofríos nocturnos [...] ese cansancio eterno, Señor, que no me deja caminar [...] ese asco colectivo al Kaposi Sarcoma y a la tuberculosis, a la flaquencia y a los hongos epidérmicos” (63)— son el tipo de situaciones que le resultan incomprensibles a Dios desde su inmaterialidad. Dios como ser incorpóreo nunca podrá experimentar los padecimientos y dolores que la voz poética sí experimenta. En estos versos, Ramos Otero menciona explícitamente algunos aspectos de su sintomatología, lo cual le permite suscitar a su cuerpo como paralelo al dolor de su espíritu. Por consiguiente, su cuerpo es evidencia de sus pesares de la misma manera en que es el agente que los causa. Este planteamiento se opone a los de Sontag en tanto AIDS and Its Metaphors e Illness as Metaphor. Según Sontag, no debe existir correlación entre el estado de ánimo del paciente y la mejora de su enfermedad, ya que le atribuye la culpa injustamente al estado de ánimo del paciente si este no se mejora. Sin embargo, este postulado no refleja la realidad emotiva de Ramos Otero, el cual utiliza a su cuerpo como una metáfora en su poesía para abordar el dolor anímico que le generan sus padecimientos. 

Más adelante en “Nobleza de sangre”, como parte de la temática de la identidad, la voz poética ejecuta una reclamación identitaria radical de los estigmas que han plagado su experiencia como paciente del sida. En el clímax del poema, su angustia lo lleva a declarar: “Señor, me voy a tomar la poca libertad que me queda, colonizado al fin, / y definir nuestra identidad: ¡Que nos llamen sidosos de una vez y todas!” (63). En lo que respecta al papel de Dios como opresor en el poema, la reclamación identitaria como paciente de sida se presenta como un desafío significativo a los sistemas opresores que lo han estigmatizado despiadadamente. En términos generales, los procesos de reclamación son intrínsecos a la búsqueda de la equidad, la justicia y la emancipación de grupos históricamente marginados. La noción de reclamar una identidad implica un acto consciente de resistencia que va más allá de una mera afirmación; constituye una estrategia de confrontación y transformación de las narrativas preexistentes impuestas por los opresores. En este caso, el llamarse sidoso se trata de una reclamación radical de los estigmas provocados por los grupos religiosos discutidos en el poema; y no solo ante los grupos religiosos, sino ante el poder hegemónico y sistémico representado por Dios mismo.  

Luego de esta reclamación, Ramos Otero se atreve a cuestionar las identidades de Dios con la siguiente pregunta: “¿qué te llevó a otorgarles la franquicia de la segunda destrucción de Sodoma, a los americanos?” (63). En otras palabras, cuestiona por qué Dios le exime del castigo de la “plaga” del sida a un pueblo que ha cometido de las mayores aberraciones históricas hacia otros pueblos. Además, la mención de Sodoma posee una relación intrínseca con representaciones de la homosexualidad, especialmente con el término sodomización. La mención singular de Sodoma —no en conjunto con Gomorra como suele nombrarse— alude directamente a la identidad cuir de la voz poética y los estigmas vinculados al sida como una enfermedad de la comunidad LGBTQ+. Es más, alude a la conceptualización opresora de la homosexualidad como enfermedad mental y pecado en sí misma. Incluso antes de la epidemia del sida, la homosexualidad ya había sufrido históricamente de patologización. La American Psychiatric Association no eliminó explícitamente la homosexualidad del Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (DSM) hasta 1973; y no fue hasta 2013 que eliminó por completo las referencias a los trastornos relacionados con la angustia por la orientación sexual. 

Empoderado con su nuevo título de sidoso y con un nuevo sentido de valentía, la voz poética le brinda explicaciones posibles a Dios para su apoyo de los opresores desde una perspectiva freudiana mediante conjeturas que parecen herejías: 

¿Será, tal vez, tu soledad total, tu colosal hastío, tu complejo de   

culpa con tantos genocidios, tu frustración sexual con los apóstoles,   

o la ingenua ilusión de creer que el derecho al amor, a la carne secreta,   

a la vida y la muerte aún te pertenecen con affidavit de cuna? (63)

La mención de Freud en la conclusión del poema enfatiza la temática de las dinámicas de poder que se encuentra en todo el poemario, especialmente con relación a una figura hegemónicamente masculina como lo es Dios. En un verso anterior, Ramos Otero describe al poder de Dios con la siguiente metáfora: “la dulce cortadura de tu espada de carne” (62). Esta descripción sincretiza el poder divino en el símbolo fálico de la espada, lo cual se conecta perfectamente con los postulados freudianos que la voz poética trae a la mesa al final del poema. Todas las críticas que Ramos Otero otorga al carácter de Dios en “Nobleza de sangre” se asocian con su visión de la peor versión del más allá en “Insomnio”: la soledad, el hastío y hasta la represión sexual. Existe una tensión entre el deseo de amar a la figura divina que fue su primer amor y odiarla fervorosamente. La opresión divina imposibilita su apreciación de Dios, generando puro resentimiento —el efecto opuesto del amor. Adicionalmente, en “Nobleza de sangre”, Ramos Otero alude a la cuneta previamente mencionada en “Insomnio” como símbolo del yugo divino: “[los filmógrafos] restituyeron tu divina mugre de cuneta” (63). Por ende, la cuneta es uno de los leitmotifs que Ramos Otero utiliza para establecer la unidad de efecto en su poesía. Algunos motivos adicionales son la resurrección, el relato de Lázaro, la figura de Dios, la técnica de la caja china y, finalmente, la rosa. 

El viaje 

“La rosa” se destaca como uno de los poemas más renombrados de Manuel Ramos Otero, donde el autor aborda la llegada inminente de su propio fallecimiento. He aquí la tercera y última etapa de su enfermedad luego de enfrentar la negación de su diagnóstico y el regateo existencial: la aceptación de su muerte. El símbolo de la rosa alude por sí solo a la tradición barroca del memento mori, aunque también puede aludir a la tradición literaria del Siglo de Oro hispano en general, tanto el Barroco como el Renacimiento. En su “Soneto XXIII”, Garcilaso de la Vega utiliza a la rosa para abordar lo efímero de la juventud y la inevitabilidad de la muerte, estableciendo: “Marchitará la rosa el viento helado”. Aproximadamente un siglo después, Sor Juana Inés de la Cruz en “A una rosa” le atribuye consideraciones existencialistas y mortales a una rosa a través del uso de la prosopopeya: “Con que con docta muerte y necia vida, / Viviendo engañas y muriendo enseñas”. Por lo tanto, esta relación entre la rosa y la muerte es una que precede a Ramos Otero y a la cual intencionalmente hace alusión. 

El poema comienza con los mismos versos con los que termina, como un uróboro: 

El martes que viene voy de viaje.  

No es necesario hablar de mal agüero.  

Regreso al pan, al mar y al aguacero.  

A humedecer con polvos mi homenaje. (64)

En estos versos, la voz poética anuncia su propia muerte con corte de profeta. No se trata de un “mal agüero”, es decir, una predicción falsa o un maleficio, sino de todo lo contrario. El tono es de certeza. Asimismo, anuncia que su fallecimiento ocurrirá el martes siguiente, evocando una superstición arraigada en los países hispanohablantes como Puerto Rico, donde los martes son considerados días de mala suerte. Por lo tanto, las circunstancias de su defunción, las cuales están plagadas con los padecimientos del SIDA, surgen de una desdicha. No obstante sus padecimientos, Ramos Otero encierra en sí mismo una conexión trascendental con elementos naturales como el alimento y el agua. Los elementos mencionados por la voz poética —el pan, el mar y el aguacero— sugieren alusiones bíblicas como el cuerpo de Cristo, el mar Negro y hasta el diluvio. Por esta razón, no debe hablarse de augurios negativos, ya que la voz poética afirma su trascendencia a través de estos elementos. Contrario al tono divino y sobrehumano de estas alusiones bíblicas, la voz poética describe su vida como una llena de placer, de pecado y de disfrute. Ramos Otero, promulgador de la individualidad radical, siempre se opuso a ser un “hombre de papel” (64), un hombre débil que busca la tenuidad en vez de la intensificación de la experiencia humana. Por esta razón, probó “las uvas negras del delirio” (64), una imagen que expresa un sentido profundo de placer y locura —cualidad comúnmente atribuida a los escritores desde la tradición griega— mediante la referencia al dios griego Dionisio. Por ejemplo, en el libro XXX del texto pseudo-aristotélico Problemata, el autor escribe:  

WHY is it that all those who have become eminent in philosophy or politics or poetry or the arts are clearly of an atrabilious temperament, and some of them to such an extent as to be affected by diseases caused by black bile [...]? (Aristóteles 953). 

En otros textos médicos griegos, específicamente de Galeno, se compara a la bilis negra con las lías del vino (Vinkesteijn 295). Por ende, incluso desde la tradición griega existe un hilo entre la poesía, la melancolía y el vino la cual está plasmada también en “La rosa” y en la totalidad de Invitación al polvo

Así como “La rosa” explora las temáticas religiosas tan arraigadas en la poesía de Ramos Otero, también contempla el propósito de su vida como escritor, percibiéndola como una tarea de sacrificio o martirio incesante. Incluso cuando está en su lecho de muerte, no deja atrás los mundos de ideas y las visiones que ha desarrollado desde su profesión. Al fin y al cabo, su escritura es uno de los mayores placeres de su vida y según Ramos Otero: “No hay que pedir perdón por el placer del alma” (64). Sin embargo, a pesar de esta declaración, su poesía pinta la imagen de un hombre en la encrucijada con respecto a sus creencias sobre el placer. Por un lado, el derecho al placer es uno de los principales postulados de su poesía; por otro, ni el mundo ni los cielos de cuneta respaldan esta premisa. Además, un pesar que expresa frecuentemente en su poesía es que sus dolencias físicas causadas por el sida se interponen en su escritura. Ramos Otero termina desarrollando en su escritura una dualidad del ser entre su yo escritor y su yo paciente.  

Dadas las posturas que expone sobre el propósito de su vida, tanto como individuo y escritor, “La rosa” representa la cumbre de la lírica terminal de Manuel Ramos Otero. De este poema sale una de las imágenes más representativas de las temáticas existenciales de la obra, un verso que puede servir como oración tesis para Invitación al polvo: “manos labriegas surcando en entretelas la libertad mortal que nadie entiende” (64). 

Últimas consideraciones  

La exploración de la poética del VIH/sida en Invitación al polvo de Manuel Ramos Otero expone un entramado literario profundamente arraigado en la experiencia personal del autor y en la epidemia que marcó la década de 1980 en Puerto Rico y Nueva York. Al desentrañar la emotividad intrínseca en la obra, se revela la conexión íntima entre la narrativa poética de Ramos Otero y el contexto histórico y cultural en el que emerge. La experiencia del autor, marcada por las dificultades y los estigmas que enfrenta al contraer VIH/sida, trasciende las barreras geográficas y temporales, lo cual resuena con las experiencias compartidas por aquellos que han enfrentado la enfermedad y el estigma asociado. La voz poética, teñida de crítica social, no sólo cuestiona las percepciones de la enfermedad, sino que también indaga en la esencia misma de lo divino y el papel de la religiosidad en las estructuras de poder. Por lo tanto, mediante tres de sus poemas —“Insomnio”, “Nobleza de sangre” y “La rosa”— Ramos Otero es capaz de desarrollar estas temáticas desde el diagnóstico de su enfermedad hasta su muerte en 1990. Su poesía se configura como un monumento literario que explora las intersecciones entre la identidad, la enfermedad y la melancolía desde el contexto puertorriqueño, además de encontrarse en increíble conversación con AIDS and Its Metaphors e Illness as Metaphor de Susan Sontag. 

Referencias  

Aristóteles y Seymour Forster, Edward. Problemata. Clarendon Press, 1927.  

De la Vega, Garcilaso. “Soneto XXIII.” Centro Virtual Cervantes, 2001, https://cvc.cervantes.es/actcult/garcilaso/versos/soneto09.htm 

Gómez, María A., et al. “The Shape of the HIV/AIDS Epidemic in Puerto Rico”. Revista Panamericana de Salud Pública, vol. 7, no. 6, 2000, pp. 377–383. PubMed, doi:10.1590/S1020-49892000000600004 

I. de la Cruz, Juana. “Sor Juana Inés de La Cruz: A una rosa.” Trianarts, 2021, trianarts.com/recordando-a-sor-juana-ines-de-la-cruz-a-una-rosa/#sthash.JctHLHzK.dpbs. 

La Biblia de las Américas. The Lackman Foundation, Bible Gateway, 1997, www.biblegateway.com/passage/?search=G%C3%A9nesis+3%3A18-20&version=LBLA 

 Luna, Noel. La caricia de lo inútil: ensayos 2002-2021. Ediciones Laberinto, 2022.  

Otero Ramos, Manuel. Invitación al polvo. Editorial Plaza Mayor, 1994.  

Sontag, Susan. AIDS and Its Metaphors. Farrar, Straus and Giroux, 1989. 

Sontag, Susan. Illness as a Metaphor. Penguin Classics, 1991.  

Vinkesteijn, Robert. “Galen on Black Bile and Melancholy.” Philosophical Perspectives on Galen of Pergamum: Four Case-Studies on Human Nature and the Relation Between Body and Soul, Brill, 2022, pp. 230–337. 


Posted on May 30, 2024 .

El TDAH, la medicación y sus implicaciones sobre la sociedad actual

ADHD, medications, and their implications on current society   

Paola M. Rivera Arroyo
Departamento de Psicología
Facultad de Ciencias Sociales, UPR RP

 

Recibido: 29/02/2024 Revisado: 16/04/2024; Aceptado: 20/04/2024 

Resumen  

Este escrito tomó como enfoque la medicación como vía de tratamiento para tratar el desorden TDAH. Se expone cómo la prescripción de los medicamentos refleja el estado de la sociedad actual. De tal manera, se examina la relación de los fármacos o medicamentos con los estándares de productividad y funcionalidad exigidos en la sociedad. A raíz de esto, se estudia cómo los diagnósticos llevan a la psicopatologización del sujeto implicando una concepción reducida de lo que es “normal” en las experiencias humanas. El escrito ofrece alternativas, entre ellas, considerar el diagnóstico como una construcción social digna a resignificar.    

Palabras claves: construcción social, medicamentos, sociedad, diagnóstico, TDAH   

Abstract 

This writing focuses on medication as a treatment approach for addressing ADHD. It exposes how the prescription of these medications reflects the current state of society. Accordingly, it examines the relationship of drugs or medications with the productivity and functionality standards demanded in society. As a result, this study examines how diagnoses lead to the psychopathologization of the individual, implying a reduced conception of what is "normal" in human experiences. This article proposes alternatives, among them, considering ADHD diagnosis as a social construction worthy of redefining.  

Keywords: social construction, medications, society, diagnosis, ADHD

Introducción  

El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) ha sido un diagnóstico muy prevalente durante los últimos años. Incluso, los medicamentos se han convertido en un factor esencial en la sociedad, especialmente para individuos con (TDAH) quienes optan por reincorporarse en los “quehaceres” de la vida cotidiana. Por tal razón, analizaré los documentales Take your pills (2018) y The medicated child (2008), entre otras fuentes, para elaborar este escrito. El enfoque será dirigido a partir de las siguientes preguntas: ¿Qué criterios, diagnósticos y síntomas son vinculados con el TDAH? Se tomará como punto de partida el DSM 5-TR para analizar dichos aspectos del diagnóstico. ¿Qué implica la sobremedicalización acerca de nuestra sociedad hoy en día? Se examinará el uso de medicamentos basándose en las exigencias de la sociedad. ¿Qué alternativas y acercamientos se pueden incorporar para tratar el TDAH? Se proveerán otras alternativas de tratamientos en conjunto con iniciativas parar resignificar el TDAH y su tratamiento. Es de particular interés analizar esta categoría diagnóstica, debido a la alta incidencia con la que se presenta.  

Este escrito está basado en la teoría del construccionismo social, cuyo enfoque se basa en cuestionar verdades, ya que se consideran producto del lenguaje, según lo establece Guzmán (2018). “La construcción social del TDAH se puede estudiar desde distintos aspectos y perspectivas, incluidas las condiciones de producción del discurso médico, la construcción de la desviación, las narrativas frente al diagnóstico y las representaciones sociales” (Vargas & Parales, 2017, p. 247). Se considera pertinente un método cualitativo ya que se analizarán las experiencias documentadas de personas que han consumido medicamentos. Este método cualitativo incorpora una postura subjetiva para entender a fondo los fenómenos que ocurren en el entorno. Se utilizará el análisis de contenido como técnica, debido a que conlleva la investigación de datos publicados previamente en los medios sociales, textos, libros o cualquier otro formato, sea físico o virtual (Arteaga, 2022). Esta técnica se considera la más adecuada para analizar las concepciones ya preestablecidas acerca del diagnóstico, los medicamentos y una sociedad hipercompetitiva y de alto rendimiento. Mediante el análisis de los documentales Take your pills y The medicated child se estudiará la realidad social respecto la normalización ante el diagnóstico TDAH y los fármacos utilizados para su tratamiento. 

Revisión de literatura 

El Manual de Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales (DSM 5-TR, 2022) establece que el TDAH se refiere a los patrones persistentes de hiperactividad o inatención que interrumpen la funcionalidad de un individuo. Esta categoría consta de cinco criterios que deben estar presentes en su totalidad para que pueda realizarse un diagnóstico. Cabe destacar que el primer criterio consta de dos partes: una para evaluar la inatención y otra para evaluar la hiperactividad. En esta parte, deben estar presentes al menos seis síntomas de inatención o de hiperactividad; también podrían estar presentes seis síntomas de ambas partes (CDC, 2022). Los síntomas deben haber estado presentes al menos seis meses, provocando retrasos en el desarrollo o impactos negativos en el ámbito social, académico u ocupacional. El segundo criterio establece que algunos de los síntomas deben haber estado presente previo a los 12 años. En adición, la sintomatología debe estar presente en más de dos escenarios del diario vivir (ej. escuela, familia, trabajo, etc.). De esta manera, el DSM 5-TR especifica que los síntomas deben interferir o reducir la capacidad de desempeño del individuo. Por último, se debe incorporar un diagnóstico diferencial, asegurando que los síntomas no son sean manifestados por la presencia de otro trastorno. Como parte de esta categoría diagnóstica es importante especificar si hay una combinación de hiperactividad e inatención en el individuo o solo una de estas predomina (CDC, 2022). Finalmente, se debe especificar la severidad de los síntomas o si el diagnóstico se encuentra en remisión.   

El TDAH ha tenido una cifra creciente con el pasar de los años que se ha visto reflejada en las alzas de medicamentos como tratamiento. Según Alvarenga y Dias (2021), las alzas en medicamentos han ocasionado una epidemia que no se limita a tratar síntomas, sino que se extiende a la búsqueda de algún tipo de mejora cognitiva con finalidad de aumentar la productividad, sin tener en cuenta las implicaciones éticas de este proceso. Este fenómeno ocurre ya que vivimos en una sociedad que valora la competitividad, la productividad y la funcionalidad sobre el bienestar de un individuo. Por tal razón, a la hora de recetar medicamentos y fármacos se pasan por alto los factores como el entorno y las vivencias para mejorar la calidad de vida y la salud mental del paciente.   

Para analizar este fenómeno en la actualidad, es indispensable considerar los inicios del movimiento antipsiquiátrico en los años 60. Según Cea Madrid y Castillo Parada (2018), este movimiento surge a partir de corrientes políticas y contraculturales, cuyo propósito es oponerse a la opresión de la subjetividad. El mismo permitió analizar las relaciones de poder, cuestionando los métodos violentos y opresivos para tratar aquellos individuos que el estado consideraba “perturbados”. Incluso, la aportación de este movimiento es de suma importancia debido a que proporcionó en gran medida los análisis críticos sobre los estigmas atribuidos a quienes no cumplían con las normas sociales. “Los parámetros establecidos socialmente, el vínculo entre la medicalización y el control social se manifestó tempranamente en la experiencia de la locura” (Cea Madrid y Castillo Parada, 2018, p. 560). Esta situación resultó ser alarmante, tanto así, que fue el fundamento para el movimiento antipsiquiátrico. En la antigüedad, la vía de tratamiento no se limitaba a la medicalización, sino que en su mayoría se acudía al manicomio o al asilo para aislar a los desviados del resto de la sociedad. No obstante, “el predominio irrestricto del mercado y la influencia de la industria farmacéutica fueron las claves del ascenso y auge del neoliberalismo en el campo de la salud mental, que permitieron reconfigurar el modelo manicomial bajo una nueva hegemonía: el paradigma farmacológico” (Cea Madrid y Castillo Parada, 2018, p. 560). 

De-construyendo el TDAH y los medicamentos: una mirada crítica 

Esta problemática respecto a los medicamentos para tratar el TDAH es abordada en el documental Take your pills (2018) elaborado por Alison Klayman. Los individuos que forman parte de este documental mencionan haber tomado o estado bajo medicamentos como Aderall y Ritalín, comúnmente recetados para tratar el TDAH. En dicho documental, los sujetos hablan sobre su experiencia con estos medicamentos para mejorar el desempeño, ya sea en la universidad, en el trabajo, en el deporte o en la vida cotidiana. Sin embargo, la razón que une estos testimonios es la necesidad de ser funcional y resaltar ante otros jugadores, estudiantes o compañeros de trabajo.  

En cuanto a las declaraciones en el documental, uno de los sujetos menciona haber tomado Aderall para mantener su productividad y atención a detalles dentro de un ambiente exigente de trabajo (Klayman, 2018). Esto apunta a la necesidad de medicamentos para cumplir con estándares irreales de productividad dentro de un contexto particular, cuyo caso es en el trabajo. Por lo tanto, se podría decir que los síntomas de TDAH son más evidentes o fáciles de identificar en un mundo con demandas atencionales competitivas (Geffen & Forster, 2018). Esto lleva a reflexionar ante la razón por la cual inicialmente se acude al profesional de la salud mental. Es decir, la motivación inicial se debe a la comparación con otros individuos en aspectos de progreso y funcionalidad, que normalmente surgen a partir de la exposición a otros entornos e individuos. Entonces, la administración de medicamentos para tratar el diagnóstico TDAH sugiere que principalmente se toman en cuenta los niveles de desempeño del individuo, en lugar de considerar cómo este se ve afectado en otros aspectos más allá del rendimiento. Entonces, se denomina un parámetro social respecto a lo que se espera acerca del individuo y su manera de funcionar, llevando a catalogarlos bajo un diagnóstico como TDAH si no cumplen con dichas normas prestablecidas, en lugar de tomar en cuenta distintas maneras en las que el individuo se puede manifestar para llegar al mismo punto de progreso que sus pares. Esto sugiere que estamos inmersos en una sociedad más enfocada en establecer parámetros de normalidad y funcionalidad. Por esta razón, suele haber un sentido de comodidad por parte de la sociedad al catalogarlos como “retrasados” y “menos capaces”, cuando por contrario deberían explorarse distintas maneras de practicar la inclusividad de individuos con algún tipo de diversidad funcional. 

Por otro lado, una estudiante en dicho documental menciona que tomar medicamentos como Aderall suele ser una práctica cotidiana entre estudiantes. Según Geffen & Forster (2018), muchos pacientes de TDAH han descubierto, a través de sus ambientes de trabajo, algunas soluciones alternas para lidiar con las demandas sociales y a su vez poder desempeñarse en espacios como la universidad. Un ejemplo de estas soluciones alternas sería la compra y venta ilegal de este medicamento, que ha sido normalizada entre universitarios. La estudiante trae a colación el uso de medicamentos como herramienta para impulsar la competitividad y buen desempeño académico. “Es muy difícil, a pesar del problema ético, saber que se puede obtener con tanta facilidad… aceptas sacar notas más bajas si no pagas dos dólares por una pastilla” (Klayman, 2018, 27:08). Nuevamente, esto implica el grado de competitividad y de productividad que promociona la sociedad, actitud que lleva a que el individuo lo espere de sí mismo. Esto lleva a cuestionar la razón inicial por las cuales se acude a los medicamentos hoy en día.  

Por otro lado, se puede decir que los medicamentos también suponen una estrategia de control por parte de la sociedad que fomenta la “normalidad” en conjunto con la competitividad, productividad y funcionalidad en el individuo. Incluso, Vargas (2017) argumenta que la aparición del medicamento surge ante la necesidad de mantener un control social, es decir, para modificar eficazmente comportamientos considerados desviados o disfuncionales. Es por esta razón que el TDAH se encuentra en un manual de diagnósticos, ya que según la capacidad de adaptación del individuo y la severidad de su sintomatología se etiqueta como normal o anormal. “Se medican cada vez más las conductas cotidianas y se restringe la noción de salud mental a estándares de normalidad inalcanzables, basados en una base pseudocientífica” (Vargas, 2017, p. 2), lo que apunta a que las experiencias normales del ser humano han sido reducidas a un límite impuesto por las llamadas “enfermedades mentales”. Son estas “enfermedades mentales” las que dan paso y sentido al uso de los medicamentos. Es decir, se incorporan los fármacos como manera de reincorporarse en un contexto social compuesto de exigencias de funcionalidad, productividad y competitividad. Entonces, cumplir con dichos criterios es lo que se consideraría sano y normal en la sociedad. 

Similarmente, el documental The medicated child (2008) de Marcela Gaviria elabora sobre la epidemia de diagnósticos de bipolaridad en niños y los medicamentos para tratarlo. Este documental igualmente trata el tema de la productividad y funcionalidad. No obstante, considera a los niños como un ente patologizado en la sociedad. The medicated child toma como ejemplo los niños, que son medicados desde edades tempranas del desarrollo y juegan el papel de “conejillo de india”. Uno de los psiquiatras se expresa acerca de la medicalización como si fuera un experimento; este procede describirlo como un riesgo dado a que no hay manera de asegurar su efectividad (Frontline, 2008). Según Méndez (2011), la efectividad de los medicamentos (en este caso para tratar TDAH) se refiere a la funcionalidad en las actividades cotidiana y no está relacionado con la raíz del problema, sino con la supresión de un síntoma (desatención, hiperactividad, impulsividad). Este tratamiento se impone como vía principal para lograr el funcionamiento óptimo, con la finalidad de que el individuo se reincorpore en el espacio familiar y académico. “El medicamento aseguraba el ajuste social en el ámbito educativo y les concedía la oportunidad de mantener estabilidad en las relaciones con sus pares” (Vargas, 2017, p. 13). El documental demuestra la exigencia de productividad y funcionalidad desde muy temprano en el desarrollo. Tanto así, que una madre expresa la necesidad de medicamentos para su hijo, ya que permite la funcionalidad de su familia, y describe la situación de su hijo como una de vida o muerte (Frontline, 2008). Timimi (2017) establece que la medicación de estimulantes dirigida a los niños para controlar su comportamiento refleja más sobre la cultura capitalista neo-liberal, en lugar del progreso científico. Entiéndase por capitalismo neo-liberal un sistema que opta por la maximización de la libertad individual igualmente en el mercado, y como resultado promueve la competencia, la eficacia y las soluciones instantáneas. Nuevamente, esto implica el contexto en el cual se tiende a patologizar a los niños como consecuencia de las exigencias sociales y culturales. “La perspectiva clínica infantil estaba más dirigida hacia la disminución de los síntomas (eficiencia) y de forma rápida (eficacia) que hacia la búsqueda de terapias psicológicas u otras alternativas” (Timimi, 2017, p. 10).    

La Food and Drug Administration (FDA, 2023) afirma que estos medicamentos pueden ser prescritos a niños de seis años que se encuentran atravesando procesos cruciales de desarrollo fisiológico, con el propósito de reducir síntomas de TDAH y de mejorar el funcionamiento. No tan solo eso, sino que el diagnóstico tiene mayor incidencia durante las edades de tres a seis años, aun cuando el niño no demuestra un control sobre sus propias emociones, y muchas veces les resulta retante comunicarse de forma clara y precisa. Cabe destacar que estas observaciones en su mayoría surgen en comparación con otros niños, mayormente en escenarios como la escuela, donde se espera que el niño se desenvuelva eficazmente en el ámbito social y académico, así manteniendo los estándares de funcionalidad impuestos socialmente entre niños de la misma edad. Sin embargo, no se menciona acerca de posibilidades para analizar los patrones de conducta, los estímulos y la dieta del niño que igualmente podrían estar vinculados con los síntomas de inatención o hiperactividad. Estos argumentos recogen lo que el documental The medicated child intenta exponer como tesis central. Es decir, se puede entender que nuestra sociedad exige cierto grado de funcionalidad desde edades tempranas; de no cumplir con dichas exigencias, conlleva la psicopatologización y la medicación en casos más severos.   

¿Qué alternativas y acercamientos se pueden incorporar para tratar el TDAH? Primeramente, es fundamental reconocer que los diagnósticos, tal como el TDAH, conllevan estigmas y prejuicios. Más bien, cargan consigo etiquetas impuestas socialmente. Igualmente, ocurre cuando se acude a los medicamentos como tratamiento. Un ejemplo de esto es visto en el documental Take your pills cuando un sujeto expresa que el tomar medicamentos podría implicar ser juzgado como débil ante otras personas. Entonces, se puede decir que el tratamiento y el diagnóstico son igualmente acompañados por etiquetas sociales negativas, que no permiten ver más allá de un individuo enfermo o débil. “Entender que (TDAH) es una construcción social, provee un punto de partida no patológico para comenzar a ayudar niños y familias” (Timimi, 2017, p. 4).   

La emisora radial argentina Radio La Colifata, que propone una alternativa para resignificar el estigma de ser “loco” o “enfermo mental”, es un buen ejemplo de esto. Radio La Colifata se organiza para darle voz a personas catalogadas ante la sociedad como “locos” o “enfermos mentales”. “Esas personas estaban en interlocución con sus voces, con las voces que tenían adentro, que muchas veces les daban orden, les hacían sufrir… la estructura del radio inaugura esta posición de ese otro como destinatario de un posible decir” (Larrondo 2007, 1:00). Es de esta manera que se reconoce la locura, los diagnósticos y sus tratamientos como construcción social, cuyo significado es apto y digno de reinterpretar y alterar. 

Habiendo mencionado la necesidad de derrotar el estigma social en cuanto a los diagnósticos, también es necesario reflexionar sobre las limitaciones que tenemos como sociedad para generar un sentido de inclusividad a individuos con diversidad funcional. Es necesario fomentar condiciones donde esta población pueda reincorporarse a distintos espacios educativos y laborales con más seguridad, con miras de crecer y desarrollar su potencial aún más. Además, es indispensable explorar otras formas de lidiar con el TDAH. Entre ellas, propongo que más allá de solamente recibir un medicamento, el proceso de tratamiento debería estar acompañado de alguna intervención terapéutica, cuyo objetivo sea manejar la sintomatología del diagnóstico y reconocer en qué momentos o espacios de la vida diaria se manifiestan estas conductas con más frecuencia. Esto permitirá desarrollar otras estrategias para reducir las conductas relacionadas al TDAH. Además, la terapia no se limita a solamente considerar la sintomatología del diagnóstico, sino que permite indagar en los contextos, los intereses y las particularidades e ideologías del individuo, proveyendo un mapa más concreto de las estrategias o los cambios que podría implementar en su vida. El ejercicio, la nutrición, la meditación, los grupos de apoyo y la terapia cognitiva conductual son otras alternativas que pueden ser implementadas para fomentar cambios positivos en los aspectos conductuales y en las relaciones que sostienen individuos, tanto consigo mismo, como con los demás.

Conclusión 

Los medicamentos y los fármacos son altamente reproducidos con el fin de tratar la sintomatología. Por tal razón, debe haber una mayor apertura a otros tratamientos para el TDAH que consideren esencialmente efectos multifactoriales del sujeto (Méndez, 2011). De esta manera se consideran factores del entorno que también podrían afectar un individuo. Además, Timimi (2017) establece que, en cuanto al tratamiento de personas o niños con TDAH, el progreso depende mayormente de “factores comunes”, es decir de la vida cotidiana, en lugar de técnicas específicas. Por esta razón, este autor propone un enfoque a las relaciones de individuos como una alternativa de tratamiento, además de la dieta/nutrición, el ejercicio y la comunicación/entendimiento. A través de los artículos y materiales audiovisuales analizados se puede concluir que los medicamentos son una estrategia de control social que no está enfocada en atender la raíz del verdadero problema. En adición, la epidemia de medicamentos para tratar desórdenes como el TDAH reflejan estándares no realistas de productividad y funcionalidad en la sociedad. Los medicamentos implican ideas de “normalidad” o “cordura” muy restringidas, de manera que promueven la psicopatologización de comportamientos y experiencias del ser humano. Es por esto que se debe optar por reconocer el TDAH como una construcción social, en lugar de una enfermedad mental, como, por ejemplo, lo trabaja Radio La Colifata. De esta manera se lograría resignificar las implicaciones negativas que se le atribuyen al diagnóstico de TDAH. 

Referencias 

Alvarenga, R., & Dias, M. K. (2021). Epidemia de drogas psiquiátricas: Tipologías de uso na sociedade do cansaço. Psicologia & Sociedade, 33, 1–15. https://doi.org/10.1590/1807-0310/2021v33235950 

American Psychiatric Association. (2022). Neurodevelopmental disorders: ADHD. En Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (5ª ed.). 

Arteaga, G. (2022). Qué es el análisis de contenido. TestSiteForMe. https://www.testsiteforme.com/que-es-el-analisis-de-contenido/   

Cea Madrid, J. C., & Castillo Parada, T. (2017). Locura y neoliberalismo. El lugar de la antipsiquiatría en la salud mental contemporánea. Política y Sociedad, 55(2), 559–574.  

Centro para el control y la prevención de enfermedades (CDC). (2022). Síntomas y diagnóstico del TDAH. https://www.cdc.gov/ncbddd/Spanish/adhd/diagnosis.html 

Gaviria, M. (Escritora y directora).  (2008, enero 8). The medicated child (Episodio 5). En M. Gaviria (Productora), Frontline. Public Broadcasting Service. 

Geffen, J., & Forster, K. (2018). Treatment of adult ADHD: A clinical perspective. Therapeutic Advances in Psychopharmacology, 8(1), 25–32. https://doi.org/10.1177/2045125317734977 

Guzmán Martínez, G. (2018). Construccionismo social: Qué es, ideas fundamentales y autores. Psicología y Mente.  https://psicologiaymente.com/social/construccionismo-social 

Klayman, A. (Director). (2018). Take your pills [Documental]. Motto Pictures y Netflix Studios.  

Larrondo, C. (Director). (2007).  LT 22 Radio La Colifata [Documental]. Bausan Films.  

Méndez Solano, M. (2011). La farmacoterapia en el trastorno por déficit de atención con hiperactividad, en escolares: una mirada crítica a la medicalización como única forma de tratamiento. Paideas, 6(2). https://kipdf.com/revista-paideia-puertorriquea-universidad-de-puerto-rico-recinto-de-rio-piedras_5aaddd231723dd4777cd4cae.html 

Timimi, S. (2017). Non-diagnostic based approaches to helping children who could be labelled ADHD and their families. International Journal of Qualitative Studies and Well-being, 12 (1), 1–8.  https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5510228/ 

U.S. Food and Drug Administration (FDA). (2023). Treating and dealing with ADHD. https://www.fda.gov/consumers/consumer-updates/treating-and-dealing-adhd 

Vargas, A. M., & Parales, C. J. (2017). La construcción social de la hiperactividad. Revista Colombiana de Psicología, 26(2), 245–262.  https://doi.org/10.15446/rcp.v26n2.59891


Posted on May 30, 2024 .

Piso doce

  Akari Sustache Báez
Departamento de Psicología 
Facultad de Ciencias Sociales, UPR RP

Recibido: 02/02/2024; Revisado: 12/04/2024; Aceptado: 28/05/2024 

En el piso número diecisiete de la esbelta torre de Watson Enterprises, Margaret esperaba su turno en la sala de entrevistas cuando, de repente, vio entrar a Christopher. Esto no puede estar pasando, musitó mientras agarraba un magazín de negocios para evitar mirarlo. Él la vio y, acto seguido, procedió a ensimismarse en revisar papeles dentro de su cartapacio.   

–Señorita Hanson, puede pasar –anunció la secretaria con una sonrisa de plastilina. 

A Margaret le invadió el presentimiento de que todo iría fatal. Diez minutos después, luego de lo que consideró la peor entrevista de su vida, se dirigió inmediatamente al baño para recomponerse antes de marcharse de aquel lugar, segura de que jamás volvería a pisar sus lustrosos pisos de mármol. Respiró hondo, se dirigió apresuradamente al elevador y presionó el botón del primer piso. Sin embargo, justo cerrándose las puertas, una mano se interpuso. Era Christopher. Margaret se mordió la lengua, tragándose la frustración. 

–El elevador tarda diez segundos, Margaret. Luego de eso no tienes que volver a verme –le dijo, adivinando sus pensamientos.   

Ella resopló, evitando su mirada. El descenso lento se convirtió en eterno cuando el elevador paró en el piso doce. Ambos miraron expectantes, esperando que alguien entrara por las puertas. Sin embargo, las luces se apagaron. 

–¿Qué está pasando? –preguntó Margaret, desesperada por la oscuridad.  

Enseguida se encendieron unas luces de emergencia.   

–Pronto vendrán a sacarnos. Cálmate –aseguró él, en lo que más bien pareció un reproche. 

–Christopher, el problema no es quedarme atrapada en un elevador. ¡Es quedarme atrapada contigo!  

–Margaret, si quieres dejar claro que me odias, ya lo hiciste hace un año y medio....  

–¡Estuviste tres meses poniéndome los cuernos! ¡Para colmo, me hiciste sentir a mí como la culpable por no darte atención! 

–Pues lo siento muchísimo, pero es la verdad. El semestre que estudiaste para el examen de grado te volviste un fantasma. ¡Hasta tu madre lo decía!  

–¿Estás disculpándote y a la vez echándome la culpa?  

–Es que… ¡Margaret, Dios mío! ¿Quieres que admita que te traicioné? Vale, fui un imbécil. Pero tú también me heriste. La única diferencia fue el momento. ¿Crees que no me dolió cuando te enredaste con mi mejor amigo justo después de dejarnos?  

–De que yo te dejara –aclaró ella.  

–De que tú me dejaras… Pero ahora Andy me detesta y perdí una amistad de infancia. 

–No es mi culpa que Andy me hubiese apoyado como tú no supiste hacerlo. La realidad es que no me desaparecí a propósito. Pensaba que, si me amabas, me buscarías aun cuando yo no supiera cómo buscarte. Fue demasiado abrumador el proceso y sabes cuán importante era que aprobara el examen. Mi familia no hubiese soportado el fracaso… –confesó dolida, mirando al suelo. Había transcurrido media hora y ambos se habían sentado en esquinas opuestas.  

–Margaret, pudieran rescatarnos tanto en dos minutos como en dos horas. Vamos a resolver este asunto de una vez y por todas. Imagínate trabajar juntos aquí, evitándonos todos los días.  

–Dudo que me contraten… me fue horrible en la entrevista. Apenas te vi entrar, perdí la cabeza. 

–Yo dije mis apellidos al revés…  

Christopher se quitó el gabán y estiró la espalda. Margaret se recogió el cabello.  

–¿Sigues con Andy?  

–Pues… es complicado. Estamos en una pausa. Me dijo que siente que no lo amo.  

–¿Lo amas?  

–Intento…  

–¿Y a mí?  

Margaret se estrujó el rostro. Entonces lo miró fijamente.

–Todavía me dueles, Christopher. Y creo que, si no te amara, no me dolerías. 

–Hace unos meses fui al psicólogo. Te hice caso finalmente.  

–¿Te dijo que eras un manipulador emocional y que no debías culpar a otros por tus errores?  

Christopher suspiró y apartó la mirada. Margaret continuó.  

–Eso fue lo último que te dije cuando rompimos, pero al parecer tenía que decírtelo un doctor para que lo entendieras. 

–Margaret, lo siento.  

–Vas a decirme que ahora cambiaste…  

–No sé cómo cambiar.  

–Sí sabes. Es que tu orgullo te ciega. 

–Por mi orgullo es que he logrado todo en la vida –refutó él.  

–Excepto amar de forma saludable y eso vale más que un Suma Cum Laude.  

–Tú valías más que mi Suma Cum Laude, Margaret. Pero te esfumaste por cinco meses.   

–Sabes que soy demasiado exigente conmigo misma.  

–Y yo sé que puedes cambiar.   

–¿Cómo? Dime cómo.  

–Tú sabes cómo. Es tu ansiedad que no te deja.  

–Gracias a “mi ansiedad” es que he llegado hasta donde estoy –refutó ella.  

–Pero con ansiedad no eres libre. Sabes que tu libertad vale más que tu miedo al fracaso. 

Margaret se esforzó por no llorar.   

–Llora. Fuimos a seis funerales cuando estábamos juntos.  

–¿En este elevador del demonio?  

–No diría eso. Este elevador me ha regalado una hora contigo y la conversación que necesitábamos hace año y medio.  

–Creo que voy a dejar a Andy.  

Christopher la miró sorprendido. 

–Anoche pensaba en que no sé estar sola. No he pasado más de tres meses sin un novio desde terminar la secundaria. Cuando comienza a irme mal con uno, ya empiezo a involucrarme emocionalmente con el próximo. Andy fue mi próximo y por eso no lo amo. Solo amo cómo me hace sentir.  

–¿Sería irónico decir que a mí me amabas, pero odiabas cómo te hacía sentir?  

–Creo que diste con las palabras.   

–Margaret, ¿y si cambiamos?  

–Pero… yo no quiero volver contigo.  

–No, no para volver. Para que tú seas libre de tu ansiedad y que yo destruya mi maldito orgullo. Es algo que debemos hacer solos.  

Margaret reflexionó unos segundos. Luego asintió en silencio.   

–Gracias, Chris.   

–Dáselas al elevador –dijo sonriendo. 

De repente, se escuchó un ruido y el elevador se encendió. Pese a dos horas de sofocante encierro, al momento de salir titubearon. Luego se miraron y entendieron lo que debían hacer.    


Posted on May 30, 2024 .

Cinco dedos menos

Coralys Agosto Rivera
Programa en Estudios Interdisciplinarios 
Facultad de Humanidades, UPR RP 

Recibido: 15/02/2024; Revisado: 21/05/2024; Aceptado: 28/05/2024

El día que mi abuela perdió los cinco dedos de su pie izquierdo, estaba haciendo lo mismo que todos los días: limpiando, cocinando, cuidando, siendo más por otros que por ella. Lo usual. Abuela siempre ha sido católica, o como ella lo dice, “una mujer de fe”. Iglesia todos los domingos, comunión todas las semanas, rosario al despertar y al acostarse, confesión todos los meses, y así sucesivamente. Mi abuela siempre me ha dicho que nunca ha dudado de la existencia de Dios, porque ella lo siente, le habla y dice que lo escucha. Siempre que le pregunte, su respuesta será la misma.   

El día que mi abuela perdió los cinco dedos de su pie izquierdo, iba cortando el pasto. Mi abuelo le advirtió varias veces que no lo hiciera, pero ella no toma instrucciones de nadie, y “Si nadie me ayuda, lo hago yo”, y así fue. La máquina de cortar el pasto esperaba en el patio que alguien la encendiera, le diera uso. La grama había subido bastante. El barrio estaba tranquilo, las nubes en la misma forma, pájaros volando cada cierto tiempo, y mi abuela en camino a resolver. Encendió la máquina. Comenzó a pasarla. Quisiera saber cuáles eran sus pensamientos aquel día. Probablemente los mismos de siempre, aunque esos tampoco me los sé. Me la imagino sudando, fajándose para que su patio se viera bonito, para que los vecinos no dijeran nada, para sentirse útil. Terminó de cortar el pasto. Colocó la máquina en la misma esquina de siempre. La apagó. O eso creyó.   

Fue justo en ese momento que su pie quedó atrapado en las navajas de la máquina. Cinco dedos se fueron. La ambulancia llegó, se la llevó. Y mi abuela, con cinco dedos menos, con su pie lleno de sangre, con un dolor infernal, empezó a cantar himnos de iglesia. “Hay que internarla en psiquiatría”, decían. “Yo no estoy loca”, contestaba.   

Abuela siguió orando. Creyendo. Cuando abuelo enfermó, cuando mi bisabuela cayó, cuando vino un huracán, cuando le quitaron la vesícula. Iglesia todos los domingos, comunión todas las semanas, rosario al despertar y al acostarse, confesión todos los meses, y así sucesivamente. Mi abuela sigue diciendo que Dios la escucha. Yo a veces pienso que ella podría aconsejarlo.  

Los años que han pasado desde ese instante no sabría contarlos. Ni siquiera yo había nacido. Mi abuela ya tiene 78 años. Mi abuelo murió. Mi bisabuela también. Mi madre y mis tíos se fueron de la casa. En la casa de cuatro cuartos, solo uno queda en uso. Ya no hay más personas. Ahora solo queda mi abuela.   

Mi abuela y la máquina de cortar el pasto.    


Posted on May 30, 2024 .

La "muerte" de Dido

Elena Ramos Díaz
Programa de Estudios Interdisciplinarios
Facultad de Humanidades, UPR RP 

 
Recibido: 15/02/2024; Revisado: 21/05/2024; Aceptado: 28/05/2024


Los susurros rebotan contra las paredes de mi mente como olas golpeando las piedras afiladas de la costa; las mismas olas que actualmente azotan mis temblorosos pies.  ¿A dónde va Aneas? ¿Se ha ido sin nuestra reina? ¿Se lo ha dicho? ¿Dido estará bien? Mis rodillas se desploman en la arena como las paredes de Troya; el mismo lugar del que siempre habló y me enamoró, pero ahora es impuro en mi memoria. Los murmullos cesan de existir, pero nadie se acerca a reposar su mano en mi hombro o para desenterrar la flecha que desangra mi pasión. Mi pobre amor por Eneas. ¿Cómo un hombre tan valiente y dedicado se aleja de mí sin algún despido? Yo he venerado cada paso que anda, cada palabra pronunciada sobre sus travesías, cada vehemente posar de sus labios en mi cuello; ¿él adorará alguna de mis cualidades de la misma manera? La pregunta se contesta por sí misma con la lejanía de sus naves, donde el achicar mi vista ya no es útil para percibir su silueta. El viento reseca mis ojos, evitando el declive de lágrimas que acribillan mi mirada. En el desespero de mi respiro, agarro las diminutas partículas de arena y las froto vigorosamente contra mi pecho. Deseo que cada una impida que el hervido de la locura cruce mi garganta y llegue a mi cabeza. Soy reina. Tengo que mantenerme firme para mi pueblo, pero siento que este hombre me ha despedazado enfrente de todos quienes me desean el mal. 

No me siento segura. Entre tantos ojos que me observan y esperan mi caída del trono, decido huir. Adentrada en la oscuridad de la sombra de los árboles, el ruido de mi vestido contra el viento y el desprendimiento de la realidad misma, corrí. Corrí hasta un lugar que me ha hecho sentir segura desde que ordené su construcción: el templo a Juno. Reina de los dioses, diosa del matrimonio e imagen de la maternidad. Se sitúa en una colina, rodeada de toda la vegetación que respira su poder. Todo lo que he ansiado por tener, a ella le he rezado: mi primer matrimonio con Siqueo, la bendición a mi ciudad Cartago, mi recién matrimonio con Eneas y la posibilidad… la vieja posibilidad de ser madre al fin. 

Remuevo las hojas muertas que reposan en la base de la escultura, lo mínimo que puedo hacer por no traer alguna ofrenda. Empiezo a caminar a su alrededor, tirando una y otra vez las puntas de mi cabello recién peinado por él. La miro, miro sus ojos despigmentados y siento que me desapego de ella. No veo la misma imagen que alguna vez tuvo de modestia y protección. Ahora, sólo puedo ver el egoísmo y el magnífico privilegio que una diosa debe tener naturalmente por simplemente ser diosa. Ella tiene sus propios problemas, pero no iguales a los míos. No ha sufrido lo que sufren las mujeres, de carne y hueso, puesto que lo único que tiene de humana es su “percepción” en las artes. Una imagen perfecta: sin bagaje debajo de sus ojos por aliviar, cicatrices de batalla que recorrer con sus dedos, heridas al corazón que nunca tendrá que derrocar. No puedo, sin importar el miedo que me causa este rechazo, rezarle a una figura que no puede comprender la insanidad que consume mi voz y me atrae a la muerte. En especial cuando encuentro la espada que él me ha regalado posada en la banca de mármol, con vista a Juno y la costa. Un arma que deseo enterrar en mi torso para desvincular a cortadas el corazón que ha caído en tan horrible trampa. Ni el propio Cupido pudo haberme presentado más ingenua al amor.    

Me pongo en cuclillas y alzo mis brazos, el peso de su poder caer sobre mí en la inminente sombra que me protege del arduo sol. En vez de focalizar mi visión en su rostro, mantengo la cabeza fijada al suelo. Un terreno habitual y normal, pero en la vida de una grandiosa hechicera lo fue todo… el ascenso de su poder y la caída de su libertad. Su nombre invoco en mis alabanzas y pedidos:   

Circe… Circe…Circe...    

La oscuridad y las tronadas se hacen dueñas del cielo, creando un ventarrón con un silbo rugiente que mueve todo lo liviano. Accidentalmente varios fragmentos de tierra caen en mis ojos. Al cerrarlos y combatir la incomodidad de volverlos a abrir, soy parte de un nuevo mundo. El aire es liviano, el sol resplandeciente. Dentro de la arboleda coronada con arbustos y frutos, existe una casa humilde hecha de barro y piedra. Me acerco, observando el tallado de vides bordeando el marco. Trazo con mi dedo cada curva hasta que me espanta un respirar frío en la parte trasera de mi cuello, levantando la curiosidad en mi piel.  

—Dido —declara, mostrando su belleza y aura dorada majestuosamente.   

—¡Circe! —exclamó, inclinando en respeto. Me observa fijamente, sus ojos brillantes como el resplandor de una moneda. Su mirada es muy persistente; me enfoco solo en sus sandalias de cuero al no atreverme a mirarla directamente. 

—Odiseo y Eneas…dos estrellas radiantes en la gran constelación que opaca las mujeres como nosotras. Donde nos pintan como sus débiles antítesis, pero en realidad somos sus agujeros negros. Somos enérgicas e inevitables. Con suficiente maldad para opacar sus logros.   

—Con todo respeto, usted tiene poderes, yo… yo no puedo hacer nada para cambiar el daño que me ha dejado ese hombre a mi persona, a mi pueblo, a mi vida.   

—Jugaron con tu vida, toda se reescribió para mantener a Eneas vivo —dice, mirándome directamente —. Te arrebataron tu futuro como una de las grandes reinas de África, todo por un simple hombre, por un simple juego entre dioses. Tu profecía ahora es morir bajo tus propias manos. 

— No…  

—Nadie te respalda, yo sí. Yo sé cómo se siente ser eliminada y, mientras nunca intervengo con asuntos mortales, reconozco tu papel en la profecía mayor de la vida. 

—Aprecio su inquietud, pero creo que va muy rápido, ¿a qué se refiere con intervenir?  

—Cambiaré tu vida por ti. Harás lo que nunca pude hacer — exclama, pasando sus manos divinas por mis mejillas.   

—Espere —pero fue muy tarde para evitar mi próximo parpadeo.   

Me encontraba nuevamente frente a Juno, su pálido cuerpo ahora oscurecido. El sol había vuelto a salir, pero algo resplandeciente se iluminaba cerca de mis manos. Las mismas manos que, al observarlas, sostienen la espada de Eneas y la presionan contra mi estómago. La perforación no me lastima, pero aun así la dejo caer al suelo con un gran ruido. ¿De verdad hablé con Circe? ¿Cómo estuve ahí? ¿Cómo estoy aquí? 

—¡Mi reina! —llora en agonía una de mis sirvientas detrás mío, cerca de la entrada del templo.   

Me giro y lo único que instintivamente hago es gritar su nombre y mi demencia en llantos. Me arrastro por el suelo hasta el volcán de sangre que yace en el estómago del cadáver. Es un cuerpo y un rostro que se quedará tan permanente en mi memoria como la estrella en la noche.   

Mi Eneas… muerto. 


Posted on May 30, 2024 .

Eucaristía

Astrid Lugo 
Departamento de Estudios Interdisciplinarios 
Facultad de Humanidades, UPR RP 

 Recibido: 20/02/2024; Revisado: 11/04/2024; Aceptado: 28/05/2024

La puerta con cristales de colores de la iglesia está cerrada. Hace tanto tiempo que no vengo, me entran nervios. Se abre paso una familia, aprovecho y entro con ellos.  

De frente, dos mesas con manteles blancos. ¿Un registro?  

No, están vendiendo unas cajitas de donación y en la otra mesa reparten las oraciones y canciones del día. No cruzo miradas con el par de señoras de las mesas, me mezclo entre la gente, busco asiento. Escojo las butacas del lado izquierdo, estoy bastante al frente y tengo buena visibilidad del altar, me siento. Son los mismos bancos de siempre, filas de madera sólida pintada de un marrón rojizo y oscuro, atrás tienen un largo trozo de madera acolchonado para arrodillarse. 

La iglesia no está muy llena. Al frente la mayoría son señoras que se sientan guardando distancia, algunas más emperifolladas que otras, mujeres solas, dos con maridos. Mis favoritas se sientan frente a mí; una señora con un vestido negro con cebras que parece que bailan, y en diagonal una señora con una camisa tie-die violeta. Cuando toca “darnos la paz”, me fijo que casi nadie se toca, sino que saludan desde su espacio como Miss Universe. Acto seguido, la señora del tie-die, que a nadie había tocado, se humedece con alcohol las manos.  

Los vitrales de la cúpula alternan entre azul y amarillo. Una señora irrumpe en medio de la plegaria en la eucaristía,   

- ¡Vergüenza, hipóooocritas! 

El padre sigue rezando como si no estuviese pasando nada. Como si la señora fuese un fantasma y su dimensión no nos afectara. 

Sigue gritando, aparece al centro del pasillo entre la gente. Tiene cincuentitantos años, el pelo indomable, corto, violeta, una blusa lila y mahones.  

Cruza acercándose al altar, da pasos firmes, sube, agarra las campanas, las agita. Siento que quiere romper algo, y nadie reacciona. Un niño mira a su madre, ella susurra que cante.  

Repiten lo que hay que repetir, cantan lo que hay que cantar. Como una obra con principio y fin, cualquier interrupción será ignorada. 

¿Me estaré volviendo loca? Yo regresé a la iglesia después de tantos años por mamá, en busca de aquella paz que a su muerte abandonó la casa, buscando sentirla.  

Vuelve la señora a gritar: 

- ¡Ah!, ¿entonces no soy buena, porque no hablo como ustedes?  

Algo dice entre dientes, no lo entendí. De la congregación no se escucha ni un suspiro fuera de sitio.  

El Padre por fin interrumpe lo que parecía un trance: 

- Aquí no está pasando nada. 

Sí pasa, pero ignoramos lo incómodo. 

Detrás de él, la mujer levanta las campanas con el puño, pone su mirada en la cabeza de aquel hombre. La gente saca sus celulares, graban. 

La señora del tie-die se pone de pie, se tapa la boca mientras gime: 

- ¡Dios mío, le va a dar! 

Todos vemos el golpe, nadie hace nada.  


Posted on May 30, 2024 .

La deshumanización de la mujer: “La muñeca menor” de Rosario Ferré

The dehumanization of women:  “La muñeca menorby Rosario Ferré 

Laura S. Panisse Cruz
Departamento de Contabilidad
Facultad de Administración de Empresas, UPR RP 

 

Recibido: 23/01/2024; Revisado: 16/05/2024; Aceptado: 17/05/2024

Resumen 

Esta investigación busca estudiar cómo la literatura feminista puede nutrirse de la alegoría para presentar distintas realidades de la mujer dentro de una sociedad patriarcal. Para este efecto, analiza el cuento “La muñeca menor” de Rosario Ferré y las técnicas narrativas que utiliza la autora para crear una obra feminista compleja que invite al pensamiento crítico con respecto a los roles de género y las expectativas sociales que enmarcan la trama del cuento. Particularmente, se enfoca en analizar los símbolos que aparecen en la obra, así como en sus orígenes y significados en la sociedad patriarcal puertorriqueña.  

Palabras claves: deshumanización, feminismo, patriarcado, simbolismo, literatura 

Abstract 

This research seeks to study how feminist literature can draw on allegory to present different realities of women within a patriarchal society. For this purpose, it analyzes the story “La muñeca menor” by Rosario Ferré and the narrative techniques that the author uses to create a complex feminist work that invites critical thinking regarding gender roles and social expectations that frame the plot of the tale. Mainly, it focuses on analyzing the symbols that appear in the work and their origins and meanings in Puerto Rican patriarchal society. 

Keywords: dehumanization, feminism, patriarchy, symbolism, literature 

La mujer debe escribirse a sí misma: debe escribir sobre mujeres y traer mujeres a la escritura, de la que han sido expulsadas violentamente, como de sus cuerpos. La mujer debe meterse en el texto, como en el mundo y en la historia.  

(Cixous, The laugh of the Medusa, 1981). 

 

Introducción 

La cita de Cixous que abre esta investigación refleja la esencia de “La muñeca menor” y asimismo revisa el simbolismo feminista presente en el cuento. En esta investigación me he propuesto relacionar la literatura feminista, sus metáforas y alegorías, con la realidad de la existencia de la mujer dentro del patriarcado. Evalué el cuento de Rosario Ferré, revelando varias técnicas que utiliza la autora para crear una obra profundamente feminista. He analizado estos símbolos dentro del cuento e investigado sus orígenes y significados dentro de la sociedad patriarcal. Un punto crucial de análisis en este trabajo ha sido la condición de “muñeca” impuesta a la mujer, deshumanizándola y convirtiéndola en parte de un “Otro”.  

“La muñeca menor” es una narración de Rosario Ferré que relata la historia de una mujer puertorriqueña en los años 40, quien tras ser mordida por una chágara, se aísla de la sociedad, dedicándose por completo a la crianza de sus sobrinas. Una chágara, también conocida como guábara, es un pequeño camarón que a menudo se encuentra dentro de cuerpos de agua dulce, como los ríos. El texto cuenta con varios símbolos importantes, como lo son la chágara, las muñecas, los doctores y la muerte. Estos servirán como alegoría para los problemas de las mujeres puertorriqueñas de la época y hoy en día.  

Resaltar e iluminar la opresión de las mujeres a mano del sistema patriarcal es de gran interés personal. Investigar las limitaciones e injusticias causadas por esta condición, e impulsar un cambio en la situación actual, es esencial para evitar consecuencias como las que son resaltadas en el cuento, y empoderar a la mujer. El feminismo es un movimiento prevalente dentro de las nuevas generaciones de hombres y mujeres jóvenes, lo que fomenta una curiosidad innata y mayor receptividad hacia el tema. También es un gran motivador apoyar a las mujeres en la literatura, ya que aquí observamos los efectos del machismo y el patriarcado, dado que muy pocas logran triunfar en la literatura, un campo dominado por hombres. Sánchez (1988) destaca este hecho y la necesidad de la presencia femenina en la literatura:

El salto a la búsqueda del inconsciente femenino en el discurso o escritura de mujeres, si bien surge de un rechazo de la función mimética de la literatura, es también un intento por romper con las prácticas culturales patriarcales que se imponen a todo nivel. (p. 37) 

Para cumplir con el objetivo de exploración de estas ideas, este trabajo se enfocará en cuatro temas: 1) la literatura como herramienta feminista, 2) las muñecas como representación del rol de la mujer, 3) la condena de la mujer, y 4) la mujer puertorriqueña y su cultura de sacrificio.  

Feminismo, patriarcado y literatura 

La literatura es una de las herramientas esenciales dentro del movimiento feminista, el cual se enfoca principalmente en impulsar a las mujeres a convertirse en profesionales, académicas, especialistas, etc. En un país como Puerto Rico, donde la cultura es dominada por los hombres y la masculinidad, la inclusión de autoras en la educación literaria es aún más crucial. Es imperativo presentar lecturas feministas para que las mujeres jóvenes puedan desarrollarse académicamente, y verse a sí mismas como capaces de lograr prestigio literario. Obras como “Yo misma fui mi ruta” (Burgos, 1938), “Sara la obrera (y otros cuentos)” (Roqué de Duprey, 1895), y el foco de este trabajo, “La muñeca menor” (Ferré, 1976), son contribuciones y ejemplos de la literatura feminista puertorriqueña. 

El cuento de Ferré narra la historia de una bella mujer que sufre de una mordedura de chágara. El doctor que le atiende le informa que el animal se ha enterrado en su pierna, donde permanecerá por el resto de su vida. Como resultado, la mujer se dedicará a criar a sus sobrinas, fabricándoles muñecas idénticas a ellas para cada uno de sus cumpleaños. Heflick (2014) propone que las mujeres “become more passive – like objects - under conditions in which others are focused on their physical bodies, and they are less willing to protest for women's rights” (p. 227). En este caso, tras el accidente que ha de robarle de toda su vanidad, la tía se auto objetiva. Esta acepta ser reclusa social a consecuencia de la inacción del doctor, lo cual es testamento a la influencia indirecta del patriarcado y cómo este influye en el comportamiento de las mujeres. La sobrina menor luego se casará con el hijo del doctor que trató a la tía, quien antes le obsequia una última muñeca. El esposo de la sobrina venderá partes de esta muñeca, y convertirá a su esposa en una ama de casa, quien ha de permanecer arreglada y en exhibición, como si se tratara de un adorno. Al final de la historia, la sobrina se convierte en una muñeca infestada por chágaras, simbolizando su propia deshumanización y pérdida de identidad. 

Este cuento es halagado como obra feminista por su uso extenso de símbolos, metáforas y estilo de redacción gótica para llevar su mensaje, convirtiéndolo en un excelente trabajo de literatura. Pokorny (1994) nos presenta con más claridad el mensaje del cuento, y las razones por las cuales esta obra es tan importante para el campo:

“La muñeca menor" is a very successful artistic attempt to dismantle; first, the hegemonic discourse by inquiring into women's writing as a disglossic process; second, to denounce and subvert the mechanisms used by the hegemonic patriarchal system to render women not only invisible but above all, to transform them into the silent Other and their bodies and sexuality into a repository in which to inscribe the historical, cultural, economic, sexual and moral values of both the phallocentric and colonial ideologies and; third, to create a language of the female body. A language that while it transgresses the phallogocentric parameters of the dominant cultural constructions and frees women from their condition of Object, also leads to the liberation of their voices and the evolvement of the Female Subject. (p. 76)

En esta cita, Pokorny expone los diferentes propósitos del cuento “La muñeca menor”. En primer lugar, desmantelar el discurso dominante sobre la literatura femenina, que es considerada “aparte” o “separada” de la literatura popular o aceptada, dominada por los hombres. Segundo, denuncia los sistemas y mecanismos implementados por el patriarcado para excluir a las mujeres y convertirlas en un “Otro”, utilizando el cuerpo y la sexualidad de estas como objeto en el cual inscribir valores culturales e históricos. Tercero, la obra se propone crear un lenguaje del cuerpo femenino que libere a las mujeres de la condición de “Objeto” e impulse la liberación de las voces femeninas. El cuento destaca el maltrato que sufre la mujer en la sociedad contemporánea, subrayando la objetivación y el desamparo que enfrentan las mujeres puertorriqueñas, a quienes se les disminuyen oportunidades y espacios. Asimismo, el cuento que Ferré presenta se convierte en una herramienta poderosa con la cual el movimiento feminista avanza con relación a las mujeres dentro de la literatura. 

Muñeca, chágara y hombre 

El uso de símbolos, metáforas, alegorías y otros recursos en la literatura, permiten el presentar contenido o ideas de una forma indirecta. Como hemos mencionado, los símbolos más significativos dentro del cuento son la muñeca, la chágara y el hombre, los cuales han sido analizados e interpretados extensivamente. 

La muñeca es indudablemente el símbolo más destacado dentro del cuento, representando diferentes aspectos de las condiciones a las cuales las mujeres están sujetas. Rodero (2008) discute algunos de los significados más populares: 

Por un lado, presenta una sátira de la aceptación y perpetuación del papel social impuesto por los hombres a las mujeres a través de la inmovilidad y el silencio de los personajes femeninos; por otro lado, Ferré ofrece un ataque sin compromisos contra los valores masculinos que causan, promueven y refuerzan ese comportamiento pasivo y sumiso. (p. 269)

La muñeca, como símbolo del ideal social impuesto a la mujer, es un elemento importante dentro de la historia. Además de ser un objeto literal en las vidas de los personajes, con un significado emocional (al ser conmemoraciones u obsequios de la tía a las sobrinas), también representa la conformación con estas expectativas sociales. El patriarcado impone estándares de belleza que dictan que las mujeres deben mantenerse jóvenes, perfectas, suaves... Sin embargo, también les impone expectativas sobre sus personalidades: que sean frágiles, silenciosas y sumisas.  

La chágara es otro de los símbolos más importantes dentro del cuento. A lo largo del relato, se utiliza el símbolo de la chágara en dos ocasiones: primero, cuando la tía sufre una picadura de este animal, el cual se convierte en un parásito dentro de su pierna, forzándola a aislarse, a pesar de su juventud y belleza. Segundo, cuando la sobrina menor se convierte en una muñeca infestada por chágaras. En ambas ocasiones, vemos que se utiliza la chágara como alegoría del patriarcado y cómo este afecta a las mujeres en diferentes frentes. En el caso de la tía, representa la opresión de la mujer y cómo se reduce a una función de madre, robándole de su juventud y belleza, pero, sobre todo, la independencia para autorrealizarse. En el caso de la sobrina, se representa la derrota de la mujer frente a la presión de ser perfecta, el abuso del hombre y la insatisfacción con la vida. Pokorny desglosa aún más el significado de la chágara en el caso de la tía: 

Rosario Ferré brings to light, explores and reenacts each one of these issues in the story of a beautiful woman who after being bitten by a chágara or sea prawn, completely devotes herself to taking care of her nieces, her sister's children and to making dolls for them to play with, and, eventually transforms herself into the aunt a being without name or identity; a mere shadow who appears to exists only in service of the Other. (p. 76) 

Pokorny apoya la idea de que la mujer libre y curiosa se transforma en la tía sin nombre, al ser mordida por la chágara, representación del patriarcado. Su única ambición será crear muñecas para otros.  

El hombre es un símbolo abstracto en el cuento, ilustrado en dos personajes: el doctor y su hijo. El doctor es quien atiende a la tía y le dice que la mordida se había tornado incurable. Luego, el hijo del doctor va a la hacienda y revela que la enfermedad de la chágara era curable, pero el doctor había decidido seguir atendiéndola para aprovecharse de la situación y pagar por la educación de su hijo. El aprovecharse de la mujer es una de las características principales del patriarcado, que se beneficia del sacrificio de esta, y el hijo representará otro lado de este mismo rasgo. Cuando el hijo y la sobrina menor se casan, el hijo se convierte duro y frío; maltrata y descuida a la sobrina, tratándola como mero adorno para el balcón. Él destruye la muñeca que la tía había hecho para su sobrina, vendiendo sus ojos resplandecientes para lucrarse. Rodero ofrece una perspectiva social sobre estos eventos y el aprovechamiento del hombre, en específico del hombre trabajador a la mujer aristócrata: “La ascendente burguesía local viola y saquea el mundo en decadencia y pasivo de la aristocracia” (p. 269).  

La condena de la mujer 

La condena de la mujer en el cuento se manifiesta en varias situaciones y circunstancias, mayormente por mano del hombre. Un ejemplo de esta condena es el matrimonio de la sobrina menor, en el que se reduce a un adorno para su nuevo esposo. Bajo el patriarcado, el matrimonio se convierte en una cárcel para las mujeres, quienes son reducidas a meras extensiones de sus esposos, lo que les roba de identidad propia, libertad, y expresión. Además, dentro del cuento se encuentran varias representaciones de una ‘cárcel’ o un lugar que restringe la libertad de la mujer, como lo será el balcón. 

El balcón es un lugar aislado de la casa, aunque está completamente expuesto a los elementos y al público. Dentro del cuento, dos figuras están sujetas a estas circunstancias: la tía y la sobrina. La mayor distinción entre ambas es que la tía elige estar en el balcón, aislándose del mundo la mayor parte del tiempo. 
La sobrina es expulsada al balcón diariamente por su esposo, excluyéndola del hogar y del concepto de familia, forzándola al papel del 'Otro', en el cual las mujeres son tratadas como diferentes e inferiores al hombre. En el balcón, ella es expuesta como un trofeo a los pacientes de su esposo, sirviendo como evidencia de su ascenso social, al asociarse con la extinta aristocracia cañera. El convertirse en 'Otro' y el aislamiento de la casa es paralelo al uso que se le da a las muñecas fabricadas por la tía: decoración de los pianos, sin propósito ni aspiraciones... Rivera (2019) reduce esta manifestación de la condena de la mujer en esta cita:  

...in the case of the niece, even more severely restricted to a “decorative” and marginalized existence within her “cubo de calor,” and engaged in a mutually parasitic relation with her husband—he marrying her for prestige, she forced to act as “decoration”—but arguably also turned into a “vessel” for the uncanny brood through her aunt’s gift. (p. 298) 

Rivera detalla el morboso destino de la sobrina, señalando la relación parasítica entre ella y su esposo; él se casó con ella para elevar su estatus y la condena a una existencia decorativa y sin sentido. Además, analiza la relación entre la muñeca que regala la tía, y en la que se convierte la sobrina al final del cuento. 

La metamorfosis de la sobrina a la muñeca es una de las escenas más significativas del cuento, donde se revela el significado de muchos de los símbolos dentro de este. La transformación también tiene sus propios significados, los cuales Rodero resume: 

Esta transformación de la sobrina en muñeca también tiene un doble significado. Por una parte, representa la aceptación e interiorización del papel social impuesto; pero, por otra parte, esa objetualización impuesta y asumida se convierte en elemento de liberación y venganza que se vuelve en contra del represor. (p. 270) 

En esta cita se señala la interpretación más común de la transformación de sobrina a muñeca como aceptación o derrota frente a los estándares y roles impuestos a las mujeres por el patriarcado, representado un tipo de muerte de la sobrina como ser capaz de hacer sus propias decisiones, sin libertad e inmóvil. Otro posible significado de la transformación es de empoderamiento, utilizando los mismos estándares impuestos por la sociedad como venganza en contra del patriarcado. 

Como hemos visto, la enfermedad de la chágara representa el patriarcado, y se manifiesta primero en el caso de la tía. La tía es la primera víctima, quien se convierte en portadora del parásito que infecta a la sobrina más adelante, condenada a repetir el ciclo en su descendencia. En ambos casos, el significado discutido de la chágara como patriarcado se mantiene cierto. La vida de la tía es paralizada por el parásito, representando una condena para la mujer. También puede interpretarse como la muerte de la antigua aristocracia, como propone Rivera: “a decaying ‘aristocracy’ slowly strangled by the new colonial economy, a sexually marginalized woman whose leg acts as womb for an alien creature, a niece ‘encerrada en su cubo de calor’” (pp. 289-290). La chágara se alimenta de la tía, de la misma manera que el patriarcado se beneficia de las mujeres. Luego, vemos el efecto de la chágara en la sobrina, la cual es completamente consumida por el patriarcado y reducida a un ser inánime. 

La mujer puertorriqueña y la cultura de sacrificio 

La mujer puertorriqueña es criada desde el nacimiento para servir al hombre (Deliz, 1989). La educación de la mujer incluye aprender a cocinar, a cuidar la casa y a los hijos, a ser una buena esposa y a complacer al hombre, del cual no se espera ninguna contribución al hogar o al cuido de la familia. La tía es representante del modelo puertorriqueño de la mujer de casa, la cual nunca sale del hogar y se dedica únicamente a la crianza de los hijos y al mantenimiento del hogar. La mujer está aislada de sus aspiraciones fuera de ser madre o esposa, lo cual es producto de una cultura general de sacrificio combinada con la actitud machista del hombre puertorriqueño. Rivera abunda más sobre la relación del cuento con la cultura puertorriqueña: 

With its Gothic projection of rage and horror over the building blocks of the patriarchal-paternalistic “gran familia puertorriqueña,” the story foregrounded the particular confinements I have mentioned, especially of the female/ “deviant” body, setting it at its center and adding its dark affective charges to the new stance of irreverence. (p. 294) 

Aquí Rivera expone el vínculo entre la cultura popular machista dentro de Puerto Rico, y la idea estereotípica de la “gran familia puertorriqueña” con la narración gótica del texto. Por otra parte, la sobrina representa el otro lado de los estereotipos puertorriqueños de la mujer, el papel de sirvienta impuesto mayormente a hijas mayores o de madre a hijo; servir al hombre se convierte en su único propósito, dedicando su vida a complacerlo, hasta que el abuso y presión del patriarcado las envenena por dentro hacia afuera. 

Conclusión 

“La muñeca menor” es un cuento lleno de símbolos, metáforas y figuras retóricas. Ha sido elogiado por diversos críticos de la literatura feminista puertorriqueña. El feminismo y el patriarcado son los temas principales del cuento, el cual se dedica a señalar las consecuencias del abuso del hombre. El patriarcado está representado por los símbolos del hombre, la chágara y, en parte, la transformación de la sobrina a una muñeca. La autora se basa grandemente en la sociedad puertorriqueña que se aprovecha de las mujeres y que es mayormente machista. La importancia de este trabajo literario para la literatura es ejemplar, ya que demuestra un excelente dominio de las palabras, las figuras literarias y los conceptos abstractos. Además, es importante para impulsar la literatura femenina puertorriqueña. 

Los muchos aspectos subjetivos dentro del cuento resultan en diferentes interpretaciones, todas variadas en su punto de vista de los conceptos dentro del cuento. Las muñecas, la chágara, el relleno de miel y la crueldad del hombre son aspectos abiertos a interpretación que hacen que este trabajo sea solo una de muchas posibles interpretaciones. Analizar este cuento es una tarea que requiere mucha atención al detalle e investigación para comprender completamente la complejidad del mismo. “La muñeca menor” es una obra de arte que inspira a muchas autoras a perseguir sus sueños, y transmite un mensaje feminista significativo a través de su lectura.

Referencias 

Cixous, H., Cohen, K., & Cohen, P. (1976). The Laugh of the Medusa. Signs, 1(4), 875–893.  

Deliz, W. S. (1989). La construccion social de la imagen de la mujer en el  

refranero puertorriqueño. Caribbean Studies, 22(1/2), 67–100.  

Ferré, R. (1976). “La muñeca menor”. Papeles de Pandora. Editorial Mortiz. 

Heflick, N. A., & Goldenberg, J. L. (2014). Seeing eye to body: The literal  objectification of women. Current Directions in Psychological Science, 23(3), 225–229.  

Pokorny, E. D. B. (1994). (Re)writing the body: The legitimization of the female voice, history, culture, and space in Rosario Ferré’s “La muñeca menor”. Confluencia, 10(1), 75–80.  

Rivera, D. L. (2019). Gothic childbearing, monstrous reproduction, and a science fiction turn: Rosario Ferré’s “La muñeca menor” and Pedro Cabiya’s “Relato del piloto”. Catedral Tomada, 7(13), 281-326  

Rodero, J. (2009). Lo fantástico feminista: metamorfosis y trasgresión en Rosario Ferré y Rima De Vallbona. Neophilologus, 93, 263–277 (2009).  

Roqué, A. (1985) Sara la obrera (y otros cuentos). Imp. de Manuel López.   https://issuu.com/coleccionpuertorriquena/docs/sara_la_obrera_y_otros_cuentos__por_ana_roqu__._po 

Sánchez, R. (1988). El discurso femenino en la literatura Chicana. En A. López González, A. Malagamba & E. Urrutia (Eds.), Mujer y literatura mexicana y chicana: culturas en contacto. (1ra ed., pp. 50–59). El Colegio de México.  

 Solá, M. M. (Ed.). (1986). Julia de Burgos: Yo misma fui mi ruta. Ediciones  Huracán. 


Posted on May 30, 2024 .

Análisis multivariado de factores claves en el desempeño académico de escuelas públicas de Puerto Rico

Multivariate analysis of key factors in the academic performance of public schools in Puerto Rico  

Andrea N. Lugo Cruz
Departamento de Contabilidad y Estadística
Facultad de Administración de Empresas, UPR RP 

 

Daniella M. García Chávez
Departamento de Gerencia con concentración en Recursos Humanos
Facultad de Administración de Empresas, UPR RP  

 

Recibido: 13/02/2024; Revisado: 24/05/2024; Aceptado: 26/05/2024 

Resumen 

En los últimos años, el rendimiento académico de los estudiantes de Puerto Rico ha descendido al punto que no alcanzan el nivel académico esperado. Se recopiló información de 1,101 escuelas públicas para analizar factores relacionados con el rendimiento académico mediante análisis multivariado, descriptivo, de correlación, factorial exploratorio y discriminante. Los resultados académicos muestran una relación positiva entre los resultados prebásicos de las materias estudiadas con el nivel de pobreza escolar, una relación negativa entre la pobreza escolar y la matrícula total de la escuela, y que no existe una relación significativa entre el nivel de pobreza escolar y municipal.  

Palabras claves: rendimiento académico, pobreza, estudiantes, escuelas públicas 

Abstract 

In recent years, the academic performance of students in Puerto Rico has declined to the extent that they do not reach the expected academic level. Information was collected from 1,101 public schools to analyze factors related to academic performance through statistical analyses for multivariate populations, descriptive, correlation, exploratory factorial, and discriminant. Academic results show a positive relationship between pre-basic results of the subjects studied and the level of school poverty, a negative relationship between school poverty and the total enrollment of the school, and there is no significant relationship between the level of school poverty and municipality.   

Keywords: academic performance, poverty, students, public schools

Introducción  

El desempeño académico de los estudiantes de escuelas públicas de Puerto Rico ha declinado significativamente (Helvia, 2021). El Departamento de Educación de Puerto Rico constituye el sexto distrito escolar más grande de la nación estadounidense con 3 mil millones de dólares en fondos federales (U.S. Department of Education, 2023). Sin embargo, el rendimiento académico de los estudiantes de Puerto Rico ocupa el último lugar en comparación con otros estados. Adicionalmente, solo el 1% de los estudiantes evaluados tuvieron resultados proficientes en las matemáticas, según encontró el National Assessment of Educational Progress (2019). Entre 2017 y 2022, se observó una disminución de 10 puntos porcentuales en el rendimiento de los niños en español, matemáticas, inglés y ciencias, según las pruebas META-PR. En el año 2021, un aproximado de 13,000 estudiantes no lograron aprobar ninguna de sus materias (Cardoza y Cardoza, 2023). Lo antes mencionado es evidencia de un sistema disfuncional que está fallando en brindarle una educación de calidad a los estudiantes de Puerto Rico.   

Según Rodríguez et al. (2020), la educación pública en Puerto Rico no logra preparar a los estudiantes para alcanzar su nivel académico esperado y los planes presentados al Departamento de Educación de los Estados Unidos carecen de realismo, no incorporando cambios significativos en las prácticas docentes y las oportunidades de aprendizaje. Por estas razones, cada vez son más los padres que optan por retirar a sus hijos de las escuelas públicas o incluso, trasladarse fuera de Puerto Rico. Estas migraciones han causado un descenso en la población escolar de 32% entre el 2010 y el 2019 (Ayala, 2020a.). La reducción de la población de niños y jóvenes en Puerto Rico tiene graves consecuencias sociales y económicas en los mercados e instituciones dirigidas a esta población. Según Ayala (2020b.), a medida que la población estudiantil se reduzca, se harán evidentes los impactos de la disminución en las instituciones de educación superior, específicamente en la Universidad de Puerto Rico.   

A medida que aumenta la desconfianza en el sistema educativo público, la dependencia de las escuelas privadas crece, y muchos padres buscan asegurar una educación adecuada y eficaz para sus hijos. Un estudio realizado por Colorado y Corcino Laguna (2014) encontró que las puntuaciones promedio de las escuelas privadas fueron mayores que las puntuaciones promedio de las escuelas públicas. Aspectos como la calidad de los recursos educativos, la proporción de estudiantes por maestro, las instalaciones, los enfoques pedagógicos y las oportunidades extracurriculares son algunas de las razones que pueden influir significativamente en la decisión de los padres de optar por una educación privada en lugar de la pública (Pelatti, 2023). El nivel de pobreza de los estudiantes es el predictor más significativo del rendimiento académico (Segarra, 2020). Sin embargo, no todos los padres cuentan con los recursos para trasladar fácilmente a sus hijos a una institución privada. Esta limitación financiera puede crear disparidades en el acceso a una educación considerada de mayor calidad, ya que la opción de escuelas privadas a menudo implica costos significativos, pues “el costo promedio del pago mensual en los colegios privados fluctuó entre $313 y $408” (Pelatti, 2023).   

Los padres de bajos recursos, al no tener acceso a la educación privada, se ven obligados a mantener a sus hijos en instituciones de bajo rendimiento, no por elección, sino por falta de alternativas. Un estudio en Puerto Rico subraya cómo el sistema de educación pública del país perpetúa las desigualdades sociales (Claridad, 2020). Problemas similares se observan en otros países de Latinoamérica, como lo evidencia Chong (2017). Esto plantea una pregunta crucial sobre quiénes son los más afectados por estas circunstancias y si realmente estamos trabajando para eliminar las disparidades entre las clases sociales.  

Esta interrogante es importante y no podemos ignorarla. Los estudiantes son el futuro de nuestro país y determinarán el destino de nuestra próxima generación. La educación es un tema que nos afecta y nos concierne a todos; por lo tanto, es esencial comprender y analizar los diversos factores que influyen en su rendimiento académico. El propósito de este estudio es examinar los factores personales, socioculturales, geográficos, económicos e institucionales asociados al rendimiento académico de los estudiantes. El objetivo es comprender las variables que afectan su desempeño académico para encontrar soluciones que mejoren los procesos educativos. Esto implica considerar los problemas y necesidades que enfrentan los estudiantes y, a partir de ese entendimiento, implementar acciones de apoyo para mejorar su rendimiento académico. 

Problema de investigación 

A lo largo de esta investigación, nos proponemos abordar la siguiente pregunta: ¿Cuáles son los factores clave que inciden en el rendimiento académico de los estudiantes en las escuelas públicas de Puerto Rico?   

Aspiramos a que los hallazgos de este estudio sirvan como herramienta para desarrollar un plan o solución que facilite el acceso a la educación para todos los niños, contribuyendo así a lograr un Puerto Rico más justo y equitativo. 

Metodología 

La investigación tiene como objetivo identificar los factores claves que influyen en el desarrollo y rendimiento de los estudiantes en las escuelas públicas de Puerto Rico, explorando sus interrelaciones mediante un enfoque descriptivo y análisis multivariado para revelar conexiones ocultas entre las variables. Se generó una base de datos con información del Departamento de Educación de Puerto Rico (2018) sobre el desempeño en las pruebas META-PR de estudiantes de escuelas públicas durante 2018. Los datos incluyen los porcentajes de resultados avanzados, proficientes, básicos y prebásicos, junto con detalles adicionales como la matrícula total, el nombre y ubicación de la escuela, y el porcentaje de estudiantes bajo el nivel de pobreza.  

Para aumentar la precisión de los datos, se utilizó información poblacional de menores por municipio de 2020 de la Oficina del Censo de EE. UU. (2023), y datos de la Administración de Desarrollo Socioeconómico de la Familia (2018) y del Instituto de Estadísticas de Puerto Rico (2016) sobre beneficiarios de ayudas económicas PAN y TANF. Se incluyó el nivel de pobreza municipal del informe de la Junta de Planificación de Puerto Rico (2019) para comparar el desempeño de las escuelas con la pobreza municipal y explorar relaciones entre la ubicación de la escuela y su nivel de pobreza. Además, se utilizó la proporción de incidentes de violencia doméstica contra menores por municipio de 2018, del Instituto de Estadísticas de Puerto Rico, debido a su relevancia en el desarrollo infantil (Chamorro et al., 2023). La descripción detallada de cada variable se presenta a continuación en la Tabla 1.

Tabla 1: Descripción de variables 

Fuente: Elaborado por las autoras, 2024 

La selección de variables se realizó considerando varios factores. La variable x1 proporciona información esencial sobre el tamaño de la escuela, crucial para entender la disponibilidad de recursos y su influencia en el rendimiento académico. Las variables x2 a x7 evalúan la eficacia académica en español, inglés y matemáticas, donde altas puntuaciones señalan un aprendizaje efectivo y las bajas resaltan áreas problemáticas, cruciales para determinar dónde se necesita más apoyo. Las variables socioeconómicas x8 y x9 examinan cómo la pobreza impacta el desempeño académico, ya que condiciones económicas desfavorables pueden obstaculizar la educación de los estudiantes. Además, las variables x10 y x11, que se relacionan con las ayudas económicas que reciben los niños, y x12, que evalúa el impacto de la violencia doméstica, ofrecen un análisis detallado de los factores socioeconómicos que influyen en el desempeño escolar. La selección de estas variables proporciona una visión completa de las dinámicas que afectan el rendimiento académico en las escuelas públicas de Puerto Rico.  

Se realizó un análisis descriptivo en R Studio para comprender la estructura de las variables numéricas, calculando medias y desviaciones estándar, y elaborando boxplots para examinar el comportamiento de las variables. Además, se creó una matriz de correlación para explorar asociaciones entre variables. Luego, se aplicó pruebas de normalidad, incluyendo Lilliefors para análisis univariado y Mardia para el multivariado, para verificar los supuestos de normalidad. Si las variables no cumplen estos supuestos, se realizaron transformaciones utilizando la función bestNormalize de R Studio para aplicar la mejor transformación recomendada. Después de las transformaciones, se evaluó la posibilidad de aplicar el Análisis de Componentes Principales y el Análisis Factorial Exploratorio (EFA). Primero, se verificó que la matriz de datos sea factorizable mediante la prueba de esfericidad de Bartlett y la prueba de Kaiser-Meyer-Olkin (KMO). Bartlett debe rechazar la hipótesis nula con un p-value menor a 0.05, y KMO debe ser superior a 0.70 para proceder con el EFA. Para determinar el número de factores que se trabajó, se empleó el método de scree plot y el método paralelo. Finalmente, se creó un gráfico de árbol para visualizar la distribución de variables en los factores.   

Se aplicó el Análisis Discriminante con el propósito de reducir la dimensionalidad de las variables y separar la información en grupos claramente definidos. Esta sección de la investigación estuvo enfocada en la variable categórica “Zona”, donde se separaron las escuelas por su ubicación en una zona urbana o rural. Se aproximó la estimación de la probabilidad a priori donde se podrá ver el porcentaje de escuelas que forman parte de cada zona. Luego se debió encontrar si las matrices de covarianzas para las dos poblaciones se podían suponer iguales o diferentes. Esto se hizo a través de la función boxM en R Studio de la paquetería biotools. La función boxM rechazará la hipótesis nula de matrices de covarianza iguales con un p-value menor a 0.05. De ser aceptada la hipótesis nula, se aplicó la función discriminante lineal de lo contrario, se aplicó el Análisis Discriminante Cuadrático. Luego de esto, se estimó el error de predicción donde se podrá observar la comparación entre la clase predicha y la clase real. Con este resultado se buscó la tasa de error de las predicciones. 

Resultados  

La recopilación de información permitió obtener datos de 1,101 de las 1,145 escuelas públicas presentadas con un total de 13 variables. El análisis descriptivo de los datos encontró un nivel de pobreza escolar de 80.44%, con una desviación estándar de 10.24 puntos porcentuales, mientras que el nivel municipal en promedio es de 59.49% y una desviación estándar de 10.06 puntos porcentuales, una diferencia de 20.95%. En cuanto a las ayudas económicas, el promedio de beneficiarios del PAN por pueblo es significativamente mayor a los beneficiados con el TANF. Adicionalmente, podemos ver que el porcentaje de violencia doméstica contra niños por pueblo es de 1.07% en promedio.   

La Figura 1 presenta una matriz de correlación visualizada como un mapa de calor, que muestra la relación entre las variables. Los colores indican la fuerza y dirección de la correlación: rojo para correlaciones positivas fuertes, azul para correlaciones negativas fuertes, y tonos neutros para correlaciones bajas o nulas. 

Figura 1: Diagrama de correlación de las variables 

Fuente: Elaborado por las autoras, 2024 

El análisis revela que las escuelas con bajos resultados en las pruebas META-PR de español, matemáticas e inglés tienden a mostrar un rendimiento similarmente bajo en otras materias, indicando una correlación positiva entre los resultados prebásicos en estas pruebas. Similarmente, se observa que un buen desempeño en una materia generalmente se refleja en las otras. Además, existe una correlación entre el nivel de pobreza municipal y el porcentaje de niños que se benefician de la ayuda del PAN, y una correlación negativa leve entre la matrícula total de la escuela y el nivel de pobreza escolar, sugiriendo que escuelas con más estudiantes tienden a tener niveles más bajos de pobreza. No se observa una correlación significativa entre el nivel de pobreza escolar y municipal.  

Cuando se examina la conexión entre el nivel de pobreza escolar y los resultados en las materias, se observa una leve correlación positiva en los resultados prebásicos de inglés y español. Sin embargo, los resultados avanzados y proficientes muestran una leve correlación negativa. Esto sugiere que hay una relación entre el nivel de pobreza escolar y los resultados en inglés y español, con un aumento leve en el nivel de pobreza cuando aumenta el porcentaje de estudiantes con calificaciones prebásicas. Es importante destacar que esta relación no es muy clara ni abrumadora. En el caso de las matemáticas, la relación es prácticamente inexistente.  

Luego de llevar a cabo las pruebas analíticas, se encontró que las variables numéricas no cumplían con la normalidad, incluso después de aplicar transformaciones sugeridas por la función bestNormalize. Se procedió con el Análisis Factorial Exploratorio. La prueba de esfericidad de Bartlett confirmó correlaciones entre variables, rechazando la hipótesis nula con un p-value menor a 0.05, y la prueba Kaiser dio un resultado de 0.76. La determinación de factores usando el método scree plot y el método paralelo sugirió trabajar con tres factores. El gráfico de árbol, visualizado en la Figura 2, proporciona una visualización de la distribución de las variables en diferentes grupos. Las variables se agruparon de la siguiente manera: "Resultados" incluye x2, x7, x6, x5, x4 y x3, relacionados con desempeños académicos; "Indicadores económicos por pueblo" abarca x9, x10 y x11, que reflejan datos económicos municipales; y "Información de la escuela" consiste en x1 y x8, que contienen datos sobre matrícula y pobreza escolar.  

Figura 2: Diagrama de árbol de las variables 

Fuente: Elaborado por las autoras, 2024 

Se aplicó el análisis discriminante para reducir la dimensionalidad de las variables utilizando la variable categórica ‘Zona’ como el factor. La estimación de la probabilidad a priori reveló que 52.50% de las escuelas están en una zona urbana, el restante 47.50% de las escuelas están en zona rural. La función BoxM resultó en un p-value menor a 0.05 por lo que se rechaza la hipótesis nula de que las matrices de covarianza son iguales. Se aplicó el Análisis Discriminante Cuadrático y a base de esto se calculó el error de predicción. La clase predicha estima que 207 de las escuelas en zona urbana estarían en zona rural y que 107 de las escuelas en zona rural estarían en zona urbana. La tasa de error obtenida fue del 28.5%, lo cual indica un nivel de error considerablemente alto. En consecuencia, el modelo no logra realizar predicciones precisas respecto a la zona escolar.

Conclusión 

La implementación de análisis multivariados para examinar los factores críticos en el rendimiento escolar ha revelado disparidades significativas en el sistema educativo de Puerto Rico. Los resultados de este estudio facilitarán el desarrollo de herramientas que promuevan el acceso a una educación de calidad para todos los niños y fomenten la confianza en la educación pública. Los hallazgos están en línea con investigaciones similares realizadas por terceros. Dada la importancia de estos resultados, es crucial actualizar y evaluar continuamente los datos utilizados. Una limitación de este estudio fue la dependencia de datos del 2018, la información más reciente disponible, subrayando la necesidad de monitorear constantemente el sistema educativo para adaptarse a nuevas realidades y mejorar sus resultados. 

Referencias 

Administración de Desarrollo Socioeconómico de la Familia. (2018). Compendio de estadísticas ADSEF [Dataset]. Instituto de Estadística de Puerto Rico.  https://estadisticas.pr/en/inventario-de- estadisticas/compendio-de-estadisticas-adsef 

Ayala, C. J. (2020a). Puerto Rico: descenso de la población escolar. UCLA. https://www.sscnet.ucla.edu/soc/faculty/ayala/prdiaspora/pobescolar.htm#:~:text=Seg%C3%BAn%20el%20Instituto%20de%20Estad%C3%ADstica,y%2018%25%20en%20el%202019

Ayala, C. J. (2020b). Puerto Rico: ¿Un país sin niños y jóvenes? 80grados+. https://www.80grados.net/puerto-rico-un-pais-sin-ninos-y-jovenes/ 

Cardoza, K. (2023). ¿Son las dificultades de las escuelas en Puerto Rico un avance de lo que enfrentarán otros distritos? The Hechinger Report. https://hechingerreport.org/son-las-dificultades-de-las-escuelas-en-puerto-rico-un-avance-de-lo-que-enfrentaran-otros-distritos/

Chamorro, L., Lizardi, A. C., Jiménez, A. L., & González, J. M. (2023). Relación entre la violencia familiar, el apoyo percibido y funcionamiento familiar en comunidades con altos niveles de violencia. Revista Caribeña de Psicología, 7, 1–12. https://doi.org/10.37226/rcp.v7i1.7117 

Chong, E. G. (2017). Factores que inciden en el rendimiento académico de los estudiantes de la Universidad Politécnica del Valle de Toluca. Revista Latinoamericana de Estudios Educativos, 47(1), 91–108. https://doi.org/10.48102/rlee.2017.47.1.159 

Claridad. (2020, septiembre 8). Investigación en Puerto Rico resalta que el sistema de educación pública del país promueve las desigualdades sociales.  https://claridadpuertorico.com/investigacion-en-puerto-rico-resalta-que-el-sistema-de-educacion-publica-del-pais-promueve-las-desigualdades-sociales/ 

Colorado, R. J., & Corcino, L. (2014). Diferencias en el desempeño académico y en los predictores de éxito universitario por escuela de procedencia. Pedagogía, 47(1), 159–191.  

Departamento de Educación de Puerto Rico. (2018). Directorio comprensivo de escuelas públicas, Puerto Rico 2018 [Dataset]. Instituto de Estadística de Puerto Rico. https://datos.estadisticas.pr/dataset/directorio-comprensivo-de-escuelas-publicas-puerto-rico-2018 

Instituto de Estadísticas de Puerto Rico. (2016). Aumenta en 73 municipios la participación de hogares en el PAN. Instituto de Estadísticas de Puerto Rico. https://censo.estadisticas.pr/sites/default/files/Comunicados/comunicado_20161208.pdf 

Instituto de Estadísticas de Puerto Rico. (2018). Perfil del maltrato de menores en Puerto Rico: Informe interactivo [Dataset]. Administración de Familias y Niños del Departamento de la Familia en Puerto Rico. https://estadisticas.pr/en/Perfil-Maltrato-Menores 

National Assessment of Educational Progress. (2019). State performance compared to the nation: Data table [Dataset]. The Nation’s Report Card. https://www.nationsreportcard.gov/profiles/stateprofile?chort=1&sub=MAT&sj=&sfj=NP&st=MN&year=2019R3 

Pelatti, L. G. (2023). La matrícula de los colegios privados creció por primera vez en 9 años. Sin Comillas. https://sincomillas.com/la-matricula-de-los-colegios-privados-crecio-por-primera-vez-en-9-anos/  

Press Office. (2023). U.S Department of Education supports government of Puerto Rico’s move to decentralize the Puerto Rican Department of Education. U.S. Department of Education. https://www.ed.gov/news/press-releases/us-department-education-supports-government-puerto-ricos-move-decentralize-puerto-rico-department-education\ 

Programa de Planificación Económica y Social. (2019). Resumen económico de Puerto Rico. Junta de Planificación de Puerto Rico. https://jp.pr.gov/wp-content/uploads/2021/09/2019.02-Resumen-Economico-Febrero-2019-Volumen-III-Numero-2.pdf  

Quintero, A. H. (2023). Breve historia de la educación pública preuniversitaria y universitaria en Puerto Rico. EnciclopediaPR. https://enciclopediapr.org/content/historia- educacion-en-puerto-rico/ 

Rodríguez, I., Lang, A., & Lang, A. (2020). Puerto Rican students are getting a lapse year. That’s not a good thing. The Americano News.  

Segarra, E. (2020). Factores que inciden en el desempeño académico de las escuelas públicas de Puerto Rico. Revista de Administración Pública, 51(1), 77–112. https://revistas.upr.edu/index.php/ap/article/view/21130 

U.S. Census Bureau. (2023). Annual county and Puerto Rico municipio resident population estimates by selected age groups and sex: April 1, 2020 to July 1, 2022 [Dataset].


 

Posted on May 30, 2024 .

Reviviendo Río Piedras: incentivos empresariales para el crecimiento económico

Reviving Río Piedras: Business incentives for economic growth 

Alejandro A. González Rosas
Departamento de Economía & Finanzas
Facultad de Administración de Empresas, UPR RP  

 

Gabriela M. Rodríguez Lladó
Departamento de Economía
Facultad de Administración de Empresas, UPR RP

  

Laura E. Suárez Durán
Departamento de Economía
Facultad de Administración de Empresas, UPR RP

Recibido: 20/09/2023; Revisado: 09/04/2024; Aceptado: 15/05/2024 

Resumen 

Este estudio investigativo se centra en el análisis de los factores económicos y sociales que han obstaculizado el desarrollo de Río Piedras y la efectiva implementación de la ley especial para su rehabilitación. Empleando herramientas investigativas como entrevistas y análisis literario, se identifican el sesgo de retrospectiva y la insuficiencia de los incentivos proporcionados por la legislación, que dificultan la aplicación eficaz de leyes y programas. Basándonos en los hallazgos, se propone la participación de organizaciones comunitarias para colaborar en la mitigación de los efectos del sesgo. Además, se recomienda una enmienda a la ley, para estimular la inversión de empresarios locales. Estas medidas se presentan como pasos críticos hacia el avance económico y social de Río Piedras. 

Palabras claves: incentivos, desarrollo económico, sesgo de retrospectiva, empresarios, Río Piedras 

Abstract 

This investigative study focuses on analyzing the economic and social factors that have hindered the development of Río Piedras and the effective implementation of its rehabilitation law. Using research tools such as interviews and literary analysis, hindsight bias and the inadequate incentives provided by the legislation are identified as elements that cripple the effective application of laws and programs. Based on the findings, the participation of community organizations is proposed to collaborate in mitigating the effects of bias. Additionally, an amendment to the laws is recommended to stimulate investment by local entrepreneurs. These measures are presented as critical steps towards the economic and social advancement of Río Piedras. 

Keywords: incentives, economic development, hindsight bias, entrepreneurship, Río Piedras 

Introducción  

Con tan solo tomar un paseo por las calles del casco urbano de Río Piedras, podemos notar una urgencia inevitable para la rehabilitación y desarrollo de la comunidad. Siendo una de las cunas principales para el desarrollo de la transportación, educación y comercio del país, la importancia de mantener viva esta comunidad es indispensable. La caída en productividad, infraestructura y presencia económica a través de los años en Río Piedras ha aumentado el desinterés y temor de empresarios dispuestos a invertir y mantenerse operando. Por esta razón, se crea la Ley Núm. 75 del 1995, Ley Especial para la Rehabilitación de Río Piedras. Los esfuerzos presentados a través de esta ley están centrados en promover el desarrollo económico a través de incentivos empresariales. Sin embargo, la misma no ha sido efectiva. El problema en Río Piedras es imposible de encapsular en un solo motor, sino que es una combinación de muchas variables, las cuales afectan su situación actual. No obstante, a través de nuestra investigación hemos logrado identificar aquellas razones que encontramos ser principales.  

Este análisis estará centrado en aquellos sesgos que empoderan el pensamiento y comportamiento de dichos empresarios, específicamente el sesgo de retrospectiva (hindsight bias), la ineficiencia en la promoción de incentivos y la necesidad de crear incentivos más abarcadores. El sesgo de retrospectiva, también conocido como el fenómeno de "lo sabía todo el tiempo", es cuando se cree que un evento es más predecible después de que se conoce que antes de que se conozca. El sesgo de retrospectiva está muy presente en el pensamiento de los empresarios de Río Piedras. Debido a pasadas experiencias con propuestas de incentivos y falta de apoyo, los empresarios han tomado una posición de rechazo al perder confianza en el Gobierno de Puerto Rico. Al tener muy presente el sesgo de retrospectiva, los empresarios se encuentran desconfiados y seguros que cualquier ayuda ofrecida por el Gobierno será inefectiva o insuficiente. 

Revisión de literatura 

Esta investigación tiene como propósito identificar cómo el sesgo de retrospectiva está presente en el proceso de toma de decisiones de los empresarios de Río Piedras en torno a incentivos ofrecidos por el Gobierno de Puerto Rico para su desarrollo económico.  

En “Hindsight bias and trust in government: Evidence from the United States” (2022), Herz et al. plantean la hipótesis de que el sesgo retrospectivo (hindsight bias) afecta la confianza en el gobierno. Utilizaron en su investigación datos de dos experimentos que se realizaron en línea con participantes reclutados de Amazon Mechanical Turk. En el primer experimento, 646 participantes completaron una encuesta que evaluó su confianza en el gobierno y su percepción del sesgo retrospectivo. En el segundo experimento, se asignó aleatoriamente a 297 participantes para leer uno de dos artículos de noticias sobre una decisión tomada por el gobierno, ya sea antes o después de conocer el resultado de la decisión. Los investigadores recopilaron datos sobre la confianza de los participantes en el gobierno, su percepción del sesgo retrospectivo y su ideología política. Por otro lado, Bi et al. (2021) se concentraron en el hecho de que los emprendedores exhiben comportamientos de confianza diferentes a los de los no-emprendedores, mediante un experimento que realizaron con 69 participantes, incluidos 36 emprendedores y 33 no emprendedores. El experimento se llevó a cabo en un entorno de laboratorio y los participantes jugaron un juego de inversión en el que tenían que decidir si invertir en un socio en función de su confianza en la honestidad del socio. Los investigadores recopilaron datos sobre los comportamientos de confianza de los participantes, incluida la cantidad de dinero invertido y el momento de sus decisiones de inversión. También recopilaron información demográfica sobre los participantes, como su edad y sexo.  

De igual manera, Herz et al. (2022) encontraron que los participantes a quienes se les pidió que evaluaran una respuesta del gobierno a una crisis hipotética mostraron un sesgo retrospectivo, percibiendo la respuesta como menos efectiva que antes de que ocurriera la crisis. Este sesgo redujo su confianza en el gobierno, pero solo para los participantes que se identificaron como políticamente conservadores. Mientras, Roese y Vohs (2012) encontraron que el sesgo retrospectivo es un sesgo cognitivo generalizado que afecta nuestra memoria y juicio. El trabajo discute cómo el sesgo retrospectivo surge de un sistema de memoria que enfatiza la importancia del conocimiento existente y minimiza el papel de la nueva información. También sugiere que el sesgo retrospectivo puede tener efectos positivos en la toma de decisiones, como promover el aprendizaje de experiencias pasadas.  

El artículo “The failures of economic development incentives” (Peters & Fisher, 2004) presenta cómo los incentivos para el desarrollo económico suelen ser ineficaces para promover el crecimiento económico y sugiere que los enfoques alternativos (invertir en educación, infraestructura y calidad de vida), en lugar de depender de incentivos financieros, pueden ser más efectivos. Mientras, “Solving the problems of economic development incentives” (Bartik, 2005) establece como hipótesis que los problemas con los incentivos de desarrollo económico pueden resolverse mediante el diseño de incentivos que estén alineados con estrategias de desarrollo económico más amplias y que aborden las causas profundas de los desafíos económicos. Trabajando paralelamente, ambos artículos descubrieron que los incentivos de desarrollo económico, incluidas las exenciones fiscales y los subsidios, no conducen necesariamente al crecimiento económico a largo plazo, e incluso pueden resultar en una pérdida neta de ingresos para el gobierno. Se argumenta que los incentivos deben estar dirigidos a industrias y empresas específicas, basarse en resultados medibles y diseñarse para maximizar los beneficios netos para la sociedad (Bartik, 2005; Peters & Fisher, 2004). 

Finalmente, Bi et al. (2021) presentaron resultados muy interesantes. Descubrieron que los empresarios son más rápidos en confiar que los no-empresarios. Además, encontraron que el comportamiento de confianza de los empresarios está más influenciado por el pensamiento rápido e intuitivo y, por ende, también se les hace más fácil recuperar confianza luego de esta ser violada. 

A partir de lo presentado en los cinco artículos antes expuestos, puede estar claro una cosa: el sesgo de retrospectiva está muy presente en el pensamiento de los empresarios de Río Piedras. Al perder confianza en el Gobierno de Puerto Rico, debido a pasadas experiencias con propuestas de incentivos y de más, los empresarios han tomado una posición de independencia y rechazo. Al tener muy presente el sesgo de retrospectiva y el “sabiendo que iba a pasar”, los empresarios se encuentran con desconfianza y seguros que cualquier ayuda ofrecida por el Gobierno será inefectiva o insuficiente. Por ende, ninguna propuesta de incentivos será efectiva hasta que no se trabaje el problema principal: reestablecer confianza en la comunidad de Río Piedras. Como presentan Bi et al. (2021), los emprendedores son los participantes de la comunidad que más fácil confían, más fácil desconfían y también más fácil vuelven a confiar. Con esto, se puede establecer un plan de acción. Se debe concentrar en crear incentivos que sean directamente beneficiosos a la comunidad con relación a su infraestructura, educación y calidad de vida para así fomentar confianza en la comunidad de Río Piedras. Al concentrarnos en la comunidad y sus necesidades, podemos entonces establecer un crecimiento y desarrollo económico más estable y efectivo. 

El desarrollo económico se refiere a un proceso multifacético destinado a mejorar el bienestar económico y la calidad de vida dentro de una región o área en particular. Abarca varios aspectos, incluyendo la creación de oportunidades de empleo, la mejora de la infraestructura, la promoción de los avances tecnológicos y la mejora de los marcos sociales e institucionales (Carroll & Blair, 2008). Si bien el crecimiento y el desarrollo económico están relacionados, difieren en su enfoque y los resultados deseados. El crecimiento económico se refiere principalmente a un aumento en la producción de bienes y servicios dentro de una economía, a menudo medido por cambios en el producto interno bruto (PIB). Por otro lado, el desarrollo económico va más allá del mero crecimiento del PIB y tiene en cuenta indicadores más amplios y abarcadores. Hace hincapié en el crecimiento sostenible e inclusivo, con el objetivo de crear un entorno en el que todas las personas tengan la oportunidad de participar y beneficiarse de las actividades económicas, hecho que es de máxima importancia en una comunidad tan diversa como Río Piedras. El desarrollo económico se centra en las mejoras a largo plazo en los niveles de vida, la equidad social y la calidad de vida en general, en lugar de medir únicamente la expansión de la economía. Es por esto que lo evidentemente necesario en Río Piedras es el desarrollo económico extenso. Sin embargo, para que se pueda lograr y mantener un crecimiento económico estable y saludable, se debe tomar en consideración las particularidades de la misma, sus necesidades y su contexto histórico, entre otros factores (Carroll & Blair, 2008). 

Lograr el desarrollo económico es uno de los principales objetivos de los gobiernos contemporáneos, quienes tienden a fomentar la idea de impulsar el crecimiento económico mediante la otorgación de incentivos. Definidos como los “beneficios directos que son proveídos a firmas para incentivar su apertura, expansión y retención” (Parilla & Liu, 2018), tienen el objetivo de “alentar a empresas a ubicarse o expandir y conservar trabajos en una economía estatal o local” (Bartik, 2018).  En el caso de Río Piedras, y de gran parte de Puerto Rico, los incentivos implementados consisten en algún tipo de exención porcentual del pago de contribuciones sobre algún tipo de ingreso o gasto. Por lo general, estos son otorgados a compañías que prometen una gran inversión en mercados locales y grandes cantidades de empleo. 

Slattery y Zidar (2020) evidencian el uso frecuente de tres tipos de incentivos económicos en la política pública. En primera instancia tenemos los firm-specific incentives o incentivos para empresas individuales, creados específicamente para una empresa. La flexibilidad que provee estos incentivos permite a gobiernos estatales y locales llegar a acuerdos con empresas sobre niveles de inversión y número de empleos creados, y su objetivo principal es atraer y retener empresas con grandes multiplicadores económicos (Slattery & Zidar, 2020). Por multiplicadores económicos, los autores se refieren a los posibles beneficios que la llegada de esta empresa puede tener en la localidad. Moretti (2010) muestra que los beneficios obtenidos directamente por los empleados tienen el potencial para esparcirse a la localidad en general, ya que la nueva firma puede incrementar la demanda de trabajadores y como consecuencia aumentar los salarios locales. En su mayoría, estos incentivos son otorgados a grandes empresas de manufactura y de tecnología, y a empresas en industrias que requieren altos niveles de educación y destreza. Debido sus grandes multiplicadores, industrias de esta índole suelen ser entre las más incentivadas, y en particular el área de tecnología es resaltado como la industria más fructífera. Los elevados multiplicadores son consecuencia de los efectos de demanda en los suplidores locales, debido en gran medida a los elevados salarios de estas industrias y a sus grandes líneas de suplidores locales. Cabe resaltar que la decisión sobre la otorgación de estos programas cae en las manos del gobierno y presume que estos saben identificar las firmas con mayores beneficios posibles para la localidad.   

En segundo lugar, tenemos incentivos dirigidos hacia ciertas áreas. Contrario a los incentivos de firmas individuales, estos programas permiten reducciones contributivas en todas las empresas localizadas en un área predeterminada (Slattery & Zidar, 2020). Giroud y Rauh (2019) encuentran que este tipo de incentivo promueve la entrada de nuevas firmas y la expansión de firmas existentes. Slattery & Zidar (2020) encontraron que el estudio Suárez Serrato y Zidar (2016) evidencia que este tipo de incentivos pueden incrementar la demanda para los mercados laborales y otras entidades locales.  

Por último, los incentivos intermedios involucran una reducción en la base contributiva mediante la reducción de contribuciones de un grupo de empresas basadas en algunas actividades o industrias (Slattery & Zidar, 2020). Un ejemplo suele ser los créditos contributivos por inversiones y concesiones por depreciación acelerada, los cuales reducen las contribuciones de empresas que invierten grandes cantidades de dinero. Los créditos contributivos por investigación y desarrollo dirigidos hacia empresas que invierten sustancialmente en desarrollo e investigación son otro ejemplo de estos programas (Slattery & Zidar, 2020).   

Los incentivos monetarios forman parte integral de la política pública contemporánea, pero solo abarcan una parte de los esquemas de incentivos. Por lo general, son utilizados en conjunto con incentivos no monetarios (como servicios personalizados para empresas, infraestructura y desarrollo de tierra). Bartik (2020) argumenta que los incentivos no monetarios pueden ser más efectivos que los incentivos monetarios. Los beneficios de estas ayudas no monetarias han sido evidenciados en estudios como Jarmin (1999), Kline & Moretti (2013) y Bartik (2020), encontrado evidencia para crecimiento sustancial en los beneficios obtenidos de programas de extensiones de manufactura y entrenamientos para empleados, inversión en infraestructura y desarrollo de terrenos, respectivamente.  

El área de Río Piedras implementa regularmente incentivos no monetarios, teniendo acceso al Fideicomiso de Río Piedras, una entidad que busca adquirir terrenos y ponerlos al uso de la comunidad, en conjunto con la gran cantidad de incubadores en el área, las cuales brindan talleres, cursos y un sin número de otros beneficios para empresas en el área. En adición, el Centro de Acción Urbana y la Universidad de Puerto Rico proveen programas dirigidos a ayudar a las empresas en Río Piedras. La concentración de incubadoras, organizaciones e instituciones en el área de Rio Piedras abre la puerta para incentivar aún más estos programas. 

En primera instancia, los incentivos no monetarios resultan considerablemente más costo-efectivos que sus contrapartes monetarias y sus beneficios han sido evidenciados en varios estudios. Sin embargo, la manera en que se financiarán estos programas está significativamente correlacionada a los resultados que estos obtendrán. Un financiamiento que implique la reducción en programas progresivos dirigidos hacia la población en general, como una eliminación o cortes en programas de bienestar y educación pública, resultará en impactos negativos (Bartik, 2020). 

La implementación de futuras iniciativas de desarrollo económico en Río Piedras debe considerar incentivar industrias con grandes multiplicadores, en particular, el área de tecnología, que, al estar en la proximidad inmediata de la Universidad de Puerto Rico, podrá obtener trabajadores educados en el área. En cuanto a los incentivos a ser implementados en el área de Río Piedras, estos deben ser utilizados cuidadosamente y deben cubrir las necesidades de los empresarios locales y de la comunidad en general. En adición, el proceso de entrevistas nuestro evidenció una necesidad por incentivos económicos más abarcadores. En otras palabras, los incentivos económicos que fueron recibidos por diversos empresarios no lograban reducciones sustanciales en sus costos, ni tampoco ofrecían beneficios que facilitarán sus operaciones de manera significativa. Proveer mejores beneficios a estos empresarios puede promulgar su estadía en el área, promoviendo criminalidad reducida, áreas limpias y la posibilidad de mayores beneficios a la comunidad.  

Adicionalmente, los incentivos en Río Piedras deben tener mayores beneficios económicos que áreas aledañas, debido en gran medida a sus condiciones económicas. Este argumento es apoyado por Bartik (2015) y Austin et al. (2018), quienes sugieren que los beneficios de incentivos económicos serán mayores en comunidades con altos niveles de desempleo y en particular con altos niveles de desempleo involuntario. Incentivos en estas áreas pueden significar beneficios individuales, una baja en la criminalidad, un alza en los beneficios para miembros familiares y mayores beneficios fiscales locales (Bartik, 2020). Un incremento en empleos en áreas afectadas económicamente logra aumentar las ganancias totales de estas mediante un incremento en la tasa de empleo local, e incluso puede resultar en beneficios que serán al menos 60% mayores que los experimentados en áreas sin graves problemas económicos (Bartik, 2020). 

Cordero-Arroyo et al. (2019) llevó a cabo una investigación muy similar a la aquí presentada, incluyendo los resultados de las entrevistas a 18 dueños de microempresas. El enfoque principal de dicha investigación es precisamente enfatizar la importancia del emprendimiento y demostrar, desde la perspectiva de un empresario, cómo el gobierno y sus políticas afectan estos pequeños negocios locales, entre otros factores. Este artículo evidentemente está altamente correlacionado con la presente investigación, particularmente con el elemento del hindsight bias. El grupo focal de empresarios estaba compuesto por nueve hombres y nueve mujeres que cumplían con las siguientes características: ser propietarios de pequeñas o medianas empresas, tener 21 años o más, haber participado en una encuesta a dueños de pequeñas empresas registradas en la Compañía de Comercio y Exportación de Puerto Rico entre el 2005 y el 2011, y ser clasificado como pobre al momento del establecimiento de su empresa, según las respuestas de la encuesta previamente mencionada. A raíz de esta investigación, se presentaron resultados extremadamente interesantes; sin embargo, lo más pertinente a la propuesta actual es que los autores identificaron cuáles eran los obstáculos más devastadores para los negocios desde la perspectiva de sus dueños. Los obstáculos más significativos según los resultados de las entrevistas fueron: las relaciones familiares, los costos operacionales, la falta de financiamiento, la competencia, la corrupción y las relaciones con el gobierno.  

Al analizar las categorías de obstáculos que enfrentan estas empresas, resaltan mayormente los costos operacionales, la falta de financiamiento, la corrupción y la relación existente entre los empresarios y el gobierno. Bajo la categoría de costos operacionales, todos los empresarios entrevistados mencionaron el costo elevado de los servicios de agua y energía eléctrica. Sin duda, este fue el costo operacional mencionado con mayor frecuencia por los empresarios. Los empresarios mencionaron no solo lo exorbitante que era el costo del kilovatio por hora, sino también la fianza requerida para solicitarla, en conjunto a las multas que reciben por conexiones defectuosas, aunque estas no hayan ocurrido con intención. También se mencionó en numerosas ocasiones la fluctuación en precio de la luz como un factor que no les permitía presupuestar sus gastos adecuadamente.  

Bajo la categoría de falta de financiamiento, los empresarios mencionaron que era un obstáculo principal a su desarrollo como empresa lo restrictivo o difícil que era obtener un préstamo. Se menciona que el nivel de exigencia que tenían los bancos a la hora de brindarle un préstamo a uno de estos pequeños negocios era imposible de cumplir y que simplemente los préstamos se convirtieron en un método de financiamiento inaccesible para ellos. El artículo también hace un excelente análisis al mencionar que “el financiamiento es una de las pocas características del ambiente de negocios que está robustamente relacionada al crecimiento de las empresas”, por ende, el crecimiento de estas empresas locales ha sido severamente debilitado por esta inaccesibilidad a los préstamos bancarios. Se menciona como la falta de financiamiento restringe el poder comprar inventario y reinvertir en el negocio, lo cual limita severamente a estos empresarios y los posiciona en desventaja.  

Finalmente, se discute el tema de la reglamentación gubernamental sobre dichos negocios y el impacto de este. Muchos de los empresarios expresaron que comprenden la importancia de la reglamentación gubernamental en general, pero identificaron ciertos factores que ellos entienden que provienen de dicha reglamentación que contribuyeron al cierre de su negocio o seriamente los impacta de forma negativa. Los empresarios mencionaron ocurrencias de falta de claridad en requisitos gubernamentales, la gran cantidad de requisitos establecidos, en conjunto a la numerosa cantidad de permisos que necesitaban obtener, la burocracia involucrada en el proceso de otorgamiento de dichos permisos y finalmente las multas y la corrupción gubernamental dentro de estos procesos. 

Cordero-Arroyo et al. (2019) concluyen que, a pesar de que los empresarios o la mayoría de ellos eran clasificados como pobres al momento de iniciar operaciones, la necesidad no fue su motivación mayor para abrir puertas: fueron las potenciales oportunidades. Sin embargo, en el transcurso de sus operaciones la mayoría de los empresarios sufrieron grandemente por los obstáculos previamente mencionados. Es importante destacar que en el artículo se concluye que las potenciales ayudas gubernamentales brindadas no fueron percibidas por los empresarios como ayuda. Esto es debido a que los obstáculos que forman parte del proceso para adquirir o cualificar para dichas ayudas era tan arduo y extenso que algunos de las empresas sucumbieron y otras continuaron luchando. Este dato es extremadamente importante, especialmente cuando nos percatamos que esta investigación se llevó a cabo en el 2019 y vemos como son los mismos impedimentos y obstáculos presentes al día de hoy.  Es palpable como el hindsight bias no solo continúa siendo un elemento altamente presente y contribuyente a la situación económica de estas empresas locales, si no se puede argumentar que con el pasar de los años ha aumentado. En fin, es precisamente por investigaciones económicas como esta que se identifica la necesidad para un cambio y una reestructuración.

Metodología 

Este trabajo se realiza como un estudio exploratorio, con el objetivo final de comprender por qué no han funcionado las iniciativas de desarrollo en Río Piedras. Se realizó una extensa revisión de literatura sobre factores como los sesgos de comportamiento, el desarrollo económico y los incentivos económicos. En conjunto con el Centro de Acción Urbana, Comunitaria y Empresarial de Río Piedras (CAUCE) se realizó un análisis detallado de las leyes implementadas con este propósito. Por último, se llevaron a cabo entrevistas a ocho (8) personas de diversos ambientes. Se entrevistaron a dos residentes del área de Río Piedras, dos economistas de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, dos comerciantes con incentivos municipales o estatales y dos comerciantes sin incentivos económicos. Las entrevistas consistieron en contestar una serie de preguntas abiertas relacionadas a la historia de Río Piedras, su contexto actual y cómo las iniciativas del estado habían mejorado, si en algo, las condiciones del área. Se llevaron a cabo una serie de entrevistas semiestructuradas, en donde las preguntas fundamentales para el propósito de nuestra investigación fueron las siguientes: ¿Los incentivos empresariales de Río Piedras tuvieron algún impacto sobre su decisión de iniciar operaciones en el área? ¿Ha solicitado algún incentivo para su negocio en cualquier periodo, luego de abrir su negocio? ¿Conocía los incentivos de la Ley Especial para la Rehabilitación de Río Piedras? En el caso de ser afirmativa la respuesta, ¿por qué no solicitó dichos incentivos?  

Luego de concluir las entrevistas, se logró identificar que: todos los empresarios negaron que los incentivos empresariales hayan tenido algún impacto en su decisión de iniciar operaciones en Río Piedras, dos (2) de los cuatro (4) empresarios contestaron que sí habían solicitado incentivos municipales y solo uno (1) de los comerciantes conocía sobre la Ley Núm. 75. Sin embargo, no cualificaba para acogerse a dichos incentivos y los encontraba insuficientes tomando en consideración los pasos burocráticos requeridos para adquirir los mismos. 

Análisis de leyes, programas y medidas 

Durante el transcurso de este estudio exploratorio se han analizado posibles soluciones al estancamiento y declive del área de Río Piedras. Con el propósito de reconocer qué ha sucedido en Río Piedras debemos observar las previas intervenciones por parte del estado y por qué su impacto ha sido mucho más limitado de lo que pretendían.  

Comenzaremos este análisis con la Ley Especial para la Rehabilitación de Río Piedras o la Ley 75 de 5 de julio de 1995. Esta ley se recuesta sobre la idea de atraer un número razonable de inversiones mediante exenciones contributivas, con el objetivo de mejorar el físico, la seguridad y la imagen del área. Antes de entrar en los beneficios otorgados debemos entender los términos “Rehabilitación Sustancial” y “Mejora”. Por rehabilitación sustancial se entiende “toda obra de reconstrucción que sea igual o mayor al veinticinco (25) por ciento del valor de mercado de la propiedad a rehabilitarse, excluyendo el valor del terreno donde esté ubicada la misma” (Ley 75, 1995). Por otro lado, mejora se refiere a “toda inversión igual o mayor a veinticinco mil dólares ($25,000) que se realice para mejorar las condiciones físicas de una propiedad dedicada al uso cultural como cinematógrafo, teatro, sala de conciertos, galería de arte o cualquier otro uso con fines culturales, teatrales o artesanales” (Ley 75, 1995). Es mediante el establecimiento de una nueva construcción de propiedad elegible, la mejora o la rehabilitación sustancial de una propiedad en la Zona Especial de Planificación en Río Piedras que los negocios pueden adquirir exenciones contributivas sobre ingresos, propiedad inmueble y mueble y sobre cualquier tipo de alquiler, patente o arbitrio municipal. Además, estos negocios pudieran “recibir una deducción adicional, para fines del cómputo de su contribución sobre ingresos, equivalente al cinco (5) por ciento del salario mínimo aplicable de cada nuevo empleo creado” (Ley 75, 1995). 

También existen los incentivos ofrecidos por la oficina de Emprendimiento Capital del Municipio de San Juan, la cual se encarga de desarrollar el crecimiento económico en las áreas de dicho municipio mediante programas de exenciones contributivas. Estos incluyen: exoneración total del pago de contribuciones sobre propiedad mueble, exoneración total sobre el total del pago de contribuciones sobre propiedad inmueble y una exoneración total del pago de patentes por cinco años a nuevas empresas que se establezcan en las zonas del Casco de Río Piedras, Centro de Santurce, El Condado y El Viejo San Juan. En el caso de empresas o negocios previamente establecidos en estas áreas, se ofrecen los mismos beneficios a cambio de una inversión en mejoras capitales en sus terrenos y edificaciones de más de $50,000 o una expansión de sus actividades que resulte en cinco empleados adicionales a tiempo completo o 10 empleados irregulares con no menos de 900 horas trabajadas, cada uno durante un año. Los negocios que empleen a 75 empleados propongan la construcción de nuevas edificaciones, establezcan facilidades para atender la necesidad de estacionamiento o contribuyan al mejoramiento estético del área, podrán aplicar a una mayor dispensa de exenciones contributivas, la cual será otorgada a discreción del alcalde. Por último, proyectos de construcción que cualifiquen a los incentivos podrán pagar el importe de arbitrios municipales de construcción en tres plazos. Aparte de brindar exenciones contributivas, la oficina tiene la habilidad de brindar asistencia económica a microempresas localizadas en San Juan mediante la otorgación de grants que pueden alcanzar los $15,000 dólares a negocios existentes y $35,000 a nuevos negocios. Estos grants nada más podrán ser utilizados para gastos operacionales del negocio y requieren que estos tengan 10 empleados o menos (incluyendo al dueño), que los dueños o alguno de sus empleados sean de escasos recursos o que tengan un volumen de venta igual o menor a $350,000. La fuente principal de información sobre los incentivos ofrecidos por la oficina de Emprendimiento Capital del Municipio de San Juan fueron las páginas de Asistencia económica a pequeños y medianos negocios y el Programa de Incentivos Contributivos, ambas iniciativas localizadas en el portal web del Municipio Autónomo de San Juan (s.f.). 

Ambas medidas son muy similares, pero sus resultados han sido drásticamente diferentes. Aunque no se consiguió una cifra oficial, entidades y personas que colaboraron en la implementación de la ley estiman que nada más solicitaron una o dos empresas a la Ley 75. A cambio, estos estiman que los decretos otorgados por Emprendimiento Capital han sido adquiridos por al menos 25 empresarios, de los cuales siete han sido en el área de Río Piedras. El factor determinante que ha causado este mayor número de solicitudes ha sido la facilidad con la que se otorgaron las exenciones y el mayor nivel de promoción. En el caso de Emprendimiento Capital, uno de los empresarios con incentivos económicos comentó que únicamente los obtuvo porque la administración municipal fue personalmente a promocionarse y a llenarle los documentos requeridos. Sin embargo, ambas medidas tienen un problema fundamental: los gastos requeridos para adquirir los incentivos son muy altos para muchos negocios. Por ejemplo, algunas de las empresas localizadas en Río Piedras tienen gran dificultad adquiriendo el capital necesario para realizar una inversión de $50,000 en sus propiedades. Los problemas relacionados a la adquisición de capital pueden ser solucionados implementando medidas que sean dirigidas a empresas más pequeñas o incluso a microempresas.  

Finalizamos nuestro análisis con la Ley 60 de 2019. Conocida como el Código de Incentivos de Puerto Rico, la Ley 60 consolida decenas de decretos, incentivos y subsidios que buscan fomentar el desarrollo económico de Puerto Rico. En particular, nos enfocaremos en el programa de pequeñas y medianas empresas y en el programa de créditos contributivos para la industria hotelera. Se define microempresas como “aquellas pequeña y mediana empresa que generan un ingreso bruto menor de quinientos mil dólares anuales ($500,000.00), y posee siete (7) empleados o menos” (Ley 60, 2019). El Programa de Pequeñas y Medianas Empresas Innovadoras o PYMES Innovadoras “ofrece la oportunidad de obtener el capital que necesitan las PYMES y start-ups hasta un máximo de $100,000 para iniciar o escalar sus operaciones, con miras a la comercialización y exportación de sus innovaciones” (Departamento de Desarrollo Económico y Comercio, s.f.). Por su parte, el programa de créditos contributivos busca incentivar el crecimiento de la industria turística mediante la otorgación de créditos. Estos representan una reducción en contribuciones de hasta un 40% de la inversión realizada con propósitos turísticos, y pueden ser cedidos a terceros, usualmente por una cantidad monetaria especificada. 

Los programas gubernamentales parecen sufrir de varios de los problemas discutidos durante nuestra revisión de literatura. Comenzando con el financiamiento, la Ley 75, la Ley 60 y Emprendimiento Capital del Municipio de San Juan tienen medidas para incentivar monetariamente a nuevas empresas. Sin embargo, los altos costos de entrada que ambos programas requieren pueden significar una barrera para muchas pequeñas empresas, resultando en el pobre aprovechamiento de los incentivos gubernamentales, ya que estos son únicamente utilizados por las pocas empresas que poseen un alto nivel de capital. Sin embargo, los comercios de Río Piedras tienden a ser pequeñas o medianas empresas que buscan satisfacer un nicho en la economía local, por lo que no poseen el poder adquisitivo que es requerido de ellos.  La falta de financiamiento fue entre los principales problemas evidenciados en el artículo “Apoyos y obstáculos para el desarrollo de microempresas” de Cordero-Arroyo et al. (2019). Los altos costos de entrada y la naturaleza restrictiva de estos programas son un problema recurrente en este sector. El artículo muestra cómo esto resulta en una inhabilidad en adquirir acceso a estos programas. De igual manera, se observó un gran nivel de desconocimiento por parte de los empresarios sobre estos programas, un problema que puede ser atribuido a una deficiencia en su promoción. El sesgo de retrospectiva puede ser un contribuyente al desconocimiento general de estos programas. Si consideramos que el problema es un conjunto de ambos conceptos, el efecto puede ser aún peor.  

En cuanto a los costos operacionales, no hay un intento sustancial por parte de estos programas para reducir los costos por servicios de agua y energía eléctrica, los cuales son los más mencionados por los empresarios. En cuanto a las patentes y los permisos, se ve una reducción en sus pagos, lo que puede resultar en una baja sustancial en los costos operacionales, aunque nuevamente los altos costos de entrada de estos programas reducen la efectividad de estos.  

Se aprecia una falta en los programas de servicios personalizados para empresas. Recordemos que Bartik (2020) argumenta que estos son considerablemente más costos-efectivos que los incentivos monetarios. La falta de inclusión de los programas reduce sustancialmente los posibles beneficios que puede conllevar este tipo de política pública. Aun así, reconocemos que el área de Río Piedras tiene muchos lugares proveedores de estos servicios, pero si nuestro interés es brindar los mayores beneficios posibles, estos servicios son fundamentales para el desarrollo del área. El programa de pymes ofrecido por la Ley 60 mediante el Departamento de Desarrollo Económico y Comercio es el que mayor beneficio puede tener, debido a su accesibilidad y sus grandes cantidades de financiamiento. Al ser un programa generalizado, sus beneficios no necesariamente serán dirigidos hacia los negocios del área de Río Piedras, pero sus amplias ayudas pueden servir como base de futuras iniciativas.  Los créditos contributivos dirigidos hacia la empresa de turismo proveen los mayores beneficios posibles, con una exención contributiva de hasta 40% de la inversión realizada en turismo. Los créditos sirven como unos activos monetarios que al ser vendidos a otros empresarios pueden brindarle capital y liquidez a la empresa. Las restricciones hacia inversiones turísticas limitan su utilidad, pero puede servir de base para otros programas de incentivos. Por último, la falta de enfoque hacia el desarrollo de áreas con graves problemas económicos, con la excepción de la ley 75 de 1995, reduce grandemente los posibles beneficios y multiplicadores que estos pueden brindar. Este aspecto fue evidenciado en los estudios de Austin et al. (2018), Bartik (2015), Bartik (2020) y Moretti (2010). 

Los programas de desarrollo económico analizados durante esta sección fallan en incentivar áreas con graves problemas económicos, lo que resultará en beneficios reducidos. Adicionalmente, el gran desconocimiento de estas políticas, caracterizado por la falta de promoción y un sesgo de retrospectiva marcado, han limitado el uso de estas. El financiamiento ofrecido y las reducciones en costos operacionales son considerables, aunque su utilidad es reducida por las grandes restricciones requeridas para obtenerlos. La Ley 60 y su programa de pymes y créditos contributivos por turismo proveen los mayores beneficios y pueden servir como la base de futuras políticas públicas.

Resultados de las entrevistas 

Las entrevistas revelaron el gran nivel de desconocimiento que abarca a la comunidad de Río Piedras con respecto a las ayudas gubernamentales que han sido dirigidas hacia su desarrollo. Quedó evidenciado que todos, excepto uno de los participantes, no tenían conocimiento alguno sobre las ayudas. Sin embargo, al ser cuestionados sobre su interés en conocer más sobre estos programas, la mayoría mencionó que no estaban interesados. Testimonios como estos evidencian un gran nivel de indiferencia ante cualquier tipo de ayuda gubernamental por parte de la comunidad. En otras palabras, los habitantes de Río Piedras no son movidos por incentivos económicos debido a que se ha creado un comportamiento que les ha impedido llevar a cabo estas acciones. Este sesgo ha sido creado por décadas de iniciativas fallidas por parte de las administraciones gubernamentales que han fallado en lograr un desarrollo sustancial. El sesgo de retrospectiva se manifiesta mediante la ignorancia total de ayudas gubernamentales y ha creado una actitud de desconfianza ante las medidas del estado, impidiendo así que estos busquen ayudas, ya que dan por hecho que no las recibirán. Esto es consistente con los hallazgos de Cordero-Arroyo et al. (2019) quienes encontraron que los empresarios de pequeñas y medianas empresas tienden a ver al gobierno como un obstáculo.  

 

Por otro lado, los pocos empresarios que tienen incentivos económicos revelan que estos, aunque ayudan, no son suficientes para aliviar gran parte de sus necesidades. En el caso de estos pequeños y medianos comerciantes, los costos operacionales como el alquiler, agua, electricidad y patentes reducen grandemente su capital (Cordero-Arroyo et al., 2019), resultando en costos operacionales tan altos que los beneficios contributivos de operar en Río Piedras se reducen considerablemente. Además, debemos tomar en consideración que varios de los participantes mencionaron problemas como la criminalidad, el abandono de edificios y negocios, el poco alumbrado público y la falta de presencia policial como contribuyentes adicionales al problema de desarrollo en Río Piedras. 

Conclusiones 

El desarrollo de Río Piedras es un asunto imposible de encapsular en un solo incentivo económico o iniciativa. Problemas como el sesgo de retrospectiva, la falta de capital y las condiciones físicas, económicas y sociales de Río Piedras han sido factores determinantes que han impedido su crecimiento y desarrollo. Sin embrago, tomándose en cuenta todo lo resaltado a través de esta investigación, se puede recopilar información sumamente pertinente para proponer una propuesta que traiga un sentido de esperanza y progreso hacia la comunidad de Río Piedras. Por ejemplo, la involucración de CAUCE será esencial para mitigar el sesgo de retrospectiva entre los empresarios ya existentes en la comunidad. La creación de una enmienda agresiva hacia la Ley Núm. 75 del 1995, Ley Especial para la Rehabilitación de Río Piedras, no solo será primordial para el crecimiento de Río Piedras, sino que será imprescindible para cualquier tipo de nueva inversión realizada en el casco urbano. La realización de esta propuesta será la clave para incentivar actividad económica en el área, de manera que se mantengan ciertas restricciones hacia los empresarios entrantes para asegurar mantener el aspecto cultural, comunitario e histórico del área intacto.

Agradecimientos 

Reconocemos y agradecemos al profesor Manuel Lobato-Vico de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, por brindarnos, mediante su curso de FINA 4001, el espacio para llevar a cabo esta investigación y proporcionarnos el conocimiento y las herramientas requeridas para dar frutos al proyecto. Agradecemos como colaboradores iniciales a nuestros compañeros de clase Mila G. Hellfyre Hernández y Jesús M. Pérez, y la participación de todo el estudiantado del curso FINA 4001 por su retroalimentación y apoyo. Por último, debemos resaltar la labor realizada por el Centro de Acción Urbana, Comunitaria y Empresarial de Río Piedras (CAUCE), y en particular a su directora Mónica Ponce Caballero, quien fue fundamental en el desarrollo de este trabajo investigativo.  

Referencias 

Bartik, T. J. (2005). Solving the problems of economic development incentives. Growth and Change, 36(2), 139-166. 

Bartik, T. J. (2020). Using place-based jobs policies to help distressed communities. Journal of Economic Perspectives, 34(3), 99-127. 

Bi, Q., Boh, W. F., & Christopoulos, G. (2021). Trust, fast and slow: A comparison study of the trust behaviors of entrepreneurs and non-entrepreneurs. Journal of Business Venturing, 36(6), 1-16. 

Carroll, M. C., & Blair, J. P. (2008). Local economic development: Analysis, practices, and globalization. Sage. 

Cordero-Arroyo, G., Segarra-Alméstica, E. V., Correa-Matos, C., & Rodríguez-Roldán, N. (2019). Apoyos y obstáculos para el desarrollo de microempresas: percepción de sus dueños. Fórum Empresarial, 24(1), 55-96. https://doi.org/10.33801/fe.v24i1.17230 

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Posted on May 30, 2024 .

ARISTIZÁBAL

Franchelys Martínez Cuadrado 
Departamento de Literatura Comparada 
Facultad de Humanidades, UPR RP 

Recibido: 26/02/2024; Revisado: 21/05/2024; Aceptado: 28/05/2024

El Guillón de Mendosa nace en el ventisquero central de una de las sierras más grandes de la península ibérica, al noroeste del Sistema Central, con corrientes de agua a temperaturas frías que viajan todo el año por los canales que recorren la cordillera y sus montañosos recovecos. Estas corrientes atraviesan las unidades de relieve más antiguas de la historia, que ocupan casi toda la superficie, con una altura media de casi 600 metros sobre el nivel del mar. Uno de los cuerpos de agua más grandes de esta región posee unas dimensiones espeluznantes, y es también el protagonista de las fotografías en las postales de los viajeros y el conducto principal para el transporte de comercio dentro de la cordillera.   

Una maravilla de río, a veces tomado por el lago que nunca les hizo falta a los ibéricos, ni siquiera en los primeros años de establecidos. Por lo que cuentan los libros de historia, la gente de este pueblo declaró que el agua del Guillón de Mendosa es “espiritualmente venerable”. Una consagración unió a todas las comunidades en el Tratado de Doncellas; un acuerdo que prohibía la profanación del uso de las aguas del río y su consumo como antídoto rejuvenecedor o sanador. Lo que para mi absorta lectura pareció un chiste de mal gusto, para el autor de este libro era, sin duda alguna, un hecho revisado. Y mientras El Guillón de Mendosa se hacía cada vez menos visible tras el camino que se dejaba atrás, Olivero Rollán de Mendosa lo bautizaba con su apellido para no olvidar porqué, con aparente certeza, quedó el agua de este río intocable bajo su crédito.   

Y es que este sacerdote del siglo XVIII había sido perseguido y asesinado por gitanos, amordazado y lanzado al río desde el Puente de Segovia, que fue construido por el arquitecto preferido del rey Felipe II como un obsequio de bodas. El asesinato no fue condenado por su naturaleza, sino como uno de sacrificio decoroso en nombre de la patrimonialidad que endeudaba a las comunidades con la iglesia en esos tiempos. Olivero Rollán de Mendosa no había sido un hombre de palabra, y cuenta una de las miles de leyendas sobre el río que el sacerdote pagaría su pecado mayor al permitirles a los ciudadanos del pueblo que bebieran de las aguas del panteón más grande conocido, para devolverles la pureza que se había robado de muchas jovencitas en vida. Se dice que las aguas del Guillón de Mendosa son sanadoras por la entrega de culpas del sacerdote, pero también rejuvenecedoras por la liberación de las almas de todas las jovencitas y el desgaste de la juventud que alguna vez experimentó el santo no inocente. Años después, se protegen sus aguas para remediar y olvidar los daños provocados, reconociendo que se necesitaban los canales limpios para el transporte de minerales naturales que más tarde serían descubiertos por el reinado de Fernando VII, quien mandó extraer uno por uno para construir la magistral fontana en el redondel de la Fortaleza Aristizábal. La misma que se levantaba como una inmensa torre de hierro frente a mis ojos.   

La Universidad Autónoma Visgótica organizaba su tercer internado para estudiantes graduados de investigación en la Fortaleza Aristizábal, el antiguo castillo de la última familia real. La fortificación estuvo clausurada durante ochenta años tras la muerte del último monarca, cuyos restos debían descansar bajo de alguno de los pinos que enmarcaban la embocadura del opulento jardín en la entrada, y luego de cinco años después de su renovación estructural, fue declarado como un bien de interés cultural con la categoría de castillo histórico. La provincia amurallada en la que yacía este castillo fue conocida en algún momento como El Pequeño Pueblo de San Aristizábal: un conjunto de localidades donde la familia real, junto a sus parientes y visitantes, se alojaron durante sus años de gobernación, completamente aislados de los pueblerinos. Con el paso de los años, la entrada al pueblo de Aristizábal se había convertido en una mera atracción turística, reconociendo el bien que la propaganda de la actividad le había traído a la economía del pueblo.   

Sin embargo, el acceso al castillo siempre estuvo limitado, incluso para las familias más adineradas de los pueblos norteños. Esto, a la vez, limitaba la posibilidad de realizar negocios con el extranjero, subastar la propiedad por una cantidad de dinero que doblase su valor propio, o hasta intercambiar bienes culturales con otros pueblos vecinos. Se dice que, entre las paredes de la Fortaleza Aristizábal, se esconden algunas de las Nueve Reliquias de Atavismo, las cuales habían estado desaparecidas desde el reinado de Fernando VII. Sé también que el Centro de Cultura Nacional dice lo que quiere decir acerca de este lugar, y que no querrían admitir por qué algunos lugares del castillo aún siguen con el acceso prohibido, aunque sean ellos mismos los indicadores.     

Dicen también que se escuchan lamentos, quejidos, llanto y aullidos de dolor por los interminables y amplios pasillos de vuelta redonda del castillo; un lugar que debería pensarse bien en si acercarse mucho a la puerta o no, pues una vez estás dentro, la Fortaleza Aristizábal se encargará de jamás dejarte salir.  

La llegada al castillo fue tan sobria como los egresados describieron tras su experiencia. La furgoneta de dos puertas corredizas negras y con ventanales ahumados que compartí con dos chicas más, nos dejó a los pies de una gran escalinata de piedra pulida que se levantaba sobre mi altura y no me alcanzaba para ver la primera entrada hacia el castillo. Atrás dejábamos la fuente que enmarcaba el redondel pavimentado, redecorado en sus extremos por el jardín, y me di cuenta de que éramos de las últimas en la fila automovilística de entregas. Aunque salí primero que las dos chicas, éstas también se marcharon apresuradas hacia el vestíbulo como dos colegialas de primer año, dejando tras su paso un silencio abrumador. La brisa del atardecer no tardó en abrirse paso entre mis piernas expuestas que, para estar a mediados de septiembre, era muy pronto para que el otoño comenzara a confundirse con el invierno.   

El conductor arrancó cuando bajé mi maletín del interior, sin tan siquiera esperar a que la puerta se cerrara correctamente, y el recibimiento pasó de la sobriedad al desabrimiento. Ni una sola ave planeaba en vuelo sobre el agrisado cielo, sereno y despejado, y tampoco llegaban a escucharse las corrientes de agua del Guillón de Mendosa a esta distancia.  

La provincia de Aristizábal se caracterizaba por su cercanía al río, lo que aún facilitaba su accesibilidad, y porque el sol nunca apuntaba en esta dirección. Por esta razón, el pueblo siempre lucía sombrío y la niebla se asentaba sobre él como si la torre más alta del castillo mantuviera una relación secreta con las nubes. La quietud arremetió contra las sensaciones extrañas que transmitía la llenura del castillo, levantándose frente a la mirada con preponderancia. Un lugar tan grande, antiguo y lóbrego no podía ofrecer nada bueno ni meramente con propósitos educativos. Los nuevos estudiantes que realizarían sus investigaciones sobre asuntos de la Fortaleza Aristizábal no estábamos aquí por ningún otro motivo. Y yo, como estudiante graduada de la Facultad de Historia, estaba aquí en búsqueda de concluir la investigación que se convertiría en mi tarjeta de identificación personal. Ya había recorrido los lugares donde creí haber encontrado la información que necesitaba. La recolecté, la estudié por mucho tiempo y la analicé hasta que sus instrucciones me trajeron hasta las puertas del castillo más recóndito. Si era así, debían estar protegiendo algo oculto.    

Y cuando encontrara a la gran bestia legendaria que sé que alguna vez residió aquí, bajo la posesión del último reinado, me convertiría en la primera historiadora de la península ibérica en descubrirla. Una buena corazonada me mantenía confiada, manifestando la ubicación del lugar exacto donde sus restos descansaban. Sólo tenía que averiguarlo.    

Al llegar a la habitación que se convertiría en mi nuevo alojamiento por los próximos seis meses, noté mi apellido plasmado sobre una tipografía que, con una cinta de destellos dorados, cobijaba un uniforme de bienvenida bien puesto sobre una de las camas. Tres grandes ventanales encabezaban las respectivas camas, enmarcadas por paredes de madera oscura reforzada con paramentos, columnas y zócalos del mismo color. La tenuidad de la luz que entraba por los ventanales apuntaba a las aburridas sábanas blancas que vestían las camas, todas acompañadas por una mesita de noche con una lámpara enana en el extremo derecho. Lo que debía lucir como el dormitorio de tres jóvenes adultos en un internado investigativo parecía más como una sala de muertos en un sanatorio gótico.   

Aunque la cama que había sido seleccionada para mí fue la del extremo derecho, decidí adueñarme de la opuesta, y coloqué mi maletín sobre el colchón. El interior del castillo estaba bastante cálido como para seguir llevando mi gabardina de cuero negro, y mientras me desprendía de ella, noté la vista que ofrecía esta ubicación del castillo. La extensión de las áreas verdes en la Fortaleza Aristizábal superaba los viñedos de las haciendas de los pueblos norteños. Una vasta llanura verde brillante parecía ser lo único con vida que aguardaba en el castillo. El Guillón de Mendosa se asomaba casi en la puesta del sol, la ciudad De Mirabel se divisaba en la lejanía y el movimiento brusco del cuerpo de un individuo, cerca de los alrededores del castillo, desvió mi atención mientras recién terminaba de blandir una espada alemana de doble filo.   

Al asomarme por la ventana, vi a un guardia de seguridad descamisado, probablemente en descanso de turno, que estaba enarbolando una espada medieval en el aire con movimientos fuertes y hebrosos. 

Su robusta espalda, brillantemente blanca y sudorosa, me invitaba a querer conocer al portador de semejante musculatura. Los pantalones de un azul mezclilla, remangados a los tobillos para evitar pisarlos, caían como anillos en sus caderas. La fatiga de su respiración, a sabiendas por un pecho latente y ascendiente de un abdomen estrictamente tonificado, me dio la impresión de que llevaba tiempo entrenando. Me acerqué un poco más a la ventana, intentando alcanzar el rostro enmarcado por una cabellera corta, negra y lisa, pero mi movimiento debió llamar a su intuición para avisarle que estaba siendo observado cuando miró por encima del hombro y se volteó en mi dirección.   

Me alejé de la cristalera de un salto, no enteramente segura de si él me había pillado o no. El calor se vigorizó dentro de la habitación y decidí quitarme el suéter que traía puesto sobre una camiseta sencilla con la que decidí quedarme para andar fresca solamente hasta la cena de bienvenida. Para este evento, debíamos portar la ropa obsequiada.   

—Bienvenida, Srta. Carattini. —La insolencia de la repentina compañía me estremeció cuando salté para encontrarme con la visita. Pero de pronto, la intensidad de su semblante me puso los pelos de punta y quise volver a mirar por la ventana.  
—¿Cómo ha ido su llegada al castillo?

Un portero uniformado con una chaqueta negra formal a juego con los pantalones esperaba pacientemente por mi respuesta. Me miró fijamente, sus manos cruzadas frente a su torso. 

—Bien —respondí a medias, pesando en si elaborar conversación con el sujeto que debió recibirme en la puerta y no en mi habitación—. Me preguntaba si tendría compañeras de habitación. 

—Lamento informarle que fue de las últimas solicitudes tramitadas durante el proceso de admisión, por lo que han sobrado más camas vacantes que señoritas interesadas en investigarnos como usted. De pronto, me temo que será sólo usted en esta habitación. 
—¿Vives aquí?   

El portero permaneció cuestionablemente quieto. Luego desvió la mirada a los artículos que se asomaban desde mi maletín encima de la cama.   

—¿Franz Kafka? —preguntó mientras se acercó en tres pasos resonantes sobre el suelo que crujió bajo su peso. Agarró La metamorfosis, que sobresalía del interior del maletín, y lo sostuvo con una mano delgada y ensortijada. No pude retroceder mucho para protegerme, pero sí observar su embellecido rostro con más detalle—. Prefiero a Gustave Flaubert.   

—No son contemporáneos.   
—De hecho —El portero levantó su mirada, ahora muy cerca de mí. En ese instante, pude identificar una cierta familiaridad en las facciones de su rostro—, sí lo son. Kafka comenzó a escribir gracias a él.   
—Kafka lo leía y admiraba, pero ambos tienen su propio estilo de escritura.   
—¿Y usted? —Soltó el libro y, si fue posible, se acercó un paso más—. ¿Ya sabe cómo va a emplear su estilo para escribir sobre mí?   
—¿Quién eres? —le pregunté, cautelosa, intentando tomar una distancia que él limitaba. 
—El ujier del recibidor. Estuve esperándote toda la mañana.  
—¿Por qué entraste en mi habitación?  
—Conoces lo que dicen de Aristizábal. Si las paredes escuchan, las puertas se mueven. Y nunca deberías abrir a nadie que llame más de tres veces.   
—¿Cuál es tu nombre? —Mi voz perdió firmeza cuando me encontré a mí misma acorralada contra el ventanal, donde el sol había desaparecido y la habitación se había sumergido en una repentina oscuridad. La misma que emitía la intensidad de sus ojos negros.  
—Está entre tus apuntes. Vuélvelos a leer, Rondelle.   
—¿Dónde estás?   
—No te lo voy a dejar tan fácil. Búscame en la cena y conocerás la primera pista.  

El portero, del cual desconocía el nombre, pero podía suponerlo ahora que él me lo había sugerido, no debía ser sólo “el portero”. Este hombre se separó de mí para darse la vuelta y dirigirse a la puerta cuando la habitación volvió a iluminarse con los remanentes del atardecer. Me fijé que se había llevado La metamorfosis, pero no me cuestioné si esa hubiera sido la razón para volvernos a encontrar.    

—¿Dominique? —Lo intenté y el sujeto se detuvo justo frente a la puerta.   
—¿Sí?   

Me tomé un segundo para respirar hondo, pues hasta entonces recién me fijaba en la traición de mis nervios ahora que Dominique se iba y yo me quedaba con la vorágine de incongruencias en mi cabeza.   

—¿Sabías que vendría?  

Dominique tardó un instante en responder. El rostro que ahora tomaba identidad era el mismo que no alcancé ver desde mi ventana. Además, era el mismo rostro de la criatura que yo estaría investigando durante los próximos seis meses de mi internado. 

El Monstruo del Guillón de Mendosa.  
—Te he reconocido desde la primera vez que nos conocimos.    


Posted on May 30, 2024 .

Tiempos de primavera

Sebastián Flores Bezares 
Departamento de Filosofía 
Facultad de Humanidades, UPR RP

Recibido: 01/03/2024; Revisado: 23/04/2024; Aceptado: 28/05/2024

(5:45PM)  

TITOS- Mañana paso por mis abrigos.  

MARGARITA- No podrá ser. Te los llevo hoy a la noche. 

TITOS- Mejor. No tan tarde; tengo planes. ¿Y el perro? 

MARGARITA- Cuando pueda. Te lo llevaré también. 

TITOS- La última vez dejé unas cadenas… las necesito.  

MARGARITA- ¿Algo más?  

TITOS- No. 

MARGARITA- (Offline)

(8:06PM)

TITOS- Gracias. 

MARGARITA- Sí. 

FIN. 

Nadie nunca supo, realmente, lo que pasó entre ellos, solo ellos -y ni tanto-, pero lo que todo el mundo sabía era que los ojos de él habían perdido todo su brillo y, la sonrisa de ella, su sinceridad. Amor de fugaz esencia y eterno sentimiento. Orgullo de quietud venenosa y acción destructiva. Para su condena, lo que se entierra vivo, tal cual, como una semilla, no muere, sino que, tiempo más tarde crece, resurge, florece. Para su suerte, el sol no olvida sus deudas y ya comienza a anunciarle al mundo que son tiempos de primavera…  


Posted on May 30, 2024 .

Una noche sin cucubanos

Ámbar Marrero 
Departamento de Psicología 
Facultad de Ciencias Sociales, UPR RP 

Recibido: 23/01/2024; Revisado: 18/04/2024; Aceptado: 28/05/2024


Las noches iluminaban mi delicada niñez 
Las estrellas me miraban con orgullo 
La luna reflejaba su magna luz patriota 
Los cucubanos alumbraban mi suave rostro 

La naturaleza me cuidaba, ruidosa y traviesa 
El viento, animado, enfriaba mi piel 
Los planetas nos contemplaban, curiosos 
Los cucubanos salían a jugar con el rocío 

¿Quién habrá silenciado a las estrellas? 
Ya no gritan, a penas suspiran en la soledad 
Guardan secretos, ya la luna no las reconoce 
Ahora los cucubanos se esconden en la niebla 

Me enterré en la grama; rogándole a nuestra Madre 
Miré furioso al nuevo vacío, estremecedor 
Escuché el llanto de la luna, su decepción 
Sólo había un lamentable cucubano 

Quiero gritar bajo esta oscuridad cegadora 
Pienso en qué será de mi archipiélago: un foco 
Extraño la profundidad de la noche; extraño a Borikén 
Hoy no recuerdo cómo se ven los cucubanos…  


Posted on May 30, 2024 .

Análisis del impacto de la pandemia del Covid-19 en la preferencias por concentraciones en la Universidad de Puerto Rico - Recinto de Río Piedras

Analysis of the impact of the Covid-19 pandemic on the preference for college majors at the University of Puerto Rico - Río Piedras Campus

Tatiana M. Vizcarrondo Córdova
 

Departamento de Estadística y Sistemas Computarizados de Información 

Facultad de Administración de Empresas, UPR RP 

Layza Frías Rivera 

Departamento de Estadística y Sistemas Computarizados de Información 

Facultad de Administración de Empresas, UPR RP 

Bernie Vélez Cintrón 

Departamento de Estadística y Sistemas Computarizados de Información 

Facultad de Administración de Empresas, UPR RP

Recibido: 20/02/2024; Revisado: 23/05/2024; Aceptado: 24/05/2024


Resumen 
Este estudio examina los cambios en las preferencias académicas en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, entre 2017, 2020 y 2021. Usando técnicas como análisis de componentes principales, análisis factorial exploratorio, análisis discriminante y análisis de correlación canónica, se analizaron las variaciones en la elección de carreras. Los resultados indican una disminución en la matrícula, pero un aumento en la demanda en áreas como biología, psicología, contabilidad y gerencia de mercadeo. En 2021, posiblemente debido a la pandemia, se observó un incremento en las preferencias por ciencias, tecnología y comunicaciones. 

Palabras claves: concentración, pandemia, estudiantes, facultades, admitidos 

Abstract 
This study examines the changes in academic preferences at the University of Puerto Rico, Río Piedras Campus, between 2017, 2020 and 2021. Using techniques such as principal components analysis, discriminant analysis, exploratory factor analysis, and canonical analysis, the variations in career choice. The results indicate a decrease in enrollment, but an increase in demand in areas such as biology, psychology, accounting and marketing management. In 2021, possibly due to the pandemic, an increase in preferences for science, technology and communications was observed. 

Keywords: concentration, pandemic, students, faculties, admitted 

Introducción 

La pandemia del COVID-19 ha desencadenado transformaciones significativas en todos los aspectos de la sociedad, redefiniendo la forma en que vivimos y nos relacionamos. Aún es incalculable el efecto de la pandemia, no solo por lo que ya ocurrió hasta la fecha sino por los rebrotes y variantes que llevaron a los gobiernos a implementar rigurosas medidas sanitarias de confinamiento y aislamiento social, generando una crisis sin precedentes en el mundo en diferentes aspectos (Cuadra et al., 2023). En el ámbito educativo, su impacto ha sido particularmente profundo, pues uno de los sectores que más se vio afectado por la pandemia causada por el COVID-19 fue el sistema educativo del país. Padres, maestros y niños experimentaron este cambio, el cual parece que podría dictar una nueva norma para la educación en Puerto Rico (El Nuevo Día, 2023). El rendimiento académico en la educación media y superior es un fenómeno que se puede ver afectado por diversas variables (Barreto & Bermúdez, 2017). Esto ha ido generando cambios sustanciales en la elección de concentraciones universitarias. Este estudio busca explorar cómo la pandemia ha afectado las preferencias de concentración, centrándose en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras. 

Desde la llegada de la pandemia a Puerto Rico, sus efectos en la educación superior han sido notorios. La necesidad de adaptarse a modalidades de aprendizaje en línea, restricciones de movilidad y cambios en la dinámica universitaria ha llevado a una reconsideración de las elecciones académicas. Hay que reconocer que la pandemia del COVID-19 implicó una reorganización total en todos los niveles, incluyendo los servicios sociales y educativos (Cedeño et al., 2023). 

En este contexto, surge la pregunta central de este estudio: ¿Cómo ha influido la pandemia en la elección de concentraciones universitarias, particularmente favoreciendo áreas relacionadas con ciencias, tecnología y comunicaciones? El ser humano siempre buscará hacerles frente a los problemas, pues es una característica innata, e incluso, se pudiera decir que forma parte de la programación inmersa dentro de los genes del ser humano, siendo esta capacidad de afrontamiento una manifestación clara de su resiliencia (Ungar, 2021). A raíz de esta consideración, postulamos la hipótesis de que las necesidades generadas por la pandemia, como la demanda de profesionales en campos críticos para la crisis sanitaria, han propiciado un cambio en las preferencias de los estudiantes hacia concentraciones que puedan abordar las demandas emergentes de la sociedad. 

Históricamente, la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, ha sido un referente educativo en la Isla. La verdadera motivación del estudiante universitario es aprender en un ambiente de universalidad del conocimiento, pues cada lección aprendida le permite diversificarse en la carrera escogida y representa un escalón más en la meta hacia su logro académico (Polanco, 2005). Sin embargo, la pandemia ha provocado fluctuaciones en la matrícula y en la dinámica de admisiones. Se observa un aumento en la necesidad de estudiantes, con la universidad enfrentando desafíos externos que requieren una adaptación estratégica en la oferta académica.   

En términos cuantitativos, en este estudio se explorarán las estadísticas de matriculados y admitidos en diferentes facultades, con un enfoque especial en las concentraciones relacionadas con ciencias, tecnología y comunicaciones. La pandemia, al incrementar la demanda en estas áreas, puede haber propiciado un aumento en la preferencia por estas concentraciones, tanto por parte de los estudiantes como de la propia universidad, en su necesidad de profesionales especializados.   

Este estudio contribuirá a comprender el impacto multidimensional de la pandemia en la educación superior, ofreciendo perspectivas valiosas sobre las transformaciones en las elecciones académicas. A medida que la sociedad se adapta a un nuevo panorama, es esencial comprender cómo estos cambios influyen en la formación académica y profesional de los estudiantes, así como en las medidas implementadas por la universidad para satisfacer las demandas cambiantes.   

Metodología 

La base de datos utilizada se compuso de información recopilada de diversas fuentes disponibles en la página de División de Investigación Institucional y Avalúo de la Comunidad Universitaria de la Universidad de Puerto Rico, Recinto Río Piedras. Se seleccionó un conjunto de variables claves, entre las cuales se incluyen las facultades del recinto, las concentraciones académicas, los estudiantes admitidos, los estudiantes matriculados, los estudiantes graduados, el género (mujeres, hombres) de los participantes, su índice mínimo de ingreso (IMI) y los cupos y cantidad de solicitantes. Estos datos proporcionarán una visión integral de la dinámica académica y demográfica de la comunidad universitaria.  

Para analizar la complejidad de los datos, se aplicaron diversas pruebas estadísticas. Se realizaron conceptos básicos del análisis descriptivo univariado y multivariado, explorando la estructura y las interrelaciones de las variables. La distribución normal multivariada permitió evaluar la normalidad de los datos. Para la inferencia con datos multivariados, se emplearon varias técnicas. Primeramente, se realizó un análisis de componentes principales (PCA), revelando patrones subyacentes en la variabilidad de las variables. Luego, se implementó un análisis factorial exploratorio (EFA) para identificar dimensiones latentes y evaluar la carga factorial de las variables, y un análisis discriminante (DA) para clasificar y diferenciar entre los grupos de interés. Finalmente, se condujo un análisis de correlación canónica (CCA) que permitió explorar las relaciones entre dos conjuntos de variables. Para la metodología del análisis discriminante, optamos por segmentar las facultades en dos grupos designados como Grupo 1 y Grupo 2. Esta estratificación tiene como objetivo potenciar la capacidad del modelo para discernir diferencias más específicas, permitiendo que se enfoque en las particularidades únicas de cada grupo. Esta división podría mejorar la capacidad predictiva del modelo al identificar patrones más distintivos. Los grupos se definieron de la siguiente manera:   

  • Grupo 1: Escuela de Arquitectura, Facultad de Ciencias Sociales, Facultad de Comunicación e Información, Facultad de Educación.  

  • Grupo 2: Facultad de Administración de Empresas, Facultad de Humanidades, Facultad de Ciencias Naturales, Facultad de Estudios Generales. 

Se confeccionaron tres bases de datos correspondientes a los años académicos 2017, 2020 y 2021, cada una reflejando diferentes momentos de la evolución en preferencias estudiantiles hacia las distintas concentraciones durante la pandemia. Estas bases de datos fueron diseñadas para ser exhaustivas y permitir un análisis detallado de las tendencias a lo largo del tiempo.    

La metodología se orientó hacia un análisis exploratorio-descriptivo, buscando proporcionar una comprensión profunda del impacto de la pandemia en la comunidad universitaria. Se utilizaron técnicas estadísticas para revelar patrones, correlaciones y posibles asociaciones entre las variables seleccionadas.   

Resultados 

En el análisis de componentes principales (PCA) para el año 2017, se observa que las variables "Admitidos" y "Matriculados" contribuyen significativamente a la variabilidad total, representando el 75% de la varianza total en el primer componente principal. La relación positiva entre estas variables sugiere una tendencia al aumento en la admisión y matriculación de estudiantes. Este patrón se mantiene consistente en 2020 y 2021, donde se confirma una contribución importante de "Admitidos" y "Matriculados" a la variabilidad total, con el 70% y 74% de la varianza explicada por el primer componente principal, respectivamente. Además, la relación positiva persiste, señalando un aumento continuo en la demanda estudiantil por parte de la universidad.   

El análisis discriminante (DA) revela que, a lo largo de los años, los modelos de clasificación logran una tasa de aciertos del 92%, con un margen de error del 8%. Este resultado indica una consistencia en la capacidad predictiva del modelo para distinguir entre las categorías dentro de la base de datos. Aunque la prueba de chi-cuadrado para la homogeneidad de matrices de covarianza sugiere diferencias significativas entre las categorías, los modelos discriminantes demuestran fortaleza en su capacidad para clasificar correctamente la mayoría de las observaciones.   

El Análisis Factorial Exploratorio (EFA) revela la ausencia de factores latentes que expliquen la variabilidad entre las variables observadas de los años académicos 2017, 2020 y 2021. Todas las variables parecían estar relacionadas entre sí, sin presentar distinciones o agrupamientos que pudieran señalar factores subyacentes explicativos.   

En cuanto al análisis de correlación canónica (CCA), en 2017 se evidencia una distribución específica de admitidos, matriculados y graduados para diferentes concentraciones. La información para 2020 y 2021 se enfoca en cantidades de IMI, Cupos y Solicitantes para las concentraciones, mostrando cambios en la oferta educativa y las preferencias de los estudiantes.   

Discusión de resultados 

Tras analizar los pasados resultados, notamos que a lo largo de los años destaca una estabilidad general en las preferencias de concentraciones, con Biología, Contabilidad y Gerencia de mercadeo como opciones recurrentes. A pesar del aumento general en "Admitidos" y "Matriculados", la pandemia parece haber influido en variaciones en las elecciones de concentraciones en 2021. Se observan cambios en las preferencias, posiblemente reflejando adaptaciones en la demanda estudiantil en respuesta a las circunstancias pandémicas.   

Una de las observaciones más significativas es la disminución en la cantidad de solicitudes a la universidad, lo que sugiere una falta de demanda estudiantil, posiblemente exacerbada por la crisis pandémica y la disminución de la población en Puerto Rico. La relevancia de esta problemática es innegable para los objetivos de esta investigación, ya que la disminución demográfica experimentada en la isla en los últimos años es uno de los principales factores que inciden en la reducción de las matrículas, tanto en la Universidad de Puerto Rico como en el sistema privado de educación. De hecho, las cifras proyectadas para los próximos seis años indican un escenario aún más desafiante, con una disminución que podría superar el 50% de la matrícula registrada en 2017 (Pineda, 2023).   

Asimismo, se ha notado una reducción en los puntajes IMI, indicando que la universidad ha ajustado estos puntajes para admitir a más estudiantes, lo que refleja la falta de demanda estudiantil por parte de la universidad con el paso de los años.   

También, se logró descubrir la influencia significativa de algunas de las variables clave en el análisis, como la cantidad de estudiantes admitidos, matriculados, graduados, mujeres y hombres. Estas variables han sido determinantes en la estructura de los datos y han demostrado ser indicadores importantes de las preferencias estudiantiles. Por ejemplo, se observa que, en comparación con los hombres, la cantidad de mujeres se ha mantenido relativamente estable, con un doble de mujeres matriculadas en la universidad en comparación con los hombres. Este hallazgo sugiere una consistencia en la composición de género de la población estudiantil a lo largo del tiempo.   

Además, se ha evidenciado un aumento en la cantidad de admitidos y matriculados a lo largo de los años, mientras que la cantidad de solicitantes ha disminuido significativamente. Esta tendencia señala una mayor necesidad de estudiantes dentro de la universidad. Por otro lado, la cantidad de graduados ha experimentado un aumento constante, lo que refleja una mayor tasa de finalización de programas académicos dentro de la universidad. También, es importante destacar que el análisis también ha revelado algunas limitaciones, como la alta variabilidad en los datos debido a diferencias en la cantidad de estudiantes por concentración. Esta variabilidad puede plantear desafíos en la interpretación de los resultados y resalta la necesidad de un enfoque más detallado en futuras investigaciones.    

Conclusión 

A lo largo de los años académicos 2017, 2020 y 2021, se observó un cambio notable en las elecciones académicas de los estudiantes universitarios, marcado especialmente por la influencia de la pandemia de COVID-19. La toma de decisiones con fundamento empírico es un paradigma universalmente reconocido que conlleva a una gestión eficiente de todos los procesos productivos y sociales que involucran a una nación. En ese sentido, conviene mencionar que ninguna investigación científica puede prescindir del sustento descriptivo de la realidad problemática, con fines de entendimiento, para una comprensión posterior a los sucesos que acontecen a una población (Chafloque et al., 2023). Este estudio, que se centró en análisis multivariados como PCA, EFA, DA y CCA, proporciona una visión profunda de cómo las preferencias y tendencias han evolucionado en respuesta a los desafíos y cambios sociales.   

Los resultados del análisis de los datos de la Universidad de Puerto Rico - Recinto Río Piedras ofrecen una visión profunda sobre cómo la pandemia ha impactado las decisiones de los estudiantes al seleccionar sus concentraciones. En términos de género, se observa un cambio significativo, ya que las mujeres ahora son más predominantes en carreras relacionadas con la ciencia, y la brecha entre la cantidad de mujeres y hombres graduados se ha ampliado, reflejando una tendencia creciente hacia la participación femenina en estas áreas. Como propone Harding (1993), científicas, del pasado y del presente, cuyas valerosas luchas y logros, conseguidos con gran esfuerzo, han hecho posible que las mujeres de hoy disfrutemos de una educación científica, y nos permiten empezar a comprender por qué esto sólo es el principio de la revolución feminista en la ciencia. 

La hipótesis planteada inicialmente en este estudio se confirma en gran medida. La pandemia ha generado circunstancias que han influido en las preferencias de los estudiantes, evidenciadas por cambios en las concentraciones seleccionadas. Mientras que la elección de carrera es producto de las experiencias vividas y de las condiciones sociales, culturales y económicas de cada individuo, en ella puede haber constreñimientos de clase, culturales, de género o económicos (Castañeda-Rentería & Solorio-Aceves, 2014). Es destacable que algunas concentraciones, como Contabilidad, han logrado mantener su posición entre las 10 concentraciones más populares, a pesar de los retos de la pandemia. Este fenómeno podría indicar una estabilidad relativa en ciertas áreas, posiblemente debido a su relevancia continua en contextos económicos desafiantes.   

En términos de facultades, se observa que Administración de Empresas y Ciencias Naturales son las más concurridas, lo que indica una tendencia constante en la elección de concentraciones. Parte de esto se debe a que el coronavirus ha despertado el interés de los estudiantes por la salud. La demanda para cursar medicina en las universidades públicas se ha disparado un 44% en un año, pasando de 44,589 solicitudes en el curso 2019 a 64,164 en 2020 (Pinedo, 2021). Este hecho podría estar relacionado con la percepción de la utilidad práctica de estas disciplinas en el contexto socioeconómico actual. La adaptabilidad y relevancia de estas facultades pueden haber influido en su popularidad continua. Algunos resultados de las pruebas aplicadas respaldan la noción de que la pandemia ha generado cambios en las preferencias de los estudiantes. Estos cambios pueden atribuirse a la demanda de profesionales en campos críticos para la crisis sanitaria, lo que ha motivado a los estudiantes a buscar concentraciones que les permitan abordar las demandas emergentes de la sociedad. Tras analizar gráficamente la cantidad de solicitudes por concentración, se destacó una disminución en la matrícula durante los años 2017 a 2021. Es relevante señalar que, a pesar de la disminución general en la matrícula, hubo un aumento significativo en las concentraciones de Biología y Psicología. Este aumento puede indicar un interés creciente en temas de salud física y mental entre los estudiantes. La pandemia y su impacto en el sector de salud probablemente despertaron este interés, ya que los estudiantes han percibido la creciente demanda laboral en estas áreas (ver Figura 1).    

Figura 1: Cantidad de solicitudes para las 10 concentraciones más solicitadas del año 2021 

Fuente: Elaboración nuestra a partir de los datos de la División de Investigación Institucional y Avalúo de la Comunidad Universitaria de la UPRRP 

En conclusión, es evidente que se han producido cambios significativos en las preferencias estudiantiles con respecto a su selección de concentraciones universitarias. A pesar de cierta estabilidad general en las elecciones de concentraciones, se observa un aumento marcado en áreas como Biología y Psicología, incluso en medio de una disminución en la matrícula en otras áreas de estudio. Estos cambios sugieren una adaptación de la demanda estudiantil, posiblemente influenciada por la pandemia y su impacto en el sector de la salud. La crisis sanitaria ha aumentado la conciencia sobre temas de salud física y mental, lo que se refleja en la creciente preferencia por concentraciones relacionadas con estas áreas. Este fenómeno podría ser una respuesta directa a la necesidad laboral en sectores críticos durante la pandemia. También es importante destacar la observación de una disminución en los puntajes de ingreso IMI, lo que indica que la universidad ha ajustado sus estándares de admisión para atraer a más estudiantes, lo que subraya la creciente necesidad de abordar la disminución de la demanda estudiantil.   

El análisis de los resultados revela un panorama complejo en el que la pandemia ha afectado las decisiones de los estudiantes al seleccionar concentraciones. Se confirma que las circunstancias generadas por la pandemia han influido en las preferencias de los estudiantes, y se observan cambios notables en la distribución de género en ciertas disciplinas. Las facultades de Ciencias Naturales y Administración de Empresas siguen siendo las más populares, y algunas concentraciones han demostrado una resiliencia relativa a pesar de los desafíos. En este contexto, es crucial continuar monitoreando las tendencias y ajustar estrategias educativas para abordar las cambiantes necesidades de los estudiantes en medio de situaciones adversas como la pandemia. 

Referencias  

Barreto, F., & Bermúdez, J. (2017). Clima escolar y rendimiento académico en estudiantes de preparatoria. Daena: International Journal of Good Conscience, 12(2), 31-44. http://www.spentamexico.org/v12-n2/A2.12(2)31-44.pdf 

Castañeda-Rentería, L. I., & Solorio-Aceves, M. G. (2014). La elección de carrera: entre la vocación y las ofertas institucionales. Revista de Educación Y Desarrollo, 28, 55–59  

Cedeño, Y., Nieves, I., & Pérez, N. (2023). Educación escolar y covid-19: Análisis desde el Trabajo Social en Puerto Rico. Revista Reflexiones, 102(1). https://doi.org/10.15517/rr.v102i00.54748 

Chafloque, S., Cardozo, M., Díaz, W., Chafloque, S., & Chafloque, F. (2023). Impacto de la pandemia en la comunidad universitaria de la Universidad Nacional de Trujillo. Revista de Investigación Estadística, 5(1), 46–55. https://revistas.unitru.edu.pe/index.php/REDIES/article/view/5705 

Cuadra, M., Gutiérrez, R., Alarcón, R., Alarcón, J., & Chávez, T. (2023). Impacto psicosocial del confinamiento por la covid-19 en estudiantes de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad Nacional de Trujillo. Revista de Investigación Estadística, 5(1), 34–45. https://revistas.unitru.edu.pe/index.php/REDIES/article/view/5704 

División de Investigación Institucional y Avalúo. (s.f.). Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras. https://academicos.uprrp.edu/diia/ 

Harding, S. (1993). Ciencia y Feminismo. Ediciones Morata.  https://edmorata.es/wp-content/uploads/2020/06/Harding.CienciaFeminismo.PR_.pdf   

Pineda, L. (2023, abril 13). Descenso de matrículas en universidades implicaría más del 50% de lo que había en 2017. El Nuevo Día. https://www.noticel.com/educacion/ahora/top-stories/20230413/descenso-de-matriculas-en-universidades-implicaria-mas-del-50-de-lo-que-habia-en-2017/ 

Pinedo, M. (2021, mayo 18). La pandemia dispara la demanda para estudiar ciencias de la salud. El País. https://elpais.com/educacion/2021-05-15/la-pandemia-dispara-la-demanda-para-estudiar-ciencias-de-la-salud.html 

Polanco, A. (2005). La motivación en los estudiantes universitarios. Actualidades Investigativas en Educación, 5(2).   https://doi.org/10.15517/aie.v5i2.9157 

Ungar, M. (Ed.). (2021). Introduction. Multisystemic resilience: adaptation and transformation in contexts of change. Oxford. https://academic.oup.com/book/41117  


Posted on May 30, 2024 .

​​La iconografía del espejo en la creación ​​​artística contemporánea (1970-2000)

The iconography of the mirror in contemporary ​​​artistic creation (1970-2000)  

  

Daniela Alvarado Rivera
Departamento de Historia del Arte
Facultad de Humanidades, UPR RP

 

Recibido: 01/03/2024; Revisado: 01/05/2024; Aceptado: 03/05/2024

Resumen 

Tradicionalmente relacionado con la alegoría de la vanidad, el espejo ha sido un elemento frecuente en la historia del arte occidental, asociado con la mitología clásica y la esfera de lo femenino. No obstante, en la historia plástica contemporánea, el espejo protagoniza importantes interpretaciones que replantean cuestiones de género, de identidad y de la mirada. Cuando mujeres artistas desafían la iconografía del espejo, abren paso a su reafirmación como creadoras de mundos donde representan sus visiones y experiencias, fuera del imaginario masculino. 

Palabras claves: iconografía, espejo, Venus, ventana, mujeres 

Abstract 

Traditionally related to the allegory of vanity, the mirror has been a frequent element in the history of Western art, associated with classical mythology and the sphere of the feminine. However, in contemporary art, the mirror stars in important interpretations, which rethink issues of gender, identity and the gaze. When female artists challenge the iconography of the mirror, they make way for their reaffirmation as creators of worlds where they represent their visions and experiences, outside the male imagination. 

Keywords: iconography, mirror, Venus, window, women

Introducción  

Los espejos han tenido diferentes interpretaciones y usos en la historia del arte y de la cultura, entre ellos, como símbolo de veracidad, objetividad y sinceridad (Serrano, 2005). A lo largo de la historia del arte, los artistas han utilizado el espejo para representar la vanidad, el tiempo, la autoexploración, entre otras temáticas. Las distintas variaciones del significado del espejo se relacionan con el tiempo en el que las obras se han producido. Por esta razón, en las representaciones creadas entre los siglos XVI y XVIII, el objeto del espejo era relacionado con la construcción de la feminidad, usando el personaje de Venus acompañada de un espejo como alegoría de la vanidad. Esto crea una visión de la contemplación como un acto femenino, de la que el hombre no era parte.  

No obstante, en las obras de mujeres artistas, el espejo es empleado para representar temas de identidad. En este sentido, en el arte contemporáneo, el espejo se usa para representar la complejidad del ser, atacando ideas de la identidad y las distintas miradas (Black, 2020). Por otro lado, la simbología del espejo está ligada a la época en la que fue producida y quién creó las obras, acentuando la importancia y relevancia de identificar el creador o creadora para llegar a un análisis sobre una pieza y cómo esto puede influenciar dicha lectura.  Las ideas de los años 70 sobre la mujer en la historia del arte influenciaron la percepción y la creación de las obras de arte. Las obras producidas desde los 1970 hasta el 2020 por artistas contemporáneas desafían el estereotipo del espejo asociado con la feminidad e imagen de la vanidad o autoexploración como algo negativo.  

Las metodologías aplicadas en este estudio son la iconografía y la iconología, así como la teoría feminista del arte. Los análisis visuales por medio de la iconografía establecerán cuáles son los repertorios visuales que se repiten en las obras.  Igualmente, plantearán la relación entre los símbolos que se representan en las composiciones y sus significados. Por tanto, en el estudio, la iconología ayudará a identificar si existe alguna evolución de los símbolos y su contexto en la cultura. Por último, la teoría feminista del arte se aplica debido a que la investigación se centra en la obra de mujeres artistas y el desafío de la mirada masculina en la historia del arte, cuestionando esa perspectiva para darle paso a un análisis de género y la evolución de símbolos a lo largo de la historia. 

La tradición del espejo 

La fascinación de una duplicación ilusoria de la realidad a través de superficies reflejantes siempre ha fomentado una curiosidad por el espejo a través de la historia del ser humano (Román, 2011). Los significados de este objeto incluyen temáticas tanto morales como cognitivas, por lo tanto, se le adjudica definiciones negativas y positivas, lo que crea una contradicción dentro de un mismo objeto. Las dos etimologías con las cuales el objeto está relacionado son speculum y mirare, ambas palabras derivadas del latín. La primera alude al lado cognitivo, que se traduce por “especular” en la imagen de la realidad; la segunda, implica “mirarse” o “mirar”, aludiendo al lado de la contemplación del ser (Battistini, 2005). 

No es hasta varios siglos más tarde que al espejo se le brinda una connotación “negativa” o un punto de vista que apela a la mirada masculina y las aplicaciones de la feminidad (Román, 2011). Según Battistini, los nombres atribuidos a este objeto es lo que crea su carácter de dualidad donde dos definiciones pueden coexistir (138). Por ende, en el Renacimiento se convierte en una imagen alegórica sobre la vanidad y se relaciona con conocerse a sí mismo. 

En la obra Venus del espejo (1555) de Tiziano (ver Figura 1), el artista deja claro estos códigos que llevan al estereotipo de la mujer frente al espejo, como ese peligro a la obsesión de su apariencia, la cual es propagada por su belleza y sexualidad. El espectador interrumpe la diosa al encontrarse en una escena privada, por lo que la hace una imagen erótica. No obstante, ella no parece estar asustada, sino que acepta su rol de ser mirada. Este tipo de representación corresponde al ideal de que el espectador, comúnmente masculino, crea una imagen de una figura femenina que corresponda a esa mirada masculina (Berger, 2008). La Venus con el espejo de Tiziano puede ser vista como el antecedente de las próximas representaciones de las Venus del espejo a través de la historia.

Figura 1: Tiziano, La Venus del espejo, 1555 

Fuente: National Gallery, Washington, D.C.  

Entonces, el espejo originalmente no era considerado un objeto asociado con la mujer contemplativa, consciente de su belleza, el erotismo, la vanidad o la desnudez, sino que funcionaba como un objeto que facilitaba la autoexploración. Aunque es considerado como herramienta para la reflexión, los artistas favorecen unas representaciones más que a otras. En consecuencia, la lujuria y el orgullo se convierten en los símbolos claves del espejo donde admirarse o embellecerse era considerado como ejemplos de debilidad y decadencia (Battistini, 2005). Como resultado, los espejos han sido vistos de manera superficial, opacando un poco su función para profundizar temáticas del alma.  

El espejo en el arte contemporáneo 

En el arte contemporáneo, se contradicen estas versiones tradicionales del espejo como alegoría de la vanidad. De esta manera abre paso a nuevas interpretaciones utilizando el espejo como objeto mismo en las composiciones para adentrar al espectador en la experiencia de la contemplación (Demere, 2014). El espejo cobra popularidad por varias razones, pero la principal es servir como una herramienta para tratar temáticas que tengan que ver con el ser y la trascendencia de este. La asociación como mimesis pasa a un segundo plano; por lo que, según Black (2020), el espejo se transforma en un objeto que representa la autorreflexión, en el cual trabajan ideas de la identidad y género. Entonces, dentro de los ideales y la teoría feminista que influencian a las artistas en la época de los setenta, comienzan a reclamar o rescatar la identidad femenina. Sobre esta idea, Patricia Mayayo, en Historias de mujeres, historias del arte, explica lo siguiente:

[…] mientras que estos se proponen convertir el cuerpo de la mujer en objeto de consumo erótico, alentando el placer escópico del espectador (masculino), aquella aspira a reflejar con autenticidad la sexualidad femenina, otorgando a las mujeres la posibilidad de construir una representación de su propio cuerpo que no se vea filtrada por la mirada masculina. (2003, p. 108) 

Por esta razón, las artistas dejan a un lado la identidad construida por la mirada masculina para crear repertorios visuales que vayan acorde con la representación femenina desde sus experiencias. 

Una temática importante dentro de esta reinterpretación del objeto es la conciencia artística y la reafirmación creadora de estas artistas. Linda ​​​     ​Nochlin, en Why have there been no great women artists? (1971), expone que la sociedad ha establecido dos tipos de grandeza entre el hombre y la mujer, donde a propósito trata de catalogar el arte hecho por mujeres como un estilo “femenino”. Por ende, la sociedad no las consideraba dignas de grandeza entre los “genios del arte”. Las mujeres artistas siempre han existido, solo que a lo largo de la historia del arte han sido invisibilizadas. Las obras de las artistas reafirman que no son solo modelos, sino son creadoras de su imagen, para abrir paso a un nuevo lenguaje dentro de las representaciones, en este caso de la mujer y el espejo.  

La artista Myrna Báez crea en respuesta a la Venus del espejo de Velázquez, la Venus roja (1979) (ver Figura 2). En la obra de la artista, la diosa es una silueta de color rojo y está en el primer plano de la composición. En el segundo plano, observamos a los putti aguantando un espejo rectangular de manera vertical. En la obra de Velázquez el espejo no tiene la misma longitud, pero la artista hace este cambio para que el espectador vea a Velázquez y sepa quién ha creado a esta Venus. Además de un guiño a la historia del arte, como lo asegura Fernández (2001), esto puede servir para interpretar una crítica hacia las representaciones de la época al crear un cuerpo sexualizado, prohibido. El cuerpo y rostro del sujeto permanece anónimo, mientras que lo único que se identifica es a Velázquez devolviéndole la mirada a la modelo y al espectador.  

Figura 2: Myrna Báez, Venus Roja, 1979 

Fuente: Museo de Arte Costarricense (MAC)  

En la misma línea de crear nuevas narrativas dentro de la iconografía y el estereotipo de la feminidad, Carrie Mae Weems en su obra, Not Manet’s Type (1997) (ver Figura 3), trae la problemática del canon de belleza occidental y su rol dentro de esta como una mujer y artista negra. Weems usa su cuerpo como protagonista y posa para esta serie de fotografías donde cuestiona si la tradición occidental aceptaría a cuerpos como el de ella. Por esta razón, se pregunta si los “grandes maestros o genios del arte” la considerarían como una musa o modelo. 

En la fotografía, la artista se encuentra en su habitación, pero esta escena no está capturada directamente, sino que la vemos a través del espejo de manera indirecta. La figura femenina desnuda y la escena son enmarcadas por el espejo circular que está encima de un tocador donde se ve ella al frente de su cama y la foto es acompañada con la siguiente descripción: “Era claro, yo no era el tipo de Manet, Picasso–que tenía su manera con las mujeres– solo me usó y Duchamp nunca me consideró”.

Figura 3: Carrie Mae Weems, Not Manet’s Type, 1997 

Fuente: San Francisco Museum of Modern Art (SFMOMA)  

Al Weems estar desnuda frente a su cama dialoga sobre su lugar dentro de las Venus donde el erotismo reside comúnmente en el dormitorio, en la cama. Por esta razón, la artista no se recuesta en la cama lo que apunta a la crítica de la imposición del canon de belleza alrededor de la Venus como una mujer blanca. Además de ser una crítica a la narrativa historiográfica del arte, se aplica la mirada del mirón que invade una escena privada donde una mujer contempla, dándonos la espalda.  

Del espejo a la ventana 

Las ventanas han sido usadas en el arte para complementar las composiciones y establecer una relación entre los espacios interiores y exteriores. Calabi et al. (2022) exponen que lo que se ve en el espejo o una ventana se sujeta al punto de vista en el que el observador percibe la imagen. Las pinturas o fotografías, en cambio, son estáticas y no ofrecen los distintos puntos de vista que los espejos o las ventanas pueden alcanzar. En este caso, la afirmación de las artistas y su conciencia creadora es reforzada cuando ellas usan sus obras para adentrar al espectador a sus mundos creativos. Por ende, Goscilo (2010) explica cómo el espejo en las obras puede manifestarse, no como un objeto reflector, sino como objeto que nos lleva a otros lugares. El uso del espejo como ventana es una práctica que aplican varios artistas para mostrar un portal hacia nuevos mundos creados dentro de las composiciones. Sobre esto, Dávila (2015) explica que “el espejo no tan solo refleja formas externas y superficiales, sino que se puede convertir en traslúcido como objeto de reflexión”. 

En las obras de Báez, el uso de marcos que aluden a espejos como ventanas es una práctica constante. De esta manera, crea una imagen dinámica dentro de una estática donde hace referencia al exterior a través de lo que sería el reflejo de una figura. María Eugenia en el paisaje (1981) se trata de una obra donde una mujer está sentada frente a un espejo, pero su apariencia no es lo que se refleja en este (ver Figura 4). Con el empleo de aguadas, la artista superpone manchas que adentran a la audiencia a paisajes que están dentro del espejo. La mujer se muestra en un estado contemplativo, pero la artista muestra un exterior dentro de un espacio que parece ser cerrado. El espejo funciona como ventana que nos muestra un paisaje, a lo que puede referirse a una añoranza de salir de su espacio. 

Figura 4: Myrna Báez, María Eugenia en el Paisaje, 1981 

Fuente: Colección Dr. Francisco Olazábal y Sra. Olga Olazábal

Otro ejemplo de cómo el espejo se utiliza como ventana es El tocador (1985) (ver Figura 5). En la composición, una mujer está sentada frente a su tocador delante un espejo. Dentro de él se observa un contorno de una figura esquemática casi translúcida que se pierde en el paisaje que se proyecta y se desborda a las paredes del interior de la habitación. El color rojo de la figura se enfatiza por los tonos fríos que la artista emplea en el paisaje montañoso que representa. Báez crea espacios interiores y exteriores donde estas composiciones se superponen para crear un escenario nuevo donde ambos conviven en una misma imagen que solo puede ocurrir en la pintura. Por esta razón, la artista usa su creatividad para adentrar al espectador a mundos imaginarios llenos de nostalgia. 

Figura 5: Myrna Báez, El tocador, 1985 

​​​​​Fuente: Ubicación desconocida 

El reconocimiento de la creación artística de las mujeres demuestra cómo toman control de sus imágenes para así proponer una nueva manera de mirar y representar al cuerpo femenino. De esta manera, a través de sus composiciones visibilizan la problemática de los cánones de belleza occidental y adentran a su audiencia a mundos imaginarios. El tratamiento del espejo como ventana deja entender el interés en experimentar con espacios, normalmente domésticos, situando al sujeto en una situación donde el interior y exterior conviven en esa realidad.   

Conclusión 

El espejo en la contemporaneidad desafía la naturaleza tradicional del objeto como uno alegórico para tratar temáticas de la identidad. A través de las obras, se observa una intención de criticar y romper con la tradicionalidad de la Venus del espejo, para así enfocarse en crear y transformar la noción de una identidad limitada femenina y otros géneros. Un ejemplo de este interés hacia una nueva identidad femenina está presente en obras como las de Carrie Mae Weems, en las que no solo explora el lugar de la mujer en el arte, sino que también el de las figuras femeninas negras dentro de estos contextos de belleza.  

Al reconocer estas representaciones de la feminidad impuestas por el hombre puede abrir paso a nuevos repertorios visuales. Sloey (2021) argumenta que el espejo no residirá simplemente su “capacidad para reflejar, no se trata sólo de la apariencia, sino que adquiere un significado simbólico de la búsqueda de la comprensión” (28). Finalmente, las artistas mujeres tratan el espejo como una herramienta para explorar su identidad y restablecerla desde su visión y sus experiencias.

Referencias 

Battistini, M., & Sartarelli, S. (2005). Symbols and allegories in art. Choice Reviews Online, 43(01), 43-85. https://doi.org/10.5860/choice.43-0085  

Berger, J. (2008). Ways of seeing. Penguin Classic. 

Black, H. (2020, 14 abril). Reflecting the self: Mirrors in contemporary art. ELEPHANT. https://elephant.art/reflecting-the-self-mirrors-in-contemporary-art  

Calabi, C., Huemer, W., & Santambrogio, M. (2022). Mirrors, windows, and paintings. Estetika: The European Journal of Aesthetics, 59(1), 22–32. https://doi.org/10.33134/eeja.200 

Dávila Del Valle, O. (2015, 6 de febrero). Las especulaciones de Myrna Báez o la pesadilla de Platón. 80grados. www.80grados.net/las-especulaciones-de-myrna-baez-o-la-pesadilla-de-platon-2 

Demere, C. (2014). The viewing self: A reflection on mirrors as medium from the 1960s to the present. Bard Digital Commons, digitalcommons.bard.edu/senproj_s2014/28 

​​​​​Fernández Zavala, M., & Sullivan, E. J. (2001).  Myrna Báez: una artista ante su espejo. Universidad del Sagrado Corazón. 

Goscilo, H. (2010). The mirror in art: Vanitas, veritas, and vision. Studies in 20th & 21st Century Literature, 34(2), 282-319. https://doi.org/10.4148/2334-4415.1733 

​​Mayayo, P. (2003). Historias de mujeres, historias del arte. Catedra Ediciones.​ 

Nochlin, L. (2021). Why have there been no great women artists? Thames & Hudson. (Publicado originalmente en 1971) 

Román Echeverri, C. (2011). Espejos: transparencia, reflejo, contradicción e interacción. Cuadernos de Música, Artes Visuales y Artes Escénicas, 6(1), 65-80. https://www.redalyc.org/pdf/2970/297023464005.pdf 

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Sloey, K. (2021). The iconography of mirrors: the visibility and invisibility of femininity [Tesis de bachillerato, The School of Art Institute of Chicago]. SAIC Digital Collections. https://digitalcollections.saic.edu/islandora/object/islandora%3A124964 


Posted on May 30, 2024 .